Clara poco a poco se va dando cuenta de los sentimientos que tiene encontrados hacia el hermano de su mejor amiga, pero sabe que aunque haga de todo va a ser imposible ya que él prácticamente la odia. O eso es lo que ella piensa...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
🎞️🦢
Ya era Jueves 18 y ya estábamos por ir camino a Pinamar, la noche anterior me había quedado en la casa de Jose, como siempre, sinceramente no dormimos nada ya que nos habíamos esas siestas que son literalmente las mejores del mundo. Yo estaba llevando la valija al auto mientras que en mi otra mano tenía la mochila para llevar conmigo.
—Blas, ayuda a Clara— escucho como grita el mayor de los Polidori mientras se está fijando las últimas cosas de la camioneta.
Escucho como Blas suspira y se acerca a mí para agarrar mi valija de y dejarla encima de las demás, apunta mi mochila preguntando si también la tiene que subir con el resto, a lo que yo niego.
—No no, la llevo conmigo, gracias— habló sonriendo para luego caminar hacia dentro de la casa donde estaban las dos mujeres.
Juli había preparado un bizcochuelo y unos sanguchitos de milanesa para el viaje y con Jose, ayer a la vuelta de la facultad habíamos comprado un par de boludeces como alfajores, caramelos, turrones y más cosas como para poder llenarnos de caries.
Una vez que ya habíamos cargado todo lo planeado y Luis el papá de la familia, había chequeado todo por fin subimos y arrancamos. Yo me encontraba entre medio de Blas y Jose, a esta la tenía a mi derecha, ya que ella se marea fácilmente y es capaz de largar hasta lo imposible, así que preferí que se sentara de ese lado por las dudas. La primer parte del viaje fue bastante tranquila, con Jose hablábamos de boludeces mientras tomábamos mates con el bizcochuelo que había hecho Julia, Blas estaba hablando con sus padres mientras tomaba mates con ellos y hablaban del siguiente casting que tendría el ruloso, ya que él es algo así como modelo y actor, no sé muy bien, me lo había dicho mi amiga hace un par de meses y sinceramente no le presté ni 5 de atención.
La otra parte del viaje con Jose nos la pasamos durmiendo ya que la noche anterior como dije, no habíamos pegado un ojo, por lo que se dormimos cuatro horas que eran las que nos faltaba del viaje. Cuando sentí que el auto estacionaba lentamente y abrí los ojos y noté que estaba apoyada en el hombro de Blas a lo que rápidamente me levanté para chequear si no lo había manchado con maquillaje o cualquier boludez.
—Perdón Blas, no me di cuenta— digo mirando como este estaba tenso.
El solo asiente y abre la puerta ya que todo estaban empezando a bajar, yo imitó la acción y salgo con la mochila negra que había llevado, Luis había dicho que él bajaba las valijas así que yo me dirigí con las demás chicas que estaban adentrándose a la casa.
Era muy pero muy linda, tenía una pinta rústica pero moderna, ya se re complicada soy para explicarme pero básicamente era de dos pisos, blancas y con ventanas de madera. Adentro era toda blanca con un sillón del mismo color en el cuales había varios almohadones grises, el piso era de madera y en el centro había una mesa con sillas al rededor, y puedo jurar que habían un mínimo de 20 cuadros. Por lo que sabía era la casa de los primos de Luis y que no la usaban nunca así que aprovecharon para alquilarla.