Capítulo 5.

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19:00

Cuatro largas horas de viaje después, ya había llegado a su destino

Bajo del auto y estiró su cuerpo, miró a su alrededor y luego fijo su vista en la pequeña cabaña frente a él, bajo las maletas y entró al lugar, el delicioso aroma del chocolate caliente llego a su nariz, el recuerdo de su esposo recibiéndolo con una taza con dicho contenido le hiso sonreír con pesar, dejo las maletas en la mitad del pasillo y tomo asiento en el gran sofá marrón

oh, señor Jeon, no le escuche llegar - saludo la castaña - preparé un poco de chocolate, supuse que le gustaría beber un poco en cuanto llegara - indico y regreso a la cocina por la bebida   

esta algo caliente, tenga cuidado de no quemarse - coloco la taza en la mesita frente al sofá - espero le guste

gracias Chae-won - pronunció el castaño mirando fijamente el recipiente humeando - es algo tarde ya, sera mejor que vuelvas a casa, no necesitaré más de tus servicios por ahora - la sonrisa de la chica se desvaneció, ella tenia cierta esperanza de que el pelinegro le dejara quedarse a acompañarlo 

Mi casa queda cerca señor Jeon, no se preocupe por ello, terminaré de preparar la cena y luego me iré - indicó y dio media vuelta en su lugar dispuesta a volver a la cocina 

no hace falta, no tengo apetito de todas formas, seria un desperdicio - interrumpió su andar - ve por tus cosas mejor, te llevaré yo mismo a casa - ordenó poniéndose de pie - te esperaré afuera

la chica se dirijo muy feliz hacer lo que el pelinegro le habría dicho, pero su sonrisa volvía a desaparecer cuando se percato de que el contenido de la taza seguía intacto, no lo había probado ni un poco al menos, suspiró derrotada, se esforzó mucho en prepararlo, incluso siguió las indicaciones que el difunto esposo del señor Jeon, le había compartido alguna vez, cuando un día le ofreció una taza del delicioso chocolate caliente que él solía preparar y a ella le gusto tanto que pidió le enseñara a hacerlo 

Bien, ya estoy lista - pronunció acercándose hasta el auto  

¿has traído todo? - preguntó el pelinegro y la chica asintió 

ambos entraron al auto y enseguida Jungkook lo puso en marcha, esperaba que el recorrido fuera en silencio y que no intentara entablar una conversación con él, no se encontraba de ánimos para hacerlo 

pensé que el señor Ben, lo acompañaría - sí, todas sus esperanzas se fueron abajo, la charla había empezado 

Le di unas vacaciones, se las merecía - respondió con su vista fija en la carretera 

¿Por qué no vino con alguien más, entonces? - pregunto curiosa y con ciertas esperanzas 

¿por qué lo haría? - empezaba a irritarse, no le gustaba que se entrometan en su vida 

bueno, supuse que tal vez usted ya tendría a alguien, como su ex esposo ya no esta, ya sabe, quizás una nueva pareja - soltó la castaña mirando el perfil de Jungkook 

pues debería de dejar de suponer cosas señorita Chae-won, soy un hombre casado y lo seguiré siendo hasta el día en que muera - la chica soltó un suspiro molesta 

pero el joven Kim falleció, no ha pensado en conocer a alguien, no sé volver a enamorarse - la castaña poso una de sus manos en el muslo de Jungkook y este tenso su mandíbula, al igual que quitó su mano con molestia, ¿Quién se creía esta mujer para tener tanta confianza? 

hemos llegado - indico estacionando el vehículo - ya puede bajarse del auto - en sus palabras se notaba su molestia  

no le gustaría entrar por algo de beber....

El esposo perdido de Jeon JungkookDonde viven las historias. Descúbrelo ahora