- Capítulo 4 -

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(Narra Martina)

Me levanté para ir otra vez a la secundaria, ya estaba harta de ir todos los días.

Fui al baño y veo en mi ropa interior una mancha roja, lo que significa que me bajó.

Lo cual también significa que tengo las hormonas hasta el cielo.

Siempre me agarraba el período los fines de semana, así que no me preocupaba, pero ahora tenía que ir a la escuela, aparte mi tía no me dejaba faltar aunque tenga 50 grados de fiebre.

Me puse ropa cómoda y oscura por si se me llega a manchar que no se note tanto.

Hoy mis primitos no tenían clases así que fui sola hasta la escuela, un poco de paz por fin.

Llegué y me quedé charlando con Mariela, hasta que de reojo veo que llega un castaño acompañado de un morocho con rulos.

Justo hoy tenía que venir el tarado de Danilo??

La puta madre.

"Que onda, wacha?" Preguntó con su típico acento villero mientras pasaba por mi lado y se iba con Carlitos andá a saber dónde.

Yo sonreí y Mariela se rió.

No podía ser más lindo ese pibe.

Tocó el timbre y fui hasta mi salón, me senté con Danilo porque Carlitos tenía otra clase.

"Todo bien?" Me preguntó él mientras yo me sentaba y dejaba la mochila tirada a un costado.

"Bien y vos?" Lo miré directo a los ojos, provocando que me sonroje levemente.

Me daban ganas de agarrarlo, chaparmelo, y....

No voy a dar más detalles.

"Sánchez y compañía." Nos retó la profesora, haciendo que la miremos. "Después voy a hablar con ustedes dos."

Que vieja chota, me arruinó el momento con Danilo.

Terminó la clase y nos quedamos ahí para hablar con la seño.

Mientras ella hablaba yo miraba a Danilo, que se estaba aguantando la risa.

"La puta madre, re gila la vieja esa." Dijo Danilo

"Posta, boludo." Dije y nos reímos.

"Che, que onda el Carlitos?" Dije yo, no lo veíamos desde la mañana.

"Ni idea, seguro está con la Mariela." Dijo y se hizo el ofendido.

Mientras caminábamos no podía dejar de mirarlo, no se si era por lo lindo que era, porque yo estaba ovulando o las dos cosas.

"Que onda los enamorados?" Llegó Carlitos por atrás y nos miró sonriendo.

"Cállate, tarado." Dije y me reí.

"Qué me voy a enamorar de esta roñosa, no se baña nunca." Dijo Danilo y yo hice el montoncito con la mano.

"Que decís, vos te bañas una vez al mes seguro." Dije yo y le di un golpe suave en el hombro.

"Dejen de pelear, tortolitos." Dijo Carlos y se rió.

"So' re pelotudo vo'." Dijo Danilo y nos reímos.

"Se quieren quedar a comer en mi casa?" Preguntó Carlitos y yo asentí.

"Uh, dale." Dijo Danilo re apurado, parece que tenía hambre.

Llegamos a la casa y saludé a la Chila y a los primos de Carlitos.

"Cómo estas, Marti?" Preguntó la tía de Carlos, yo la re quería a ella.

| Solo por vos | Danilo Sánchez Donde viven las historias. Descúbrelo ahora