Más romántico

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Blas no pudo pensar en otra cosa que no sea su padre sabiendo lo que sabía.
no habían vuelto a hablar de aquello, pero se sentía perseguido, algo atormentado y sentía además una gran vergüenza, tanta que ni siquiera podía hablar de ello con Felipe.

Por su parte Felipe notaba que estaba más callado de lo normal, mucho más pensativo.
había intentado averiguar que pasaba pero parecía totalmente reacio a hablar de aquello así que decidió no indagarlo mucho, ni siquiera cuestionó tanto cuando, a la hora de entrar al colegio, le pidió ir a su casa.

Él, naturalmente, no había tenido problema alguno en eso y rápidamente, o no tanto, considerando la lejanía que había desde la escuela a la villa, llegaron a su casa.

Su padre no iba a llegar hasta la noche, estaban solos y fueron a besarse a su cama.
pero Felipe seguía sintiendo que algo pasaba, Blas era un gran conversador y ahora parecía estar totalmente ocupado con los besos, ni siquiera paraba para respirar, le besaba la boca, el cuello y luego la boca otra vez.

-para loco, me vas a deshacer-le dijo sonriendo pero intentando romper el clima para ver si Blas se animaba a contarle que le pasaba -estás raro

-estoy bien, amor-le dijo intentando volver a los besos, cosa que Felipe no le permitió

-¿que pasa? confía en mí

-nada, en serio

Pipe se apoyó contra la pared y lo miró.
no le habían gustado tantos chicos como chicas en sus dieciocho años, pero Blas le encantaba, era tan delicado y lindo, tan atractivo, había caído desde el primer momento.

-¿sabías que me gustas un montón?-le preguntó tirando de su corbata

-sos tonto-le respondió él-vos me gustas un montón más

Nuevamente volvieron a besarse.
Blas le sacó la corbata y luego sacó la suya por encima de la cabeza en el momento en el que, siendo muy ágil, se subió sobre sus piernas.

-amor...-le detuvo. últimamente se le hacía difícil no excitarse rápido cuándo estaban juntos

-¿no queres?-le preguntó él con las manos apoyadas en el pecho contrario

-si pero vos no querías...

-ahora si

-Blas ¿que pasa?

-quiero estar con vos ¿podemos?

-podemos pero...

Blas bajó de sus piernas y se arrodilló sobre la cama.
sus ojos parecían brillar y Pipe notó como sus mejillas se volvían rojas

-quiero...tocarte-le dijo avergonzado

-y si, es lo que va a pasar...

-no, quiero...o sea, necesito tocarte...ahi, antes de que pase, necesito saber como es

Pipe fruncio el ceño y se miró la entrepierna

-es literalmente una pija...

-dale, necesito saber como luce, y su textura y...

-dios mio...bueno-le dijo bajandose el cierre

Blas estaba atento a sus movimientos.
sabía que su necesidad de saber como era todo podía enfriar el ambiente pero realmente necesitaba verlo antes de...aquello.

Pipe tomó su hombría y se la mostró, no sabía muy bien que debía hacer.
Blas tenía la cara completamente roja e hirviendo, nunca había visto un pene más allá del suyo.

-¿ya...está?

-no ¿te puedo tocar?

Pipe le dio un beso corto estirandose y le dijo que si, la situación le daba un poco de risa.

Blas bajó la mano y lo acarició, sintiendo su piel suave y el relieve de sus venas.

-¿te gusta?

-es linda...y grande

-gracias-respondió él sonriendo, aunque ahora estaba mucho más caliente que antes.

Cuándo se sintió listo, Blas le dijo que podía volver a vestirse; Pipe le dijo que era ridículo

-es que para hacer el amor quiero desvestirte yo, es más romántico

-que fantasioso sos-le dijo subiéndose el cierre de nuevo

las manos de Blas tiraron de su cuello y lo apoyó sobre su cuerpo para volver a besarlo, quedando asi ambos acostados.

Pipe disfrutaba el beso pero estaba nervioso, desconocía si alguna vez había estado con un chico virgen y tenía miedo de hacer algo mal.

los dedos de Blas se apoyaron en la cierre contrario y lo abrieron lento.
sentía que la cabeza le daba vueltas y estaba algo mareado, pero aún así se las ingenio para bajarle el pantalón, mientras Felipe se quitaba los zapatos con los mismos pies.

Cuando Felipe estaba vestido únicamente con los boxers y la camisa, ayudo a Blas a quedar de la misma forma, y volvieron a acostarse, Blas boca arriba, con Pipe sobre él.

Las piernas delgadas de Blas se acomodaron a los costados del cuerpo contrario y  ejercian algo de presión, mientras de forma automática, las caderas de Pipe se frotaba fuerte, clavando su dureza en la ajena.

la boca de Felipe besaba todo lo que podía: el cuello, las claviculas y la zona desnuda del pecho, mientras sus manos desabotonaban la camisa lentamente, botón por botón.
los besos se trasladaron entonces por todo el pecho y luego por el abdomen plano de Blas, quién enredaba sus dedos en el cabello ajeno, en un gesto entre ansioso y nervioso.

cuando llegó al borde de la ropa interior, Felipe bajó una mano allí y tomó su erección entre sus dedos, apretando un poco, sintiendolo desesperamente duro.
se arrodilló entonces entre las piernas abiertas de su novio, le bajo despacio el boxer, y se inclinó, paseando su lengua por la punta, mientras lo masturbaba despacio con una mano, y con la otra tomaba su propio pene algo húmedo.

la espalda de Blas se arqueo ante ese placer, nunca había experimentado algo como eso, o como nada a decir verdad.
sentía la lengua de Pipe recorriendolo, sus dedos apretando los puntos justos, y sus labios, succionando lento. cerró los ojos y comenzó a gemir alto, tranquilo ante la soledad total que los abrazaba.
la cabeza de Pipe subía y bajaba cada vez más rápido, cada tanto se quitaba el pene de la boca para masturbarlo y entonces su lengua bajaba hasta su entrada, empujando un poco, y besando otro poco más.

Blas jadeaba, cada vez el placer era mayor, sentia como una electricidad en su estómago y sus piernas temblaban.
Cuando acabó, Pipe supo que era el momento.
se llevó los dedos a la boca y escupió sobre ellos,para luego llevarlos hasta la cavidad ajena, que gracias a su lengua ya estaba algo dilatada.

metió uno de esos dedos lentamente, y lo movió despacio, sin apuro alguno.

Blas sintió una pequeña molestia, pero no dolía, asi que abrió más las piernas y comenzó a tocarse a si mismo, no queria perder la erección.
el segundo dedo de Felipe acompañó al primero, y juntos comenzaron a entrar y salir sin mucho esfuerzo, haciendo que Blas comience a jadear de placer, y un poco de dolor.

Cuando Pipe retiró los dedos y posicionó su hombría, Blas se tenso un poco y apoyo sus manos en el abdomen del otro chico

-hacelo despacio, por favor- pidió, con una voz tremula que a Pipe conmovió

Él se inclinó sobre su chico y le besó los labios con suavidad

-voy a cuidarte mucho ¿si? te va a gustar

Blas sonrió y acarició su rostro, volviendo a enredar sus piernas en la cadera ajena.

Fue lento, un ritmo pausado y tranquilo.
Blas sentía algo de dolor pero no demasiado, Felipe realmente era delicado.

-¿estas bien?- le preguntaba cada vez que podía, estaba realmente preocupado por él

Blas sonreía y asentía para luego besarlo y moverse también, encontrando un ritmo perfecto que dentro de poco logró que ambos consiguieran un orgasmo juntos; consiguiendo también olvidarse de sus problemas, por al menos un rato.

Nenes bien: 𝐛𝐥𝐚𝐬 𝐱 𝐟𝐞𝐥𝐢𝐩𝐞Donde viven las historias. Descúbrelo ahora