XII

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Estaba preparándome en el vestuario mi conjunto para el entierro, teníamos uno en especial por si esto pasaba. Aquel vestido negro me llegaba hasta las rodillas, a conjunto de unas botas del mismo color.

Algunos lloros se escuchaban por los rincones de comisaría, viendo como los ojos rojos de la gente se hacían notar.

Me retiré la lágrimas que tenía por mi rostro, colocándome al lado de Gordon el cual me ofreció un abrazo, lo acepté al no poder dejar de sentir la culpa.

-Necesito que "____" venga a mi despacho ahora, antes de irnos.

Escuché la voz de Conway llamando mi nombre, me separé de mi amigo para ir donde me había pedido. Cerré la puerta cuando entré, acercándome al mayor algo desolada, me proporcionó un beso en mis belfos, junto un gran abrazo reconfortante. Observé sus ojos por unos segundos, sonriéndole como podía.

-Sé que no voy a poder acercarme más a ti en todo el día porque tengo que dar la cara en todo el funeral, pero quería darte un beso, si no, no podría estar bien en todo el día.

Me generó una gran sonrisa, por lo cual, le di otro pequeño beso, acariciando su rostro suavemente, para luego separarme de él y salir del sitio, volviendo con mis amigos.

Fuimos en diferentes coches hacia el cementerio, viendo como iba también el coche fúnebre, lleno de flores y decoraciones bonitas.

-¿Darás tu discurso, "____"?

-Si, creo que es lo más justo que puedo hacer por el, además que merece ser reconocido por su buen acto.

Me quedé en silencio durante el resto del trayecto, bajando ya en el cementerio con la expresión triste.

-Ir haciendo hueco cerca del lugar correspondiente, y quien tenga que dar algunas palabras que se ponga cerca del cura.

Veía a Conway organizar todo, sonriendo ante el esfuerzo que estaba dando, sabía que Mousa era amigo mío y le tenía cariño, además que era buen agente y varias veces dio muy buenos momentos.

Todo pasó demasiado rápido, ya habían enterrado al agente, y muchos habían dado su discurso. Estaban todos con las manos en la cara, soltando lágrimas a mas no poder, era todo demasiado triste.

Me subí a un escalón que hacía que me viera algo más alta, para así poder hablar en mi discurso.

-Bien, hoy nos encontramos aquí reunidos debido a la pérdida del agente policial Mousa, que a parte de ser un muy buen policía, era una gran persona, era imposible enfadarse con el, siempre te sacaba una sonrisa cuando más lo necesitabas. No pude estar más tiempo con él del que me gustaría, pero siempre llevaré en el corazón aquel gesto que hizo por su compañera, en este caso, fui yo.

Veía algunas cabezas mirando hacia el suelo, otros muy atentos a mis palabras, y los demás estaban llorando a más no poder.

-Hoy, plegamos la bandera en honor de Mousa, una de las banderas que más luz ha dado a la comisaría, y la que no olvidaré nunca. Gracias por haber venido, espero que nuestro compañero pueda descansar en paz, y protegido por nosotros.

Todos empezaron a aplaudir, dándome las gracias por aquel discurso, con todo el momento se hizo de noche, viendo como aquella tumba se veía iluminada por la bandera que colgaba de ella.

Nos volvimos para comisaría, la mayoría estaba en silencio, otros comentaban lo sucedido, y alguna que otra persona me miraba mal de reojo, haciéndome sentir más culpable.

-Qué se supone que estáis mirando, subnormales, volver a lo vuestro.

La voz de Gustabo me hizo levantar cabeza, no pudiendo evitar el abrazarlo con fuerza, seguía enfadado pero en esos momentos él solo quería verme bien.

Pasaron algunos meses después de aquel incidente, desde ahí tuvimos más cuidado en cuanto secuestros. Conway y yo seguimos teniendo citas y conociéndonos más, no queríamos precipitar las cosas en cuanto a una relación, queríamos ir despacio.

Me habían ascendido a Sub Inspectora, ya que, di todo mi esfuerzo aquellos meses para poder ascender y así ayudar con la malla, que se estaba volviendo un caos.

-Heey, como va mi chica favorita.

Le saqué la lengua a Isidoro, este, me revolvió el cabello en forma de cariño, apoyándose en mi hombro como solía hacer.

-Chicosss, recordar que dentro de poco es el cumpleaños del comisario Freddy, tenía algo pensado, pero no sé si os gustará la idea.

Ambos levantamos la ceja por lo que dijo Gordon, no sabíamos que era el cumple de Trucazo, ni tampoco la idea que tenía mi mejor amigo.

-A ver, suelta.

-Este no es el mejor sitio para decirlo pero una pista, quiero hacerle un viaje a una casa de playa e irnos su círculo de amistad y el unos días allí, para desconectar.

Era brillante, y eso seguro nos viene genial a todos.

-Oye es muy buena idea, pero, ¿quién estará al mando entonces?

-Seguramente deje a Holiday a cargo, no es la primera vez que lo hace. -Comentó Gustabo, que acababa de aparecer por la puerta.

-Pues entonces perfecto, haré una lista con los que irán y los que no, para ir reservando hotel y avión.

Gordon salió de allí después de apuntar a los tres que estábamos en esos momento, yendo donde más gente que consideraba amigo del comisario.

-Allí se podrá ligar más, con el torsito al aire y las chicas paseando por la playa. -Isidoro como no, siempre pensando en lo suyo.

-Mira que hay gente estúpida, pero es que tú superas los límites.

Gustabo se llevó por el cuello a Isidoro mientras este reía, dejándome sola en los vestuarios. De pronto entró Conway antes de yo irme, encontrándome con sus ojos que me dedicaban una linda sonrisa.

Se fue caminando hacia el baño, mirándome de reojo antes de entrar, dándome indicaciones de que fuera con el. Lo seguí detrás, con cuidado de que no entrara nadie justo al vestuario y me vea ir al baño.

Cuando entré en el mismo sitio que el, me proporcionó un beso en los labios, sujetando con sus manos mi cintura.

-No podía estar todo el día sin un beso tuyo, preciosa.

Le volví a besar lentamente, dedicándole una gran sonrisa sin poder dejar de observar sus ojos.

-Pues te tengo buenas noticias, así podrás besarme más.

Le conté la idea que nos dio Gordon antes sobre irnos de vacaciones por el comisario. El le pareció buena idea cuando le conté todo lo que podríamos llegar a hacer, puso una cara de travieso poco después.

-Está bien, pero verás que cuando vuelva todo esto va a estar en llamas.

Tenía razón, pero tanto el como los demás necesitábamos unas vacaciones, poder desconectar del mundo laboral. Aún no teníamos mucha información de donde iríamos, pero se que Gordon lo tendría para mañana.

Las ganas incrementaban, sabiendo que eso podría ser un paso para la felicidad.

...

BEHIND YOU | JACK CONWAYDonde viven las historias. Descúbrelo ahora