Capítulo 7

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QUANTICO, Virginia
Cuartel del UAC, cuatro años después de los eventos de Chicago.

Al entrar al edificio los nervios me invadieron, había terminado mi carrera hace unos meses y me había graduado con honores. Hice varias pasantias mientras iba en la universidad y eso me dio muchos créditos extra.

James se había encargado de limpiar completamente mi expediente ya que solo tenia delitos menores y lo mejor si quería trabajar para el FBI era estar limpia. Hace como un mes había sido admitida en la UAC y no podría estar más emocionada, luego de lo ocurrido en Chicago hace años comenze a ir a terapia y con algo de trabajo conseguí afrontar o bueno estaba intentando afrontar el trauma que había dejado Charles Brown en mi vida.

Aunque para ser sincera no tenía idea hacia donde ir, estaba perdida, eso era genial así comienzan las mejores historias.

Parece que estuve mucho tiempo parada frente al elevador por que una mujer rubia se acercó a mí con una sonrisa.

- ¿Te perdiste, cielo? - Pregunto con un tono amigable.

- Si, eso creo - Dije viendo el papel donde se supone que decía a que piso debía ir.

- Déjame ver eso - Dijo tomando el papel de mis manos. - Es tu día de suerte, linda - Me dijo contenta. - Trabajamos juntas - Me explico.

- ¿En serio? - Dije sonriendo.

- Si, ven, te llevare y te enseñaré el lugar - Dijo y entramos juntas al elevador.

- Me llamo Harper, Harper Cappellari - Me presente mientras subíamos.

- Soy Penelope Garcia pero todos me dicen Garcia - Dijo alegremente.

- Es un placer - Dije. - ¿En que parte del sector estas? - Pregunté con curiosidad.

- Soy el ojo que todo lo ve, linda, soy técnica del sistema - Me dijo sonriendo. - Me encargo de saber todo de todos y en base a la base de datos investigo cualquier cosa que necesiten sobre un ignoto - Explico.

- Eso suena genial - Dije.

- Lo es - Me dijo asintiendo y eso hizo crecer mi sonrisa.

Me alegraba saber que en mi primer día ya había conocido a alguien tam agradable, se notaba que era una mujer muy especial, su ropa y su peinado eran únicos, era como un arcoiris en medio de nubes grises.

Al entrar a la oficina se encargo de mostrarme un poco el lugar y me dijo donde estaba su escritorio. Me sorprendió ver que al llevarme con su jefe el nombre en la puerta era el de Aaron Hotchnner, por un segundo olvidé que ellos también trabajaban aquí.

- Señor la nueva adquisición - Me anunció Penelope. - Ella es... - Hotchnner no la dejo terminar.

- Harper Cappellari - Dijo y me ofreció su mano como saludo. - Gracias, Garcia - Le dijo a la rubia quien asintió y me miró con una sonrisa antes de irse.

- Agente Hotchnner, es un gusto volver a verlo - Dije aceptando su saludo.

- Por favor tome asiento - Me pidió y obedecí. - Debo admitir que cuando me enviaron su expediente dude en aceptarla pero todos los agentes que han trabajado con usted han dicho lo talentosa que es haciendo su trabajo - Dijo leyendo nuevamente mi archivo. - Al haber estado implicada en el caso de Charles Brown el comité ha debatido si era prudente aceptarla en el buro y aunque sus pruebas psicológicas han demostrado que es apta para este empleo estará a prueba por unas semanas - Explico con seriedad. - Si noto que no se desenvuelve bien en el campo tendré que ponerla a hacer trabajo de oficina, aunque personalmente considero que podrá hacerlo - Concluyó.

Memoria de un crimen - Spencer ReidDonde viven las historias. Descúbrelo ahora