Escondite

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Un pecoso tocó desesperadamente la puerta de la habitación de Uraraka. La chica de las mejillas rosadas abrió la puerta consternada y vio al peliverde que en cuanto tuvo la oportunidad se lazó hacia el cuarto con desesperación.
- ¡Ochako, necesito esconderme ahora!
Midoriya cerró la puerta de golpe recargandose en ella con la espalda y enseguida corrió hacia la cama de la chica.
- Izuku-
¿Qué está sucediendo?
Preguntó ella preocupada al ver que su amigo se envolvía en las sábanas de su cama con temor.
- ¿Izuku?
Pero la chica no obtenía respuesta, el de rizos estaba demasiado asustado mientras se mantenía completamente enredado en cobijas.
- Izuku, ¿Qué te está pasando?
Preguntó ella y en su voz se notaba la perdida de paciencia y calma.
- Ochako, ayúdame por favor.
Pidió el chico mientras miraba con temor a su amiga.
- ¿¡Izuku, qué has hecho?!
Uraraka tomó los hombros envueltos en sus cobijas del peliverde y lo miró muy seria.
- P-Puede que le haya dicho a K-Kacchan que es a-atractivo-
Dijo él tartamudeando y desvió la mirada nervioso. La chica se quedó un momento en shock tratando de entender.
- ¿Le dijiste qué-
B-Bakugou... ¿¡Atractivo?!
El rostro de la castaña se volvió en una especie de sonrisa irónica.
- ¿Y por qué piensas que Bakugou es atractivo?
La chica sonrió suavemente.
- ¿Qué?, ¿Tú crees que no lo es-?
El peliverde estaba simplemente impactado de que su amiga no encontrará guapo al chico que es convencionalmente atractivo.
- Pff-, Bueno, Su cabello es de un lindo tono rubio y tiene una piel lisa...
Dijo ella como si estuviera recogiendo los datos más importantes de una lista.
- Pero es su personalidad la que destruye ese encanto.
Dijo ella negando suavemente con la cabeza y enseguida Izuku respondió.
- Oh sí, su carácter... Él es tan perfecionista y fuerte y determinado y necio y...
Izuku soltó un suspiro y su mirada se perdió en el vacío mientras que su mente ponía una imagen de Katsuki.
- Oh, Bien. Es grabe... Solo déjame sentarme aquí un momento-.
Dijo ella sentándose al lado del chico en su propia cama y volteo a ver al pecoso.
- Bueno. Le dijiste a Bakugou que es atractivo-, ¿Justo en su cara?, ¿Mientras estabas con la Quirk de la verdad?
Preguntó ella para tener un panorama más completo.
- Si..., Si lo dije. Oh no, va a matarme-.
Dijo Midoriya de una forma pesimista y trágica.
- Bueno, llegaste hasta mi cuarto. Tal vez eso significa que no lo hará.
Comentó la castaña, Pero Midoriya seguía con su visión de condena.
- Lo hará. ¿Por qué no lo haría?, Le dije que es atractivo... ¡Cuando está leyendo!
El de rizos perdía la cordura. Pero no tanto como la chica.
- Izuku... Eres mi mejor amigo pero-
¿Cuando está leyendo?, ¿Qué locura es esa?
El peliverde empezó a hablar con tanta pasión que la voz robótica que contestaba sus preguntas por la Quirk de la verdad se atenuó.
- ¡No es mi culpa!, Es que él se queda muy serio y concentrado y hace eso con sus ojos para enfocarse y...
La de mejillas rosadas miró a Izuku con una sonrisa persistente y el pecoso sintió algo de vergüenza.
- Creo que tengo un problema...
Confesó el chico y su amiga rio con malicia.
- Claro que lo tienes, Pero aún así te quiero.
Dijo ella burlándose un poco y entonces Midoriya se tapó más y se cubrió el rostro con las cobijas.
- ¡UGH!
¿Qué voy a hacer?, Kacchan me matará y si no lo hace-, Va a pensar que soy un asqueroso-.
N-No quiero que piense nada de eso, A-Apenas volvimos a entablar conversaciones bien como amigos-.
Dijo él demasiado preocupado por todo.
- Tranquilo, lo bueno es que si él trata de lastimarte, yo lo lastimaré antes.
Sentenció ella y el peliverde la miró con algo de miedo.
- G-Gracias Ochako... Pero preferiría que no-, Y menos en la cara. Si vas a golpearlo que no sea en la cara, por favor.
Pidió él y la chica sonrió burlona.
- Claro, Claro. La cara no... Por qué piensas que es lindo.
Dijo ella y el chico comenzó a divagar.
- Si... Lindo, Guapo y perfecto y atractivo-
¡Ugh!, Ochako de hecho estoy algo aliviado de que solo le haya dicho que es atractivo cuando está leyendo, por qué creo que él es atractivo ¡siempre!, ¡Así de malo es, Ochako!
Dijo él pecoso acomodándose los rizos por los nervios. La chica lo miró atenta a todo, ella sabía del terrible enamoramiento del peliverde, Pero nunca lo había escuchado describir a Bakugou de esa manera. El chico tomaba lo mejor del rubio de la manera más positiva que hubiera. La castaña sonrió con ternura y le expreso al de ojos grandes.
- ¿Sabes algo?, me agrada esta honestidad. Eres mucho más abierto y te ves muy entusiasmado. ¿Por qué no lo haces más seguido?
Preguntó la de mejillas rosas con una sonrisa y comenzó a hacer algo de burla.
- ¡Se supone que soy tu mejor amiga, Izuku!, ¡Deja de esconder tus sentimientos de mi-i-i-i-i!
Exclamó ella haciendo una voz graciosa y entrecortando la última palabra. El de ojos esmeralda rio suavemente y asintió.
- Tienes razón. Es solo que hablar sobre esto lo hace sentir tan... Real-. Y bueno, Kacchan no siente lo mismo así que...
El peliverde corto su frase. Temía que si lo decía en voz alta, fuera realmente verdad. La castaña miró a su amigo con una sonrisa melancólica y tierna.
- Bien, bien.
Descuida, te puedes quedar aquí hasta la noche. Pero tenemos que idear un plan para mantenerte a salvo de él por el resto de la semana...
Dijo ella con una sonrisa nerviosa, miró a Izuku y el peliverde le sonrió agradecido. Los dos amigos pasaron el resto de la noche haciendo cualquier cosa excepto eso y jugando, hablando y contando chistes. La tarde se pasó como un rayo y la noche llegó antes de lo que el peliverde quería.
- Izuku-
Dijo la de mejillas rosadas en voz baja, intentado que su amigo no se metiera en problemas.
- No, Ochako-
Mi habitación está pasando la de Kacchan, no me envíes a mi muerte-
Imploró el de ojos grandes y la chica por poco cedía, Pero de pronto unos pasos cansados y arrastrados se escucharon por el pasillo dónde estaba la habitación de la chica.
- Niños...
La voz de Aizawa era tan silenciosa como la de los muchachos, Pero los dos se espantaron terrible al escucharla. Los dos amigos voltearon a ver a su maestro con temerosas sonrisas.
- No me interesa que hacen, Pero las pijamada solo están permitidas en la sala del edificio. Ya lo saben.
Les recordó el pelinegro que de hecho, se veía más despierto que de costumbre.
- Lo sentimos mucho.
Dijo Uraraka y los dos se inclinaron. Pero el de rizos evitó decir algo para que el efecto de Quirk de la verdad no interrumpiera.
- Midoriya, regresemos a tu habitación. Uraraka, te pido que descanses bien.
Dijo él profesor y los dos niños asintieron. Ochako se despidió de su amigo y Aizawa escoltó al pecoso hasta su habitación. Esta caminata fue incómoda con el característico silencio de Aizawa, hasta que él le hablo al más bajito.
- Midoriya, ¿El efecto de la Quirk te ha molestado mucho?
Preguntó él profesor, Pero antes de que él se ojos verdes respondiera se corrigió a si mismo.
- No es necesario que respondas, solo me preocupo por tu bienestar.
Midoriya bajó la mirada y asintió levemente. Aunque la Quirk de la verdad deseaba que el de rizos abriera la boca, Izuku se empezaba a sentir seguro.
En el momento en el que tuvo que pasar al lado de la habitación del rubio. Se dió cuenta de que este no estaba dentro y Aizawa tuvo que dejarlo en ese momento.
- Ese también se salió... Bien, Midoriya. Confío en que llegarás a tu habitación por tu cuenta.
Dijo él pelinegro y se dirigió a buscar al otro muchacho escapista. Midoriya llegó hasta su cuarto con cierta tranquilidad. Una tranquilidad que se sentía como la calma antes de la tormenta... El pecoso se recostó sobre su cama y se envolvió en sus sábanas caracterizadas de All Might.
Trató de dormir tranquilo mientras que esa sensación de miedo lo invadía.
- Tal vez volvamos a lo mismo de antes...
Kacchan no me volverá a hablar igual.
Pensamientos como estos inundaron al de ojos esmeralda hasta que con es peso en su pecho se quedó dormido. Esperando despertar y decir que todo lo que había dicho tan solo era un mal sueño...

Interacciones [BKDK] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora