ONE-SHORTs (GENSHIN IMPACT)-(TRADUCCIONES)

-8- El sueño más dulce

Autor (a): Oldspice2625

Resumen:

Nahida tiene problemas para dormir una noche, recordando su cautiverio por parte de los Sabios. No queriendo arriesgarse a posibles problemas al involucrar a Scaramouche y el frágil acuerdo que tienen entre sí, y queriendo mantener una sensación de control, decide visitar y confiar en Aether.

Notas:

(Ver el final del trabajo para ).

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No importa lo que hizo para tratar de calmarse y conciliar el sueño, nada parecía funcionar, de hecho, tal vez, su insomnio empeoró aún más al estresarse por eso. Actualmente se encontraba en el Santuario de Surasthana que fue diseñado (aparentemente por ella en algún momento, cuando era adulta y tenía control total sobre sus habilidades) para ser una cámara de meditación. Los Sabios habían abusado de su confianza y la encerraron dentro de la Cámara, considerándola no apta para gobernar o demasiado débil para liderar su nación. El resultado fue que Nahida tuvo que soportar más de 500 años de soledad sin forma de escapar hasta que puso en marcha un plan que fortuitamente coincidió con la visita del Éter, el Viajero, a Sumeru, lo que le permitió escapar y retomar el lugar que le correspondía gobernando sobre Sumeru, deponiendo los Sabios. El lugar que le correspondía... ¿era así? Había contemplado esto durante mucho tiempo después de que los Sabios fueran destituidos del poder y Al Haitham asumiera el cargo de Gran Sabio, aunque sólo fuera temporalmente.

No quería admitirlo, pero tenía un miedo un poco irracional hacia esa cámara. Después de que Aether le regalara un Envío del Reino poco tiempo después de que el caos de la agitación del gobierno de Sumeru hubiera disminuido, ella visitó el lugar que él llamaba su hogar temporal mientras visitaba Teyvat, un regalo de los Adepti por sus hazañas en Liyue. Al enterarse de que él tenía cierta habilidad para crear muebles para su tetera, ella le preguntó si podía, tal vez complacer su pedido y crear algunos muebles para ella. Amable como siempre, Aether accedió a su pedido y, fiel a su palabra, preparó una cama, algunas sillas y mesas, una mesita de noche e incluso algunas lámparas para iluminar el Santuario por la noche. Ella no le dijo, por supuesto, que esto era para evitar tener que usar la cámara. Durante un tiempo, esto alivió su situación, sin embargo, pronto se volvió cada vez más inquieta. Los pensamientos sobre los Sabios y sus acusaciones de que ella era débil e inútil se introdujeron en su mente con más frecuencia últimamente, perturbando su concentración y provocando que la ansiedad brotara de su mente.

Fue una experiencia humillante, por decir lo menos. Ella era la Arconte Dendro. El Dios de la Sabiduría. Para ella, ser susceptible al miedo, que en sí mismo era en gran medida un concepto irracional, sería completamente degradante admitirlo. Especialmente porque recientemente había recuperado el control de los Sabios. Necesitaba presentarse como un Dios y Arconte capaz y respetable ante su pueblo. Poco después de que la misión de rescate para liberarla tuviera éxito, Nilou, Dunyarzad, Dehya y otros le aseguraron que era capaz y digna de su puesto. Ella estaba agradecida por esto, pero ella misma no lo creía del todo, en todo caso. La duda la había estado carcomiendo desde entonces.

Lo que empeoró las cosas es que el Vagabundo, o Scaramouche como antes se le conocía cuando era un Heraldo Fatui, ahora estaba a su servicio. No se atrevía a mostrar debilidad de ningún tipo. Esta fue una oportunidad de oro para haber convertido a un antiguo enemigo en un aliado. Mantenerlo aquí en Sumeru era primordial. Serviría como una gran cantidad de información sobre los Fatui y sus planes, así como también la capacidad de ir al Abismo e interactuar con Irminsul con su ayuda. ¿Qué pensaría sirviendo a un dios tan débil? ¿No probaría esto no sólo las palabras y pensamientos de los Sabios, sino también sus propias palabras hacia ella? No podía correr ningún riesgo de perder a una persona tan valiosa, especialmente porque los Gnoses de cinco naciones ahora descansaban en la Tsaritsa, según la última correspondencia de Aether con ella. Aparentemente, Monsieur Neuvillette había asumido las funciones de la Arconte anterior, Furina, quien ahora había abdicado de su lugar como Hydro Archon en un giro de los acontecimientos que involucraron a algunos de los habitantes de Fontaine, así como la intervención de Aether, que incluso culminó en una figura de otro mundo. Skirk, haciendo acto de presencia ante el Viajero y el Iudex de Fontaine.