ONE-SHORTs (GENSHIN IMPACT)-(TRADUCCIONES)

-2-Ayudar al Gran Maestro Interino

Autor (a): fsf99

NOTA: CONTENIDO +18

Resumen:

Mientras continúan sus viajes a través de Teyvat, Aether se toma un tiempo para regresar a Monstadt, donde todo comenzó para él. Allí, decide ayudar una vez más a la Gran Maestra en funciones, Jean, con su trabajo, y obtiene más de lo que esperaba en el proceso. Es decir, darse cuenta de que él tiene mucho amor para dar.

El día comenzó como siempre, con Paimon preguntando cuándo estaría listo el desayuno.

Aether se había acostumbrado a los constantes deseos y punzadas de hambre del pequeño volador. No importaba dónde hubieran estado en Teyvat, ella siempre estaba pidiendo comida para probar. Cuando no era comida, era Mora. Cuando tampoco era así, a Aether le preocupaba que este enferma o moribunda. Afortunadamente, ese nunca fue el caso. Paimon era simplemente una glotona de comida y de Mora, algo que resultaba entrañable en el mejor de los casos y irritante en el peor. Él simplemente nunca le dijo esto último.

"¡Aether! ¡Vamos, Aether, hora de desayunar! ¡Sabes lo que significa!"

Esas fueron las palabras que ella había dicho para despertarlo, dejando al Viajero gimiendo y empujándola sin éxito mientras abría los ojos. Era una mañana brillante y brillante una vez más en Teyvat, y los dos estaban acampando en el desierto una vez más. Los aventureros lo hacían todo el tiempo, con sus tiendas de campaña de extraña construcción que solo tenían 3 solapas para protegerse de los elementos, y siempre un montón de libros sin aparentemente ninguna razón. La tienda de Aether era más pequeña que las grandes que a menudo encontraban en la naturaleza, lo suficientemente grande como para que él y Paimon se acomodaran cómodamente, pero lo suficientemente pequeña como para empacar y guardar. Era mejor que dormir al aire libre bajo un árbol, eso estaba claro.

"¡Despierta, Aether! Paimon tiene hambre y si no hay desayuno en los próximos diez minutos, ¡Paimon explotará!" Su compañera de vuelo levantó sus diminutos brazos en el aire para enfatizar la explosión en la que supuestamente se convertiría, riendo mientras volaba fuera de la tienda, gritando algo sobre cómo preparar la olla. Aether la vio irse, sentándose y secándose el cansancio de los ojos. Cuando finalmente estuvo listo, se puso de pie, agachándose dentro de la tienda antes de salir de ella y salir al mundo una vez más.

Lo primero que vio, en el horizonte no muy lejano, fueron las agujas y los molinos de viento de Monstadt.

Aether y Paimon habían pasado por muchas cosas durante el último año. Viajar a través de cuatro naciones de Teyvat no fue poca cosa, especialmente considerando algunas de las cosas que habían tenido que hacer en cada una. Parecía que cada Arconte que habían conocido había sido excéntrico de alguna manera (a excepción de Nahida, que era simplemente adorable), y sus historias se entrelazaban enormemente hasta el punto de hacerle preguntarse si él era el catalizador de tantos eventos que estaban sucediendo. Después de escuchar tantas revelaciones sobre Teyvat y su lugar en él mientras estuvo en Sumeru, pensó que le vendría bien tomarse las cosas con calma por un tiempo. Tenían planes de dirigirse a Fontaine a continuación, pero Aether sentía algo demasiado familiar.

Soledad.

"¡Fuego encendido!" Paimon aplaudió, habiendo preparado la olla del día anterior. Aether se rió entre dientes, agarró las reservas de alimentos y se puso a trabajar en la comida. Paimon estaba constantemente sobre su hombro, exclamando ooh y aah como siempre lo hacía cuando lo veía cocinar. Ella siempre disfrutó la comida de Aether, eso él lo sabía, pero en la medida en que ahora la pedía constantemente. Teniendo en cuenta dónde se encontraban actualmente, decidió hacer algo bonito y sencillo por ahora. Paimon terminaría devorando los huevos fritos Teyvat que él preparó para ambos, dándole un par de porciones más para que no se quejara más tarde. Mientras ella comentaba sobre la comida, su mirada se volvió hacia las agujas de Monstadt y dejó escapar un profundo suspiro.