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Estaba yendo a clases en el autobus, hoy me tocaba ir a clases en el turno de clases, tenia una introducción de un trabajo que haremos, así que tenía que asistir temprano y a tiempo. Había bastante tráfico y estaba preocupada de llegar tarde, la clase comenzaba en 15 minutos y estaba a 25 minutos de la facultad.
Llegué cinco minutos tarde a la universidad, acelere el paso lo más que pude, subí las escaleras velozmente mientras buscaba la sala a la que tenía que ir, la cual desconocía totalmente. En eso, una chica paso por mi lado, y vi que también iba acelerada subiendo las escaleras, cuando vi su cara la reconocí, era Jeongyeon.
— Oh, hola. —Me acerqué.— ¿Sabes donde esta la sala 212?
— Sí, es en este pasillo. —Señaló.— Yo también estoy yendo. —Rio. Ambas se dirigieron.
Entraron y por suerte todavía no había comenzado, ambas se separaron sin darse cuenta y se sentaron en diferentes asientos.
La clase comenzó, y el profesor comenzó a introducir el trabajo que tendrían que hacer, el cual sería en grupos de tres, y tendrían que entregarlo al final de semestre, ya que era lo que más contaba en toda la materia.
Una vez termino la introducción, el profesor pidió que se levantaran ya que se sentarían en orden a sus grupos, pues él fue quien los hizo.
Mina esperó un tanto nerviosa a que el profesor dijera su nombre, no conocía a mucha gente que se encontraba ahí, y no le agradaba mucho la idea de tener que socializar en este trabajo, pero era eso o reprobar la materia, y no le agradaba mucho esa idea.
El profesor dijo su nombre, seguido del nombre de Jeongyeon, la cual ya conocía, y una chica llamada "Wendy", a la cuál desconocía, pero al menos iba con alguien a quien conocía un poco. Ella y Jeongyeon se voltearon a ver, se miraron, y sonrieron, para luego dirigirse a su asiento las tres.
Una vez terminó de decir los grupos, el profesor explicó unas cosas sobre este proyecto, y posteriormente terminó la clase.
— Chicas, ya que haremos un trabajo, podríamos ir a tomar un cafe juntas a la cafetería. —Le propuso Jeongyeon a ambas.
— Por mi bien! —Acepto Wendy.
— Por mi también. —Sonrió. Mina no tenía muchas ganas de ir, pero acepto por cortesía.
Se levantaron y se dirigieron a la cafetería, la cual por suerte estaba enfrente de la facultad, pues en el camino, Mina no hablo, solo eran las otras dos chicas comentando la clase, mientras ella solo asentía.
Una vez llegaron, las tres ordenaron sus cafes y se sentaron a charlar un rato.
— ¿Han estado en alguna otra carrera? —Preguntó Wendy.
— Yo no, no me da la vida para salirme de una carrera y meterme en otra. —Bromeó Mina.
— A mi tampoco. —Rio.
— Yo sí he hecho una, estuve un año en Marketing, pero no me gusto. —Dijo Jeongyeon.— Me metí porque no sabía que hacer, pero en lo que hacía la carrera, vi que el derecho era lo que me interesaba. —Dio un sorbo a su café.
— Yo la comencé por obligación de mis padres, pero en todos estos años ya me acostumbré. —Rio.
— Igual, pero por suerte me termine acostumbrando. —Mina bebió un poco de su café.
— Yo no podría, me cuesta mucho acostumbrarme a algo que no me llama la atención. —Rio.
...
Chaeyoung acababa de salir de la oficina, había terminado su primera semana en el trabajo y estaba bastante satisfecha, estaba un tanto nerviosa por comenzar, pero una vez se acostumbre ya no los tendrá.
Llevaba bastantes días con un poco de bajón, pues todo el tema sobre Yerim la había dejado bastante mal. Ella se sentía un poco mal por ella, sentía que no había hecho lo correcto, y más sabiendo que le había roto el corazón, pero también sentía que se lo merecía, pues ella creía que también se arrepentía de lo que paso entre ellas y que también vio lo mal que lo paso, pero le demostró que no fue así, que ella no sufrió en lo absoluto. Sin embargo, no se sentía lista para bloquearla, para eliminar todas sus fotos con ella, pasar página y olvidarla, aun habiendo superado su relación amorosa con ella. Yerim la había llamado bastantes veces, le había enviado miles de mensajes, pero Chaeyoung decidió simplemente desconectar, silenciar todo y tomarse su tiempo para recuperar su paz mental, pues la necesitaba bastante.
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