Capitulo 6 (Kennet) - Entre sombras y secretos.

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Regresé con mi hermano tomando el camino que rodea el pueblo por comodidad, hay muchas personas que miran con mala cara a Robert, y no dudo que con lo que está pasando en casa lo más probable es que saltará a pelear a la mínima ofensa, así que lo mejor sería evitar roces por hoy.

Cuando llegamos a la casa con los últimos rayos de luz, me invadió una sensación de vacío al ver la granja sin animales, las plantas que podían ser llevadas fueron retiradas, todo desapareció en un día. Sebastian se encargó de eliminar la mitad de nuestras vidas como si en realidad nunca hubiera sido gran cosa, cuando giré a ver a Robert él estaba mirando fijamente al rancho donde solían estar los cerdos, entonces me voltea a ver e inmediatamente comienza a mirar el piso.

Al entrar en la casa, veo a Sebastian sentado en la mesa del comedor con una camisa y unos pantalones sucios de tierra, supongo que no se cambió después de vender todos los animales, tiene una mochila, una chaqueta y un rollo de papel sobre la mesa.

Cuando se percató de nuestra presencia se puso de pie de inmediato.

- ¡¿Dónde se habían metido?! – nos gritó lleno de ira.

Ambos nos detuvimos sorprendidos, esos arrebatos no eran normales en él. Además ni siquiera era tan tarde, tal vez nos demoramos un poco en cerrar, pero en definitiva no era una hora irregular de llegada.

- ¡Trabajando en la maldita choza de libros que supongo también vas a tirar por unas monedas! – oí decir a Robert al lado mío

- ¡No tengo tiempo para esto! – gritó - ¡Tomen asiento, rápido! Necesito que conozcan la ruta –

- ¿Ruta para qué? ¿Ahora seremos nómadas comerciantes? – dijo Robert con acidez mientras tomábamos asiento

Sebastian se le quedó viendo por un segundo, pensando si debía responderle supongo, luego me mira y desliza el amarillento rollo de papel hacia mí. Se notaba que llevaba tiempo guardado y en desuso.

- ¿Qué es esto? – pregunto mientras lo abro

- Un mapa, con la ruta para nuestra primera parada, una cabaña donde dormiremos antes de llegar a nuestro destino - responde papá con un tono ciertamente molesto

El rollo es un gran mapa bastante detallado con el relieve de la zona, a pesar de que el papel estaba desgastado se veía que era un mapa de alta calidad. La ruta era representada por una línea punteada que atraviesa la mitad del mapa, lo extraño era que a mitad del recorrido estaba el bosque Esmeralda cerca al pueblo y... ¿El bosque Negro?

- ¿Esa cabaña esta en el bosque negro? – pregunto

- Si – responde secamente

- El bosque donde se pierde la gente y habitan criaturas mágicas – digo tratando de puntualizar la obvia incoherencia

- Donde se pierde gente sin mapa – puntualiza Sebastian

- Yo digo que la demencia senil le está haciendo efecto finalmente. – comenta Robert

- Me da igual lo que crean, es la ruta que tomaremos mañana –

- ¡¿Qué?! – preguntamos ambos atónitos y sin poder procesar todavía todo

- Quiero que empaquen todo lo que puedan esta noche; lo que les quepa en las mochilas, pero no tanto que estorbe, tomen lo esencial, después volveremos por lo que quede – explicó como si fueran instrucciones de lo más normales

AthreiaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora