Gallito ciego

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Entre feliz a mi cuarto encontrándome a las chicas en la cama de Marizza, me tire a la cama de Lujan y cerré los ojos pensando en la merienda con Pablo, era tan lindo pibe, pero la sonrisa se me borro rápido al recordar que intento sacarme información de fosforito y de Nacho, yo sabia que la invitación tenia algo escondido, pero nadie se niega a una comida gratis.

-¿Y vos? ¿Por que tan sonriente?- Me gire a Lujan y borre la sonrisa tonta que se me había escapado pensando el rubio.

-Nada, nada, es porque comí y estoy en paz.- me acomode mas en la cama viendo a la rubia intentar que Marizza le preste atención, pero antes de lograrlo Luna entro contentísima.

-La verdad, que me fue re bien con la psicóloga, me gusta.- Me levante sorprendida y le lance una almohada a la pelirroja.

-¿Mandaste a Luna por vos? Marizza, la psicóloga le va a dar los resultados a Dunoff, y no es por nada, pero entre Luna y vos no hay ni una pizca de parecido en personalidad o trasfondo.

-¿Vos decís que nos van a atrapar?- Luna se puso nerviosa al instante y Marizza solo rodo los ojos.

-Cállate nena, que la asustas, esos pomelos ni se van a dar cuenta que no soy yo, quédate tranquila que todo va a salir bien, y solo va a ser una vez por semana.- Luna fue la primera en saltar al escuchar eso.

-¡Marizza! No, no me dijiste eso, solo iba a ser una vez.- La de pelo castaño agarro una bolsa de chocolate y se puso a comer de los nervios.

-Bueno, pero ya me dijiste que te gustaba así que... Me tengo que ir.- Las tres miramos sorprendidas a la petiza que salio corriendo de la nada.

-La voy a matar a esta chica.- Mire a Lujan que seguía mirando la puerta.- Anda pensando una excusa porque dentro de poco es la hora de la comida.- Ese comentario logro estresar a la rubia que se paso las manos por la cara.

-Ay no chicas, nos van a descubrir.- Lujan rodo los ojos y se levanto de la cama.

-Mientras vos no digas nada, Boca suelta, no va a pasar nada.- Luji me echo de su cama así que me acosté ahora en la de Marizza.

-Yo no quiero ser pesimista pero concuerdo con Luna, una psicóloga no es chiste, los problemas de Luna no son los mismos que los de Marizza, yo creo que deberíamos hacernos las buenas y decirle a la psicóloga que fue una cambio inocente, que Lunita solamente quería descargar un poco y aprovechamos el momento.- Luna me miro esperanzada pero Lujan que se levanto sobresaltada le bajo los ánimos.

-¡Estas loca!, la van a matar a Marizza, se manda una mas y la sacan de una.

Suspire derrotada porque Lujan tenia razón, así que en vez de darle vueltas al asunto me fui a mi cuarto y le pegue una llamada a mi mama que ya debería haber salido del trabajo.

-¿Alo?

-Hola ma, co...- Antes de poder seguir fui inmediatamente interrumpida por mi madre.

-¿Hola?- Rodé los ojos, odiaba tanto que mi mama ni siquiera me permita responder antes de volver a hablar que me volvía loca, me cansaba tanto que solía pelearme con ella cada que hablábamos por teléfono debido a eso.

-HOLA, mama, soy tu hija, sigo viva, que tal, ¿Como estas?- Me acosté en mi cama mirando el poster de los Backstreet boys junto al poster de Gilda, tal vez debería cambiar de lugar uno de los dos.

-Hola coco, viva, por ahora, se que lo de la fiesta me lo avisaste y fue por una buena causa, pero mi cabeza sigue diciéndome que debería bloquearte el celular.- Abrí los ojos asustada viendo el  celular.- Pero bueno, esperaba cosas peores, acá todo bien, solo me matan los horarios y viajar de acá para allá, ya estoy grande para tanto movimiento.

Pretty BoyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora