¡¡Eres nuestro Aether, te guste o no!!---¿Cómo es que termine así?---

Los recuerdos del pasado y planes a futuro

Advertencia de contenido :

Para mayores de +18 o mas.

Esta historia contiene escenas explícitas de sexo y violencia, incluida la posibilidad de violación al protagonista. Las imágenes y situaciones descritas no son adecuadas para lectores jóvenes. Se advierte que el contenido puede resultar perturbador para algunos lectores.

El lenguaje utilizado en esta historia es fuerte y puede incluir vulgaridades y expresiones ofensivas.

Se incluyen escenas de muerte de personajes.

Todos los personajes de esta historia son mayores de 18 años.

Se recomienda la discreción del lector.

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Al día siguiente:

"Un nuevo día comienza para todas las personas en Mondstadt y en especial para nuestras personitas dentro de la relajatetera que se levantaban con muchas energías para comenzar con sus labores diarias... bueno no todos en la casa portátil tenían mucha estamina. Un rubio se levantaba con ojeras por la diversión de ayer en la noche con su pareja y ella si tenía energía como si no hubiera hecho nada ayer es mas pareciera con más energía de lo normal y sin ojeras"

En el comedor:

—Buaaa... —bostezo Paimon con un poco de sueño— Buenos días Rosaria y ¿Aether? —saludando a sus amigos, pero extraño por ver el estado de su compañero de viajes.

—Buenos días Paimon —saludo Rosaria que extrañamente estaba feliz.

—Buenos... ha... días... ha... Paimon —devolvió el saludo Aether, pero se le veía algo cansado.

—¿Y a ti que te pasa? ¿No dormiste bien o qué? —pregunto Paimon muy confundida.

—Yo... —Aether iba a hablar, pero fue interrumpido.

Aparece épicamente Gordi:

—¡Hoo—hoo-hoo! ¡Buenos días a todos! —saludo Gordi animadamente por ver a todos —¿Señor Aether? ¿Por qué esa cara? —pregunto extrañada por ver la cara cansada del rubio.

—¿Eh...? No es nada Gordi, solo no dormí bien jejeje... —trato de excusarse Aether queriendo evitar hablar del asunto y por qué estaba sintiendo el agarre de la monja en su hombro hacerse más fuerte.

—Paimon no se creó eso... —dijo Paimon mirando al rubio que se puso nervioso.

—¿Hooo? —giro Gordi su cabeza en confusión para ver a Rosaria— ¿Mi señora? —pregunto mirando a la monja que ayuda a Aether a caminar hasta su asiento en la mesa.

—¿Sí? —respondió Rosaria al llamado del ave.

—¿Usted tuvo algo que ver anoche con el descanso del señor Aether? —interrogo Gordi a Rosaria.

—¿Qué hizo Rosaria anoche? —pregunto Paimon con duda e interesada por el asunto.

—Es que ella tu... —no acabo de responder Gordi por que Rosaria le estaba tapando el pico con su mano— ¡Hummm! —trato de hablar.

—¿Oye Rosaria por qué haces eso? ¡Déjala hablar! —grito Paimon a la monja que ni le hizo caso.

—Si dices algo de lo que hice con Aether anoche... —susurro Rosaria con tono frío y serio al oído de Gordi—Te aseguro que hare con tu carne de ave un rico platillo de Pollo en Vessie contigo —amenazo a Gordi haciendo que ella tiemble del miedo.