Selcouth [BNHAxOc]

11

No pasó mucho antes de que Shun llegara a la casa. Esta vez no iba acompañado, y Arcane no podía estar más agradecida con su suerte. 

Desde que había regresado era 50/50 si su tío traería a algún héroe a su hogar. 

–Arcane. 

Ella no levantó la vista del dispositivo que estaba terminando, era diminuto– Hola de nuevo. 

–Creí que ya habíamos pasado por esto antes. 

Arcane bufó, dandole los últimos detalles– Lo siento. Ron estaba perdido, y conociendo a ese chico pudo haberle pasado cualquier cosa. No podía simplemente no ir por él. 

Shun se acercó a ella, dándole un golpe en la cabeza con su abanico. Casi deja caer el rastreador por la sorpresa. 

–¿Por qué rayos tiene puesto uno de mis yukatas? No, más bien ¿Por qué rayos me dice tío?

Ella sonrió, finalmente centrando toda su atención en él– Es lo único que tenía de su talla a la mano. Y, supongo que debes preguntarle eso a él, como sea, no es difícil hacerlo hablar, así que debes ser específico con lo que quieres saber. Tiende a divagar mucho. 

Se levantó de su silla, aún sobando el lugar en el que Shun la había golpeado, y caminó hacia la sala de estar, donde seguramente Ron se encontraba. 

–¡Arcane!

El chico sonrió nada más verla, con un marco de fotografía en las manos– Encontré una gotofragía tuya. 

–Fotografía– Corrigió, acercándose a él– ¿Cómo sigues? ¿Algún dolor de cabeza?

Ron negó, poniendo una mano en su sien– Todo bien. ¿Sigo teniendo que seguir las indicaciones de hace un rato? ¡Ah! Estuve viendo las cosas de tu hogar, espero que no sea una molestia, ¡Pero tienes tantas cosas extrañas! no pude evitarlo. ¿Para qué sirve esa cosa con botones?

Sintió la mirada de Shun sobre ella, pero no se giró– ¿El control remoto? No, espera, antes de nada solo tienes que seguir lo que te dije con las personas de hace un rato. 

Él asintió, y antes de que volviera a hablar, Shun se puso frente a él– ¿Y quién podrías ser tú, joven?

Ron se iluminó. No había otra forma de decirlo– ¡Tío! Mi nombre completo es Yazaviron, hijo de Maprami, y heredero de la linea Solorio. 

–Ron– Respondió con la misma seriedad de siempre, Arcane sonrió.

–¿Por qué ningún stranns puede decir mi nombre?– Sollozó, Shun se sintió mal al ver lágrimas genuinas en su rostro. 

Arcane suspiró, acercándose a él para secar sus lagrimas con la manga de su bata. Shun alzó ambas cejas, sorprendido– Nadie está acostumbrado a nombres tan largos. 

El Hamasaki aclaró su garganta– Shun Hamasaki. Un gusto, chico. ¿Ahora, puedes ser tan amable de explicarme por qué rayos soy tío de un alien?

Shun sollozó más fuerte. Y Arcane se hubiera reído de la situación si no estuviera en medio de ella. 

–¿¡El tío no me quiere!? ¿¡Alen!? ¿¡Quién rayos es alen!? 

Si Shun estaba sorprendido, no lo demostró– Alien es cualquier ser vivo que no sea de la tierra. Perdón por la confusión, y eso no es lo que quería decir. Solo tengo curiosidad de saber cómo es que conoces a Arcane. 

Ron volvió a sonreír, como si hace un momento no hubiese estado llorando, y caminó hasta quedar frente a Shun. Era más alto que él por unos cuantos centímetros. Arcane estaba sobándose las sienes, cansada.