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“Ahí está su atractivo y su secreto.
Esta voz, que gotea y se filtra
en mi interior más tenebroso”


El día transcurrió con lentitud casi tortuosa, las actividades en la casa donde vivía parecían tan ruidosas en ese momento

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El día transcurrió con lentitud casi tortuosa, las actividades en la casa donde vivía parecían tan ruidosas en ese momento. Jin había estado decorando el lugar a su gusto a pesar de que Namjoon parecía gustarle todo un poco más rústico, habían estado colocando plantas y rosales de diferentes colores y formas en el jardín desde la mañana mientras Jungkook acomodaba todos los aparatos eléctricos que había comprado por internet en la sala.

Todos en su mundo y como era de costumbre el simplemente permanecía observando todo sentado en algún rincón del lugar.

Había estado sentado desde hace unas horas en el pasillo que rodeaba el pequeño  jardín central observando a Jin limpiar la pequeña piscina que estaba en el centro mientras Namjoon colocaba unas pequeñas maderas con paltas al lado de los pequeños árboles.

Jin se detuvo y se sentó a su lado dándole un vistazo al menor que se encontraba sentado con un libro sobre sus manos que no había siquiera abierto. Su vista permanecía en el cielo lleno de nubes grises que anunciaban una llovizna como de costumbre.

– No comiste. - Hablo haciendo que los orbes negros del menor se dirigieran a los de el, no respondió nada pero no pudo evitar parecer sorprendido ante la pregunta. - ¿No pudiste comer de nuevo?

Esa pregunta era típica, no era secreto la poca tolerancia que tenía Min ante ciertos tipos de sangre, Yoongi estaba maldito. Maldito porque jamás podría saciar su sed, era difícil para el alimentarse y algunas veces su cuerpo llegaba a rechazar la sangre que llegaba a ingerir, pero está vez no parecía el caso.

Yoongi no parecía con hambre, ni cansado, ni enfermo como de costumbre… había algo raro ahora.

– Bueno, no en realidad. - Se quedó en silencio de nuevo dirigiendo su vista al libro en sus manos y dando un corto vistazo a Namjoon que seguía cerca de ellos. - Estoy bien, solo necesito descansar.

– Oh ¿es así? - Jin solo soltó un suspiro tomando aire y dejándolo salir siendo bastante ruidoso llamando la atención de Namjoon que que los volteó a ver, esto dos solo sonrieron y su líder simplemente continuó con lo suyo. - No note cuando volviste ayer, ¿comiste algo haya fuera?

- Si, algo. - Jin se acercó tomando el libro que Yoongi tenía en sus manos mirando la portada, “Demian” para solo dejarlo a un lado.

– No sé que hayas comido pero cuídalo bien, no siempre encuentras una buena presa. - Los ojos de Yoongi se abrieron con sorpresa y temor, simplemente le dió una sonrisa ante esta reacción. - No soy un chismoso, pero es mejor que lo mantengas oculto por lo menos de Jungkook… ya sabes cómo es.

Alejándose y siguiendo con sus ocupaciones.

Yoongi se levantó y caminó hacia la sala, Jungkook seguía abriendo un montón de cajas entretenido, lo conocía desde que era un niño así que sentía una clase de cariño hacia él pero también lo conocía a la perfección. Ese niño le tenía un odio eterno a los humanos y más a los licán…

Qua Resurget Ex Favilla [YOONSEOK] PausaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora