DAZAI X MULTISHIPER

Navidad solitaria - Tetchou x Dazai

En el techo de un edificio alto de Yokohama había un hombre portando un abrigo afelpado, junto con guantes y una bufanda mientras contemplaba el horizonte que estaba dibujado enfrente suyo. Era plena noche buena y estaba helando. La noche era nevada y en la ciudad lucía un paisaje hermoso digno de esperar la Navidad.

–¿Acaso tus compañeros no están de fiesta? –hablaron a sus espaldas y se dio la vuelta

–Bueno, siempre he sido más del tipo solitario –se encogió de hombros– ¿y tú no tienes una reunión con tus compañeros?

–Usualmente año con año se hacían estas fiestas decembrinas... pero te imaginarás que con el deceso de nuestro capitán no hay mucho que celebrar, más bien hay que trabajar –el hombre que había llegado era Suehiro Tetchou uno de los perros de caza, portaba su uniforme rojo junto con su espada, parecía que el frío no le hacía algún efecto a su cuerpo

–Me imagino, en la agencia el ánimo tampoco está en su esplendor y sentí tristeza al solo ver las cosas como están –el presidente tampoco estaba en su mejor momento para hacer una gran fiesta como cada año, así que simplemente se reunieron para convivir un poco, Dazai había decidido no ir pensando en que lo mejor era guardarse cualquier comentario gracioso que se le pudiese ocurrir. Una reunión pequeña y pacífica era lo mejor

–La vicecapitana está de peor humor que nunca. Nadie quiso organizar nada, lo único que hacía era dar unas rondas tratando de ayudar a la policía con los maleantes de temporada

–Es raro verte sin Jouno

–Él fue a otra ciudad, está en rondas igual que yo. Ciertamente es raro pasar la navidad solo

–Con el tiempo te acostumbras

–No, desde que estoy con los perros de caza, nunca volví a pasar estas fechas en solitario. Antes jamás había tenido la costumbre de hacer algo con amigos por mi propia cuenta, creo que en realidad no celebraba Navidad o algo así

–Ya somos dos –volvió a mirar el paisaje y el pelinegro se acercó

–Me imagino... conociendo tu expediente...

–No hace falta ni mencionarlo –vio hacia el piso– lo que más me gusta de la Navidad es el festín, puedo comer hasta reventar –se le hizo agua la boca– pero... estar con mis compañeros de la agencia no es desagradable en lo absoluto e interrumpir a Kunikida cada que intenta hacer un brindis es un lujo que me puedo dar –rio para sus adentros

–Te comprendo. Pero en mi caso, Jouno siempre se está molestando porque dice que hago mucho ruido al comer, o que el aroma de mi comida está muy cerca de él o que hago combinaciones extrañas, él es el extraño –por un instante su semblante cambió ligeramente al recordar– pero... estar con él, con Teruko, Tachihara y... bueno era divertido. Supongo que volveré a ser el lobo solitario de Navidad que ya era –hizo una pequeña reverencia a modo de despedida y estaba a punto de irse cuando Dazai le habló

–¡Espera! Ya me dio frío ¿por qué no vamos a comer algo? Y olvidamos por un momento lo solos que estamos –Tetchou sonrió por un instante y ambos bajaron de ahí

Fueron a un restaurante de comida rápida. Lo más típico para comer en Japón, una cubeta de pollo frito del KFC.

–¿En serio esto quieres comer?

–En plena víspera de Navidad es lo más económico y lo que estará disponible de forma inmediata –le parecía gracioso que el rostro de Tetchou no reaccionara mucho ante la frustración que sentía al ver a las familias llegar por pedidos de piezas de pollo y otras cosas

–Creo que prefiero estar solo –de nuevo se disponía a irse, pero entonces llegó su turno en la fila y Dazai ordenó el típico bote con ocho piezas, ensalada, puré y bísquets más dos refrescos y no pudo decir que no a la comida. Encontraron una mesa rápido y se fueron a sentar