" Just let me be close to you "
Mina estaba llegando al aeropuerto de Seúl a recoger a Cho Miyeon, una amiga muy especial que iba a venir a visitarla después de mucho tiempo, y quedo de ir a recogerla y de acogerla todo el fin de semana en su casa.Iban juntas a la universidad hasta que Miyeon la dejó y se mudo fuera de la ciudad por cuestiones de trabajo. Había estado muy ocupada todos estos meses, hasta que logró hacerse un hueco y venir a visitar a su Mina después de tantos años.
Mina tenía tenia que dirigirse a la terminal en la que estaba la puerta de recibimientos, su vuelo no tardaría en llegar, pero el aeropuerto era inmenso, y era demasiado fácil perderse. Se apresuró en llegar, y una vez llego a su terminal, fue a esperar a que saliera la gente de su vuelo. La gente comenzó a salir y intentó buscarla entre tantas personas, lo cual era bastante complicado, hasta que logró encontrarla y alzo la mano para que la viera.
— ¡Mina! —Se dirigió a esta y la abrazo.
— ¡Hola! —Le dio leves palmaditas en la espalda mientras la abrazaba.— Estas muy cambiada. —Se separaron y la miró sorprendida.
— ¿Enserio? —Frunció el ceño.— Tampoco ha pasado tanto tiempo. —Río.
— No sé, será cosa mía. —Río.
Se dirigieron a la salida del aeropuerto y pidieron un taxi a casa de Mina, querían llegar rápido ya que esa noche saldrían de fiesta y no querían perder tiempo, pues al fin y al cabo era solo un fin de semana el cual estarían juntas, y querían aprovecharlo al máximo. Una vez llegaron, Mina pago el taxi, por más que Miyeon se negara debido a lo costoso que había salido, y se fueron al apartamento.
— No puedo creer que el taxi saliera tan caro, de verdad. —Miyeon renegaba sorprendida mientras entraban por la puerta.
— Pues sí, pero no te preocupes. —Mina cerró la puerta.— Deja las maletas aquí, tengo ropa de mi novia en el cuarto y no tengo espacio, me olvidé de hacerte un hueco. —Río.
— No hay problema, prefiero no sacar la ropa y así no tengo que hacer de nuevo la maleta. —Bromeo.
— Muy buena idea. —Río.
Todavía era tan temprano, habían quedado de salir junto a Jihyo y Sana, las pasarían a recoger dentro de dos horas, así que se tomaron el tiempo de cenar cualquier cosa que hubiese en el refrigerador de Mina y comenzaron a arreglarse.
— ¿Qué vas a llevar? —Le preguntó Mina enfrente del armario, tratando de descifrar que prendas iba a escoger para esa noche.
— No lo sé. —Miyeon dijo sentada en la cama de Mina.
— Siempre voy de negro, parece que no tengo ropa de otro color. —Bromeó.
— Yo tengo un vestido blanco, me lo iba a poner pero no me apetece ir en vestido. —Le ofreció.
— A ver, enséñamelo. —Dijo convencida de que llevaría eso.
Miyeon le enseñó el vestido a Mina y está quedo encantada. era bonito, sencillo y perfecto para el clima que traía el verano, algo diferente a lo que tenía en su armario, pues siempre era de llevar cosas muy minimalistas y elegantes, con un toque de sensualidad, pero eso ya le había cansado, por lo que decidió ponerselo.
— Listo, ya tengo que ponerme con el maquillaje. —Salió del baño ya cambiada. Miyeon volteó a verla.
— ¡Te queda genial! —Alago a su amiga.— Vas a romper corazones esta noche. —Bromearon entre risas.
Mina se comenzó a maquillar, hasta que Chaeyoung la llamó, por lo que cogió el teléfono y le respondió.
— Alo. —Mina puso la llamada en modo altavoz para poder seguir maquillándose mientras hablaban.
— Hola linda. —La saludó dulcemente.— ¿Llegaron bien a casa?
— Sí, vinimos en taxi. —Le respondió mientras se ponía la base.
— Ay, ¿y les salió muy caro? —Preguntó.
— Pues sí, pero ni modo.
— Me hubieras llamado y las hubiera ido a buscar, los taxis del aeropuerto son demasiado costosos.
— No lo pensé, pero supuse que estabas trabajando. —Se puso rubor en sus mejillas.
— Pues sí, pero podía escaparme un momento, pero da igual, al menos llegaron. —Bromeó.
— Pues sí, al menos. —Río.
— ¿Y ahora que harán? —Le preguntó.
— Saldremos con Jihyo y Sana. —Respondió Miyeon de fondo.
— Que bueno, ¡hace mucho no las veo, salúdalas de mi parte!
— Lo haré. —Se puso rímel en sus pestañas.— Una pena que no puedas venir.
— Ya, tengo una reunión esta noche desde Estados Unidos, otra vez será. —Dijo Chaeyoung.
— ¡Wow, eres internacional! —Bromeó Mina y las tres rieron.
— Sí, podríamos decir que sí. —Río.— Bueno, no las distraigo más, que tengan una buena noche.
— ¡Gracias, igualmente! —Le agradeció Miyeon mientras se enchinaba las pestañas.
— Gracias Chaeng, mañana hablamos.
— Va, linda noche, Minari. —Se despidió con un tono amoroso.
— Igualmente. —Dijo con las mejillas cada vez más coloradas, y no por el rubor. Colgó y apagó su celular.
— Que novia tan dulce tienes, ya me gustaría a mi tener una relación igual de linda que la de ustedes, pero lo dudo.
— Ya llegará alguien. —La tranquilizo.— Yo tampoco creí que tendría una pareja y apareció ella y cambió todos mis planes.
— Dicen que llega cuando menos te lo esperas. Debería de dejar de estar tan desesperada, así puedo encontrar a alguien esta noche. —Río.
— Pues sí, nadie sabe lo que pueda pasar.