𝑶𝒖𝒓 𝒇𝒊𝒓𝒔𝒕 𝒍𝒐𝒗𝒆|𝐓𝐨𝐦 𝐊𝐚𝐮𝐥𝐢𝐭𝐳

Capítulo 7

LA FIESTA Y TOM KAULITZ

Nos despertamos por la alarma de Eileen, no era necesario un despertador si no que en su teléfono marcaba 7am, ambas desayunamos, y fuimos directamente a la universidad.

Con nuestras mochilas llenas de libros y cuadernos, nos dirigimos al campus universitario. A medida que avanzaban las semanas, Eileen y yo nos empezamos a llevar mucho mejor, siendo compañeras de aventuras, compartiendo risas, lágrimas y momentos inolvidables juntas. todo el tiempo pasaba unida junto a ella. (Así olvide al idiota de su ex) Nos apoyamos mutuamente, compartiendo risas y estudiando juntas para superar cualquier obstáculo que se presentara. Venía a mi casa, yo iba a la suya. Su mamá es una maravilla es amable , al igual que Carl, su hermano mayor.

Había una chica que se llamaba Luciana me miraba con envidia, hablaba mal de mi a mis espaldas, y claro yo no me dejaba. Sabrá que bichó le picó.

Y hablando de Lucas nos hemos vuelto a hablar, empezamos hablar muy seguido, nos habló de su novia Elisabeth llevan tres años siendo novios, el tenía pensado en pedirle matrimonio, nosotras le felicitamos, mencionó que a ambas nos invitaría a su boda. Nosotras con gusto le aceptamos .

Desperté en mi acogedora casa con la agradable sensación de tener el lugar para mí solo. Mia padres con Adela salieron al centro comercial y luego irían a conocer a los vecinos. Con una sonrisa en el rostro, disfruté del silencio reconfortante que envolvía cada rincón, sin distracciones ni interrupciones, sin gritos eufóricos de Adela. Con una taza de té caliente en la mano, agarré mi celular y me puse a revisar las redes sociales, escuché canciones, me tomé un momento para reflexionar sobre esta experiencia única de pasar tiempo a solas en casa.

Soraya se preguntaba por aquel chico de trenzas, que no lo había vuelto a ver desde aquello invitación o mejor dicho cena. No es que que guste y eso. En este aspecto solo le parece atractivo, sus facciones, sus venas marcadas y ni hablar de su piercing. El arete en su labio inferior izquierdo que vuelve loca a cualquier chica.  Su mirada penetrante que te pondría nerviosa con solo verte o que se caigan las bragas sin necesidad de utilizar las manos. Claro también mojar y no hablo de agua.
 
[...]

Eileen le mandó una invitación a Soraya para que asista a una fiesta que habría en esta noche a las 8 de la noche, ella la llevaría y dejarle a casa. También estaría Lucas en la fiesta. Soraya aceptó y decidió dejar preparado lo que usaría en aquella dichosa fiesta.

Los padres de Soraya ya estaban en casa, esta aprovechó en pedir autorización para salir a la fiesta con Eileen. Sus padres asintieron pero con una condición, en no beber y no llegar antes de la 1 de la madrugada.

La noche se acercaba y Soraya estuvo en la ducha, para ya prepararse, salió de este, agarró su vestido de tirantes con escote drapeado con un diseño de cadena en la espalda abierta con tira cruzada, unas sandalias con tira tobillera. No se maquilló a lo muy cargado, solo un maquillaje sencillo, se puso máscara de pestañas, Glos, rubor y su perfume Les Belles. Eileen llegó a casa de Soraya, y fueron veloz a la fiesta.

Nos dirigimos hacia el centro de la ciudad. La música de los bares retumbaban los oídos, nos mezclamos con la multitud en busca de un bar para tomar unos tragos.

(...)

Eileen y Soraya fueron a la pista para bailar, movían sus caderas al compás de la canción. Bailaban sensualmente y no precisamente para provocar a ningún chico, querían ser ellas mismas.

Lucas permanecía con su pareja por ahí en los baños pasándose saliva con su novia claro.

Soraya sintió que mientras bailaban la observaba, ella simplemente no le dio importancia y siguió en lo suyo.