Capítulo Cinco

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POV Ayanokouji

Resulta que la cámara de Sakura se descompuso, por lo que nos pidió ayuda, Kushida nos dijo donde nos encontraríamos, me vestí bastante normal, y llegué al sitio, ninguna de las tres estaba cerca, hasta que solo un minuto después llegó Nōsotchū

Llevaba una blusa blanca de manga larga, pantalones acampanados, converse y una pequeña mochila, el pelo lo tenía medio atado

Se ve muy bonita

-Perdona, ¿esperaste mucho?

-Hace poco llegué -soltó un suspiro

-Ya creí que me tardaba

-¿Kushida y Sakura no iban a venir contigo?

-Supuse que sería así, pero no las vi

Nos quedamos esperando en silencio, ya era una pequeña costumbre entre ambos, pero a vista de algunos, podría parecer que estamos en una cita y no estaba haciendo nada como el caballero que se supone que debo ser, nunca negué que Nōsotchū era linda, pero el hecho de que estábamos saliendo, solo era una farsa delante de Kushida

Pero no evite agarrar su mano

-¿Ayanokouji?

-Estas nerviosa, quise calmarte a mi modo -dio una sonrisa

-Gracias

-¡Ayanokouji, _________! -aquella voz alegre provenía de Kushida

-¿Estuvieron esperando mucho tiempo?

-Algo así -contesté, al estar cerca de ella, yo era quien más hablaba, Nōsotchū le tiene resentimiento y algo de miedo, Kushida soltó una risa

-Parece que interrumpi un momento entre ustedes -vi nuestras manos entrelazadas, Nōsotchū se puso algo nerviosa, pero le di un leve apretón

-Ya estamos acostumbrados a que no podamos estar bastante juntos

-Cierto, su relación es secreta -vi a Sakura a lo lejos, Kushida tambien volteo, aproveche para darle un beso en el dorso de la mano

Quería que estuviera segura conmigo

POV ________

-Lamento por haberlos hecho venir -dio una reverencia

-Yo debería disculparme, fui quien rompió tu cámara

-No, yo debí tener cuidado... -fuimos a un café, Ayanokouji me compro uno

-Irás a la tienda de electrónica a arreglar tu cámara, eso lo entiendo, pero ¿me necesitabas a mí?

-De hecho...

Fuimos a la tienda y Sakura le entregó la cámara a quien atendía

-Ah, vaya, esto es malo, ah, sí, es la corriente, si, no es bueno... -solo balbuceaba y miraba la cámara por varios lados, estaba empezando a perder la paciencia

-¿Tienes la garantía? La garantía... -Sakura pareció ponerse más nerviosa

-¿Trajiste la garantía? -pregunto Kushida, la pelirrosa asintió, le dio el papel

-Ah, todavía es válida, podrías cambiarla sin coste... -aquel hombre le dio una mirada, un escalofrío recorrió mi espalda

-¿Puede decirnos cuánto tomará? -pregunto Kushida

-Dos o tres días, dos o tres, ¿puedes llenar el formulario? -tendió aquello y lo mire con atención

-Nombre, dirección... y número telefónico -agarre la mano de Ayanokouji

Protegerte (Ayanokuoji y Tú)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora