Capítulo 5

108 14 6
                                    

Los días siguientes fueron como un sueño. Esperaba con ansias la llegada de la tarde para encontrarme con Luke. Era un completo misterio lo que él hacía por las mañanas pero por ahora no quería llenarlo de preguntas, estaba segura que me contaría todo cuando estuviera listo.

Pasábamos las tardes mirando el atardecer en la cima de la rampa más alta del skate park o abrazados en el sofá de mi sala viendo alguna película, preparando pizza o palomitas de maíz para acompañar la función privada. Luke ama las películas de acción pero siempre encuentra la forma de complacerme y con una sonrisa acepta ver una comedia romántica o una juvenil.

No es el típico macho sin sentimientos, lo sorprendí con los ojos llorosos luego de ver un drama, situación que hizo que lo llenara de besos. Cada cosa que voy descubriendo de Luke lo hace más irresistible. Algunos piensan que debes conocer por completo a la persona con la que quieres iniciar una relación. En nuestro caso prefiero ir descubriendo a Luke con el tiempo. Es una caja de Pandora, nunca deja de sorprenderme y eso lo hace aún mejor. ¿Qué de bueno tiene pasar tu vida junto a la misma persona de la que ya sabes todo? ¿No es más interesante ir descubriendo lentamente un hermoso misterio?

Mamá está sorprendida de verme de tan buen humor y no puedo reprimir los suspiros que de vez en cuando me escapan del pecho cuando estamos cenando juntas. Creo que sospecha pero no quiere aceptarlo. Después de todo era ella quien quería que me adaptara a una nueva vida ¿No?

—Maddy, quiero que llenes esta solicitud— me tendió un formulario amarillo.

—¿Qué es esto?

—Es para solicitar tu ingreso a la universidad pública de Blastville.

Me mordí el labio inferior— manía adoptada de Luke—. Estuve tan distraída últimamente que olvidé pensar en mi futuro. Mi cabeza, mis pensamientos, mi corazón le pertenecían sólo a Luke.

—Mamá, aún no tengo clara mi decisión.

—Bueno, quiero que este sábado vayas a la visita guiada. Tal vez te ayuden a aclarar tus dudas.

Asentí, no hay como decirle que no a su voz imponente.

—¿Puede acompañarme alguien?

—¿Luke?— sus ojos cafés idénticos a los míos parecían severos al preguntar por él.

—Mmm sí. A lo mejor a él también le interese el tour.

—Me inquieta un poco la cercanía que tienes con ese muchacho últimamente. Pero si te hace sentir cómoda y será bueno para ambos... está bien.

—¡Gracias mamá!

Corrí a mi habitación, quería contarle a Luke los planes para este fin de semana pero recordé entonces que él no tiene móvil. Sí, me parece muy raro que un chico en esta era no tenga uno, pero según él odia que sus padres lo estén controlando al milímetro y es por eso que prefiere andar incomunicado. Si algún día ahorro lo suficiente le compraré un móvil para que se comunique únicamente conmigo.

Bajé por un vaso de agua a la cocina y me quedé inmóvil al ver la imagen que me encontré. Mamá estaba en la sala encendiendo unas velas frente al retrato de Frank en la mesa de centro.

—¡Mamá! ¡¿Qué haces?!— grité molesta.

—Estás tan ocupada con tus amigos que olvidaste que es un año más de la desaparición de tu hermano.

Me sentí acribillada por las palabras, no es que lo haya olvidado. Sólo...

—¡¿Por qué le enciendes velas?! ¡Él no está muerto!

Luke     -by   Mayte GutiérrezDonde viven las historias. Descúbrelo ahora