Capítulo 18.

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*
Gavi

-No le voy a regalar eso, Fermín.

-¿Por qué no? Una lenceria le queda bien a cualquiera.

-Imbecil.

-¿Qué pasa? Es verdad.

-Es un regalo de cumpleaños, no uno cualquiera.

Sentí de repente un peluche gigante golpeando directamente a la cara de Fermín.

-Que salido estás, si eres un bebé.-dice Ferrán.

-Me ha dolido, capullo.

-Estais muy mal, pero la idea de Fermín no es mala.- suelta el cabrón de Pedri riéndose.

Lo miré mal.

Ahora mismo podría estar en mi casa viendo una película, entrenando o pasando tiempo con Laura. Pero no. Estoy en el centro comercial con estos gilipollas. En 5 días es el cumpleaños de Laura, y hemos venido para comprarle las suficientes cosas para hacer una "fiesta sorpresa". Fiesta de la que se terminará enterando porque con los tíos que estoy son unos chivatas.

-No tengo ni idea de que regalarle, te lo juro.- soltó Fermín cuando entramos en una tienda de maquillaje.

-Yo menos.- dijo Ferrán.

-Pues pensar, no es tan difícil.- dijo Pedri.

-¿Por qué no es difícil para ti?-pregunto Ferrán mirándolo.

Lo miré

-Pues...porque es fácil saber que regalarle a una mujer ¿No? Maquillaje, ropa, colonia...- dijo pedri tratando de parecer calmado aunque lo noté algo nervioso.

-Ya..

...

Hace tiempo que llegamos del centro comercial, y sinceramente casi ninguno compramos nada. Ahora estamos jugando al FIFA.

Escuchamos la puerta principal cerrarse. Era Sira.

-¿Y Laura?-preguntó Ferrán mientras se levantaba a saludarla.

-Es su casa.-respondió seria.

-¿Por qué? Dijo que iba a venir.

-Preguntale a ella, dijo que prefería irse a casa.

Me extrañó, ya que ella dijo que vendría y Sira estaba más seria de lo normal. Así que me decidí por escribirle un mensaje para asegurarme de que está bien.

Sira se dirigió a la cocina y decidí seguirla para preguntarle si todo estaba bien.

-Oye ¿A pasado algo?

-No, no tranquilo. Sólo estaba cansada.-dijo tratando de fingir una sonrisa que aún así parecía falsa.

Decidí dejar el tema e ir después a su casa a preguntarle personalmente y no alarmarme. Aunque cinco minutos después se iluminó la pantalla de mi móvil dejándome ver un mensaje de Laura: "Si estoy bien, no te preocupes. Mañana nos vemos." Me tranquilicé, aunque después iré a verla.

...

-Gooool-grité

-Tramposo.-me respondió Fermín.

Ferrán nos lanzó un cojín.

-Anda no os piqueis, bebés.

Iba a responder pero me interrumpió un grito de Pedri.

-Voy a salir. Ahora vuelvo.- gritó.

-Vale.-dijimos.

Cuando se escuchó la puerta cerrarse le tiré el cojín a Ferrán. Se la debía.

Irresistible. -pedri González Donde viven las historias. Descúbrelo ahora