Sonic y Lightning (Oc): La película (EDITANDO)

Cap I: Conoce a Sonic y Lightning

Green Hills, Montana
10 años después

En medio de la carretera, había un auto de policía estacionado, con un policía adentro, Tom Wachowski, quien estaba encargado de la trampa de velocidad esperando algún crimen que le levantara el ánimo.

—¿De verdad? ¿Ni un auto?— Preguntó el oficial aburrido.

Tom ya empezaba a aburrirse porque llevaba horas, que para él era una eternidad, a que pasara cualquier auto, moto o lo que sea, en serio necesitaba algo con lo cual divertirse. Así que con el radar empezó a jugar que estaba capturando la velocidad de un auto y entonces se golpea el cachete.

—Me aburro.— Comentó con cierto aburrimiento.

—¿Tom, estás ahí?— Preguntó desde la radio Wade, el amigo y compañero de Tom que estaba en la estación de policía de Green Hills en este momento.

—No Wade, estoy en un yate en Barbados… con Rihanna.— Respondió Tom con ironía.

—¡Wow! Qué increíble, envíame fotos por favor.— Contestó el contrario, creyéndose la broma.

—Wade, es obvio que estoy… en la trampa de velocidad.

—¿Tan rápido? ¿Cómo llegaste ahí tan rápido? Barbados está en el océano.

Afortunadamente, Tom ya estaba acostumbrado a las preguntas de su compañero. Aunque a veces desearía que Wade no fuese tan “Wade”.

—Espera, creo que tengo algo.

Así Tom levantaría el radar de velocidad, con algo de emoción. Sin embargo, eso se fue hasta abajo cuando sólo se trataba de una tortuguita que caminaba pacíficamente por el pavimento. El mayor miró su radar de velocidad para ver que la pequeña recorría 001 por hora, por lo que dijo en voz alta.

—¡Hey amigo! ¿Por qué la prisa? ¡Por aquí viven niños!— Empezó a burlarse el oficial de la tortuguita. —Lo siento, sonaba mejor en mi cabeza.

Entonces Tom miró hacia otro lado y no se dio cuenta de que algo veloz pasó a su lado dejando un aura blanca por atrás. Y cuando el radar empieza a sonar, Tom se sorprende que la velocidad era de…

—¿296 millas por hora?— Leyó el medidor sin creer lo que veía.

Y de quien se trataba era de una gata antropomórfica de pelaje albino que corrió esas doscientas noventa y seis millas por hora y que se asomó por detrás del auto para ver su velocidad.

La felina tiene un flequillo blanco con una salpicadura rosa, y sus ojos son azules brillantes. Lleva un suéter rosa con los hombros descubiertos, unos shorts azules oscuros, y un suéter azul marino amarrado a su cintura. También lleva guantes azules oscuros sin dedos, y tiene botas de diferentes colores, el pie izquierdo era azul y el pie derecho rosa. Y por último llevaba un moño rosa en su flequillo.

Y a su lado, había un erizo azul que era de una estatura un poco más baja que la gata. Tiene la púas azules, ojos esmeraldas, y tiene las púas hacia atrás. El ser no lleva nada de ropa, salvo por unos guantes blancos y tenis rojos.

Cuando la gata vio el medidor, le sonrió al erizo con una sonrisa orgullosa, pero el oji jade negó con la cabeza y aprovecho para correr, ya que al parecer, él y ella trataban de descubrir quién era el más veloz de los dos.

Y cuando el cobalto pasó corriendo, superó el récord de la albina con...

—¿300 millas por hora?— Leyó el radar totalmente confundido.

Entonces el erizo azul se asomó e hizo una pose de victoria, mientras la contraria rodaba los ojos aburrida.

Tom decidió bajar de la patrulla para poder descubrir que estaba pasando, pero no vio a nadie ni nada. Sin embargo, logra ver no muy lejos de ahí, una púa azul, y un mechón de pelo blanco. Así tomaría tanto la espina como el mechón, y veía como la púa desprendía una chispa de energía.