Jungkook.
Me removí sobre mi cama al sentir unas palmadas en mi hombro intentando despertarme y me acomode mejor para seguir durmiendo.
—Jungkookie ya tenemos que irnos, Levantate ya! — Escuche la voz alta de Soobin y lo ignore me cubrí por completo con la cobija quería seguir durmiendo pero Soobin seguía insistente.
—Si no te levantas me iré yo sólo a casa — Chasquee la lengua en cuanto escuche sus pasos alejarse de la cama lo cual me hizo levantarme de la cama automáticamente dejando de lado las cobijas pero mi vista aun seguía un poco borrosa.
—Esta bien ya me despertaste...— Frote mis ojos para aclarar mi vista y parpadee varias veces confundido al ver mi habitación ya que no era la mía actualmente.
—Ire a buscar mi bolso hyung ya regreso...— Se fue enseguida y yo me baje de la cama observando mi antigua habitación... Estaba igual a como lo había dejado la última vez.. Mire hacia la cama de nuevo y note que estaba mi bolso sobre está y se veía un poco pesado.
Sin pensarlo tanto busque una ropa de cambio y mis zapatos para arreglarme después de darme una ducha, tenía muchas preguntas en mi cabeza sin ninguna respuesta coherente..
Cuando estuvimos listos nos fuimos de la casa comenzando a caminar hacia la estación de autobuses, pero a medida que íbamos avanzando nuestro alrededor iba cambiando y todo se veía diferente al parecer no íbamos exactamente a la estación de autobuses ya que nuestros pies nos habían guiado a una casa un poco más grande que la nuestra y ambientada a los tiempos del siglo pasado con un balcón en el segundo piso y observamos un hombre vestido de traje quien al parecer nos esperaba cerca de la entrada. Al parecer era un mayordomo..
— Bienvenidos caballeros, justamente los están esperando para almorzar — Nos hizo saber mientras nos regalaba una pequeña sonrisa apacible guiándonos hacia el interior de la casa he instintivamente yo le había tomado la mano a mi hermano al mirarnos un poco confundidos por un breve segundo.
Seguimos al mayordomo hasta lo que parecía ser el comedor de la casa y nos encontramos con una mesa larga llena de platos y copas vacíos. Personas desconocidas rodeaban la mesa tenían pinta de ingleses pero lo que se desconcertó por completo fue ver a mi madre vestida como las otras mujeres y junto a ella se encontraba Billy mirándonos con su típica sonrisa escalofriante... ¿¡Que hacia ese pequeño demonio aquí!?... Estaba muy confundido. Algo no me cuadraba en todo esto era en demasía extraño.
—Jungkookie, no se queden ahí parados como estatuas. Sienten se junto a mi. — La voz suave y animada de mi madre me saco de mis pensamientos mientras que el mayordomo nos quitaba los bolsos para llevárselos a quién sabrá donde y una sirvienta nos indicaba al mismo tiempo donde sentarnos.
Poco después la mesa estuvo llena de comida y bebidas después de dar las gracias todos comenzaron a comer pero yo no toque nada... Y la persona frente a mi tampoco lo hacia ella solo me miraba con una sonrisa dejando apoyado su mentón en la palma de su mano mientras que su codo permanecía apoyándolo sobre la mesa... Era una mujer joven y bonita, una castaña de tez blanca y nívea la cuál estaba vestía con un vestido de color vino y su cabello suelto con varios mechones que caían sobre sus hombros, sus mejilla regordetas llenas de pecas levemente ruborizadas pero sus ojos oscuros me miraban como si conociera todos y cada uno de mis secretos. A mi parecer tenía cierto parecido a una muñeca de porcelana.
También le sostenía la mirada hasta movió sus rojizos labios rellenos y carnosos recordándome a mi querido Jimin-ssi no entendía muy bien lo que decía ya que no podía escuchar su voz pero si le entendí sus ultimas palabras "Huye de aquí.." Esas únicas palabras me hicieron reaccionar parpadear varias veces, salir de mi ensoñación y prestarle más atención a mi entorno, prestar atención a las conversaciones ajenas muy desagradables.
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La casita [KM]
De TodoEn el año 2013 la pequeña familia Jeon se mudo a una casa heredada por los padres de la señora Jeon, lo que sus hijos no sabían era que muchos sucesos perturbadores habían pasado en esa casa habitada por una que otra alma en pena vagando tanto dentr...