Camino de Flores | Unicornio

24

Germán

Esa horrible voz nos interrumpió, ¿Quien se piensa que es para llamarme asi? El hijo de puta es otro, ubicate cara de Ken.
Ivanna se asusto y de inmediato se colocó delante de mi, como cubriendome de ese imbecil

- Que te olvidaste de hablar? Eh? - Se iba acercando con una actitud demandante, como si tuviera ganas de matarnos a los dos. Tengo que aceptar que jamas me habia encontrado en una situacion como esta, esta nervioso y no sabia bien que hacer.
- Contestame, ese gil te esta calentando la orejita? - Lo decía con burla, y yo seguí estatico. Puta madre
- Que haces aqui? - Esta vez fue Ivanna, con la voz queriendo romperse, pero se aguantaba
- Vine a ver a mi novia, pero parece que ahora es atorranta. O me equivoco? - Lo ultimo lo dijo dirigiéndose a mi. Como mierda se atreve a llamar asi a mi mujer
- Andate Marco - Lo decía ella, débilmente. - No te quiero volver a ver nunca mas
- Y dejarte con este gil? Dejate de joder Ivanna. Vos sos mía, sos mi novia. Tenes que estar conmigo, no con un fracasado como este - Mira, vagabundito, buscame un poquito mas y me vas a encontrar listo para romperte la boca de un golpe
- Andate, no hagas que llame a la policía - Ivanna me dio la mano e intento caminar lejos

Escuché el golpe, tan fuerte para sentirlo. Pero no sentía dolor, porque lo estaba sintiendo ella. Ese airesito de rey le dió una cachetada a Ivanna, tan fuerte que la tumbo al piso, aun así siguió sosteniendo mi mano.

- Que te pensas que sos hijo de puta? - Le dije, empujando hacia atrás -Qué no te educaron en tu casa?- Metía resistencia, pero la rabia me ganaba y sentía que podía con el y dos mas -Pegame o no? Machito

Y no dudo en hacerlo, un puño a mi cara. No me iba a quedar asustado, le regrese los golpes hasta que caimos al piso y comenzamos a rodar de un lado al otro. De fondo se escuchaban los gritos de Ivanna, pidiendo que paremos

La rabia me estaba consumiendo, no podía creer que había entrado a una pelea, cosa que mi familia me enseñó a evitar,  porque al que pega lo pegan y hay que entender. Aqui me importo una mierda, pegó a mi mujer, y no se cuantas veces mas lo hizo. Asi que lo voy a hacer hasta que ya no pueda mas, el pibe obvio.

Que le quede claro que no voy a permitir que se sienta en la libertad de hacer todo eso con ella, ni con ninguna otra mujer.
Lo estoy odiando tanto, tanto que quisiera ver su cara desfigurada. Pero no podía, no era Muhammad Ali

- Germán basta, no tiene caso. Dejalo! - Ivanna intentaba separarme, pero ella fue quien recibió un golpe por parte de el rubio descerebrado.

- YA, BASTA LOS DOS - Esta vez fue Iván. Lo agarro de los brazos al pibe mientras Ivanna me ayudaba a mi. Me ardía toda la cara. En que me metí, Dios.
- Andate de aquí, no te quiero ver cerca de mi hermana nunca mas, escuchaste? - Le gritaba, mientras lo corría de la calle.
- Esto no se va a quedar así, me escuchaste boluda de mierda?-  Lo decía con tanta naturalidad, el boludo tiene problemas o algo. Pero me esta apestando su existencia.

Subimos al departamento de Ivanna, para enjuagar y curarme alguna herida que pueda tener. Ella no hablaba, solo miraba como Iván me preparaba algodones con alcohol.

- Sos boludo? Te pudo hacer algo peor - Dijo Iván, mientras me pasaba el espejo para limpiarme.
- Y te pensas que iba a dejar que la siga tratando asi?- Le contesté serio
- No, lo entiendo por esa parte y gracias. Salvaste a mi hermana de estar amarrada a un abusador- Dijo dando palmadas en la espalda

Ivanna estuvo muy callada hasta que Iván se fue, dijo que tenía que regresar por temas del trabajo. Que la cuidara y la acompañara esta noche.