Eran las 10 de la noche cuando Violeth llegó a casa. Emma se dio cuenta de su llegada por el sonido del auto antes de que esta fuera presencia. Estaba estudiando y resolviendo varios ejercicios para mañana. Pensaba en pedirle algo de ayuda a Violeth, pero no quería ser desconsiderada con su hermana, Violeth entra en casa después de estacionar su auto, y por sorpresa, Emma le abre la puerta. Podría jurar que tenía una mirada muy tímida. Eso le parecía muy tierno de su parte.-Lle-llegaste temprano hoy.
-Quería verte lo antes posible", dice mientras entraba en casa, soltando la mano de Emma y subiendo a su habitación.
-¿Pa-pasa algo?
-Claro que no. Quiero hablar contigo en unos momentos, pero primero quiero tomar una ducha.
Dicho esto, Emma sale de la habitación de su hermana y va hasta la sala, esperando por ella algo impaciente y nerviosa. Luego de algunos minutos, Violeth bajó, ya con su pijama. Mantienen una conversación normal como si ya hubiera comido, terminada su tarea y hecho lo que hizo por la tarde, hasta que llega la pregunta que Emma más temía.
-Y cuéntame, ¿Quién se te declaró?
-Emmm, no lo sé. Yo estaba saliendo de mi tercera clase del día junto con Fernando y Alex, y de repente una chica se acercó a mí de la nada. Ni siquiera alcancé a ver su rostro, solo me entregó un montón de regalos y algunas cartas donde se declaraba hacia mí... y su número de teléfono- diciendo esto último en un susurro. -Y- yo no le he dicho nada, simplemente voy a rechazarla. No te preocupes por eso-.
Sin más que decir, ambas subieron a la habitación para estudiar. ¿Estudiar? ¡Claro que no! Era obvio que eso no iba a pasar. Violeth rodeó la cintura de Emma, dejando algunos chupetones en su cuello mientras se acercaban a la cama y caían en ella. Violeth comenzó a desvestir a su hermosa hermana, dejando su propia ropa intacta. Aunque estuvo serena todo este tiempo, necesitaba dejar las cosas claras, aunque ella no hubiera hecho nada.
—Ya veo. ¿Terminaste tus tareas? Subamos a tu habitación, te ayudaré."
Las cosas se empezaron a poner algo intensas en cada beso que bajaba desde su cuello hasta su abdomen. Violeth solo estaba provocándola, rozaba sus dedos contra su zona húmeda. No quería solo hacerlo, quería que Emma le suplicara por ella, que suplicara por el placer. Quizás lo podrían ver como un pequeño mensaje. Quería que su hermanita necesitara de ella, que se diera cuenta, así que jugó con ella durante varios minutos hasta que logró conseguir lo que quería
-Ohh, mierda, ya... mételos, ¿sí? Por favor," decía, algo desesperada y entre algunos jadeos.
Violeth sonríe muy complacida y solo dice algo pequeño y significativo: "Ya sé que me necesitas, bebé. No lo olvides." Dicho esto, la besa y la deja sobre la cama, tal y como llegó al mundo.
-Maldita seas, Violeth. ¡Maldita seas! ahshshshsh exclama con frustración.
Al día siguiente, la rutina fue de lo más común, alguna que otra cara larga por parte de Emma. Cuando están a punto de salir de casa, Violeth le entrega su libreta ya resuelta debido a que tenía varios errores, y luego se dirigen a la universidad como todos los días.
Cuando dormimos, en principio el cuerpo se autorregula. Gracias al sueño, recuperamos el equilibrio que hemos perdido a lo largo del día. En principio, según los médicos chinos, durante las 24 horas de un día, se da un equilibrio dinámico entre el Yang y el Yin, el primero domina por el día y el segundo por la noche. Esto es lo que se debe producir para, entre otras cosas, dormir bien, tener un sueño reparador.
Entre las causas más habituales del insomnio, según la MTC, se encuentran las siguientes: las alteraciones emocionales, el exceso de cansancio o preocupaciones, el desequilibrio entre Riñón y Corazón; y los malos hábitos alimenticios.
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¿NO DEBERÍAS SALVAR MI VIDA?
Mystery / ThrillerESTE LIBRO ES COMPLETAMENTE MÍO, ES UN LIBRO LÉSBICO PERO NO HABLAREMOS DE UN AMOR SE BASARA EN UNA OBSESIÓN PELIGROSA "ES SÁDICO ASÍ QUE CUIDADO AL LEER" ALGO ENTRE "HERMANAS" CUANDO EL SEÑOR KIM ACEPTO EL CAPRICHO DE SU HIJA POR ADOPTAR A SU NUEV...