Interacciones [BKDK]

Accidente

La puerta se cerró y aquellos tenis de color rojo comenzaron a caminar hacia la UA. Izuku acababa de visitar a su madre antes de regresar a los dormitorios. El camino debía ser sencillo, había pasado por esas calles muchas veces para visitar a su querida y muy preocupada madre. Así que el pecoso tenía la certeza de que el viaje sería corto. Sin embargo sus planes se interrumpieron una vez más por un grito de auxilio.
No tan lejos de dónde él peliverde se encontraba, se escuchó un grito de una viejita que pedía ayuda.
- ¡LADRÓN, POR FAVOR ALGUIEN, ATRAPEN A ESE LADRÓN!
Los reflejos de Midoriya habían mejorado muchísimo y rápidamente usó el One For All para correr hacia el lugar y llegar con aquella viejita.
- ¿Hacia dónde?
Preguntó el de ojos esmeralda con velocidad y la extraña viejita le indicó, señalando con su mano. Deku corrió activando su Quirk haciéndolo más fuerte y más veloz. Enseguida se le abalanzó al ladrón y con una patada en la espalda logró derribarlo. El ladrón cayó al suelo de frente y el pecoso rápido agarró las manos del ladrón para dejarlo inmóvil.
- ¡SUÉLTAME HÉROE!
Gritó el ladrón y forcejeó contra el más bajito, Pero Deku se mantuvo firme. En seguida la policía llegó.
- ¡Oye niño! ¿¡Tienes permiso para esto?!
Preguntó algo alterado un policía mientras que otro llegaba a arrestar al ladrón.
- ¡Tengo mi licencia provincial, Señor!
Indicó el peliverde con un tono serio como si se tratara de un soldadito militar. Deku sacó su licencia y el policía lo aprobó.
Luego arreglaron una declaración en fiscalía de Midoriya para después. El peliverde se quedó para asegurarse de que la viejita había recuperado lo que le robaron. Esa acción se había sentido tan heróica y merecía ser contada. El pecoso estaba emocionado y orgulloso de su progreso, caminó de regreso a la UA una vez más con una sonrisa emotiva.
En cuanto llegó a los dormitorios, subió a la sala común de su clase buscando a alguien a quien pudiera contarle lo que había logrado. Pero entonces escuchó una voz familiar desde el otro lado del pasillo.
- ¡OYE DEKU!
Bakugou se acercó hasta el de rizos y lo miró a los ojos.
- ¿Kacchan?
Preguntó él algo extrañado y el de ojos escarlata desvió por un segundo la mirada. Aún después de todo, seguía alegre de escuchar que el pecoso continuaba llamándolo con su apodo de siempre.
- ¿Tu tonta rutina terminó?
El rubio sabía que él más bajito siempre visitaba a su madre a cierta hora los domingos. Por lo que esperaba que ahora estuviera libre.
- ¿E-Eh?, ¡Oh!, ¡Si, Si, estoy libre!
Contestó el de ojos esmeralda algo nervioso, Midoriya se sonrojó un poco y miró el suelo, él se mantuvo callado, pensando en que Kacchan lo conocía bastante bien...
- Bien, necesito un segundo.
Continuo Katsuki e Izuku levantó la mirada asintiendo.
- ¡Claro!, Siempre tengo un segundo para ti, Kacchan-
Quiero decir, ¡Si!
El peliverde se quedó tan confundido como el rubio, no sabía por qué había dicho lo primero, claro, lo había pensado, pero no tenía planeado decirlo-... Había algo extraño en él.
- Bueno...
Continuo el de ojos escarlata con algo de confusión en su voz.
- Solo quería que-
Pero él no pudo continuar, ya que los ojos esmeralda del pecoso lo miraban impacientes y muy fijamente...
- ... ¿Qué te pasa?
El más alto estaba muy extrañado y bastante confundido. Se sintió observado, Pero de una manera que le hacía sentir incómodo y nervioso, Bakugou ya sabía que era perfecto pero no estaba haciendo nada específico que mereciera admiración en ese momento. Deku también lo sentía... Usualmente podía controlar bien sus palabras frente a Kacchan, lo había hecho por mucho tiempo, ¿Qué le pasaba ahora?
- A-... ¿A q-qué te refieres?
Preguntó el de rizos con algo de trabajo, no podía hablar correctamente como hacía siempre. Tenía que tener cuidado. Y el rubio lo notó enseguida...
- Estás actuando raro.
Le dijo con un tono algo despreciable.
- Sí lo hago.
Contestó él peliverde con una voz sería Pero enseguida se dió cuenta de lo que había dicho y quiso compensar.
- ¡Quiero decir, si!, ¿Q-Qué?, ¡Qué buena observación, Kacchan!, Buen trabajo.
Insistió el más bajito a pesar de que aquello no era realmente lo que quería decir. De inmediato los ojos esmeralda de Izuku se encendieron con respuestas. Todo tenía sentido, cada una de las palabras que había dicho tenían una cosa en común. Eran verdad.
Él más alto lo miró extrañado y ahora se había molestado un poco, el peliverde no le estaba dando las respuestas que quería a pesar de que no le estaba gritando, justo como le había pedido antes.
- ¿¡Qué pasa?!
Insistió el rubio con alteración y Deku contesto de inmediato.
- No quiero decirte.
Ahí estaba de nuevo con ese tono serio, el rostro con pecas se sorprendió por lo que había dicho y miró al más alto con algo de miedo.
- ¿Qué dijiste?
Katsuki levantó su mirada, indignado.
- Es que no quiero decirte, Kacchan.
Repitió el peliverde tratando de controlar sus palabras todavía.
- No jodas, Deku. ¿¡Qué te pasa?!, ¿ Estás en problemas o-
Pero Bakugou no pudo continuar ya que enseguida la voz del pecoso respondió.
- Tal vez.
- ¿CÓMO QUE "TAL VEZ"? ¿QUÉ HICISTE?
Repitió Bakugou acercándose más a él, Midoriya dió un paso atrás y contestó nervioso y su mirada estaba en todos lados, aquellos ojos esmeralda se movían sin parar.
- ¡Y-Yo no hice nada!, ¡No lo hice!, Mira, no directamente para-
Pero Katsuki lo interrumpió.
- ¿Acaso el mitad-mitad, lentes y tú volvieron a meterse en problemas?
Preguntó el rubio pensando en el incidente de Hosu con el asesino de héroes.
- ¡No!, Kacchan no, no maté a nadie, y p-por si acaso tampoco l-lo intenté. Y en realidad nosotros nunca-.
Pero el de ojos escarlata lo interrumpió para que guardara silencio.
- Okey, shhh. No quiero saber.
Dijo él agitando su brazo un poco.
De pronto todo sonaba como una confesión, cada palabra del peliverde era sincera y honesta. En ese momento se dió cuenta de lo que pasaba y miró al rubio algo asustado de que lo descubriera.