DRAVEN BAKERMi voz se encuentra agitada, el sudor me recorre todo el cuerpo a la vez que trato de no desconcentrarme.
Laura
Su nombre y su presencia se ha vuelto un vicio en mi vida, una adicción que no será fácil de dejar aunque tampoco pienso dejarla. Realmente nunca creí tener cierta atracción por alguien tan inofensivo e inocente, es como tener un pequeño ratoncito entre mis garras, oh dolcezza, mira a donde viniste a parar.
La miro fijamente a los ojos a través del espejo mientras sigo moviendo mi cuerpo sin parar con ella encima de mi, trata de bajar pero la detengo, no he terminado todavía.
— Baker, será mejor que tomes un descanso, ya llevas cuatro horas aquí metido haciendo ejercicio sin parar— escucho la voz tan arisca de él.
— Tú no vengas a decirme a cuántas horas de ejercicio puedo someter mi cuerpo, no es como si hubiera pedido tú opinión— mi voz sale ronca al momento de contestarle.
Siento como ella se baja de mi espalda al momento de hacerle seña para que lo hiciera, me levanto para encararlo al sentir sus pasos acercarse hacia a mi. Acerca su cuerpo peligrosamente cerca al mío, tanto que nuestras respiraciones se mezclan, lo miró directamente a esos ojos tan altaneros a la hora de mirarme.
— No me la pediste, es cierto, pero puedo dar mi opinión cuando quiera porque la boca es mía y digo con ella lo que se me dé la perra gana, Baker, te guste o no.— enrosca su mano al rededor de mi cuello apretándolo levemente.
— Será mejor que se detengan ahora o me tocará intervenir y no voy a perder mi inspiración en estos momentos por unos idiotas como ustedes.— volteamos a verlo a donde se encuentra sentado mientras nos señala con su lápiz.
— Las paredes no tienen derecho a hablar así que mejor cállate y tú suéltame si no quieres— mis palabras quedan en el aire al sentir como muerde mi sacándole sangre antes de soltarme.
Todos salen del gimnasio detrás de él dejándome solo y con una mordida que me tocará curar porque no vaya a ser que se me pegue la mal de rabia, es un loco de ramate este tipo y demasido controlador. Salgo del lugar con intenciones de bañarme, necesito sacar todo este sudor pegado en mi cuerpo pero me detengo en medio de las escaleras al escuchar una canción resonar por toda la casa que no había escuchado antes, en donde el comienzo de una guitarra eléctrica se roba el show, sigo mi camino a mi habitación dejando la música atrás.
No puedo durar tanto tiempo acá sabiendo que Laura se encuentra en Colombia
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ENTRE LINEAS
General FictionEstaba apunto de cometer una locura en la cual podría morir en el intento, pero realmente me encontraba enojada, lo que no sabía era que ese iba hacer el verdadero punto de inicio para mi vida, en donde se iba a mostrar la verdadera cara de la moned...