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Fui a visitar todas las veces que estaba internado hasta cuando fue retirado pero no llegué en ese momento porque cuando fui ya había sido retirado, no me habló más, no sabía el porque o que le pasaba, nunca me había hecho esto pero no le quería d...

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Fui a visitar todas las veces que estaba internado hasta cuando fue retirado pero no llegué en ese momento porque cuando fui ya había sido retirado, no me habló más, no sabía el porque o que le pasaba, nunca me había hecho esto pero no le quería dar más vueltas al asunto.

Estaba en lo del Cochi adentro de la casa porque se estaban re comiendo y no pintaba ser mal tercio, yo estaba en la mía y ellos en la de ellos. Ambos nos beneficiaba, me hice un mate y en cuanto escuché que tocaban la puerta, agarre un cuchillo de la cocina y al escuchar la voz de Kiru, me calme un poco, dejando de nuevo el cuchillo.

Fui afuera con el mate y la China me alzó la mano para agarrarlo, yo se lo dí con una sonrisa de lado y me senté con Anabella que estaba en un silloncito que había ahí.

Y mire el piso, no por nada en especial, solo lo hice. Escuchaba su conversación pero no la razonaba, era raro, me dedicaba a ver el piso pero era como que no llegaba a entender lo que decían. Mi mirada estaba fija.

— Si venís a buscar al Hernán, venís al pedo. — dejó de hablar un segundo. — Deberías confiar en la palabra de tu amigo, que te fue a visitar todos los días mientras estabas 'internada'

— Eso no tiene nada que ver, mira como estoy. — después de decir eso, Kiru se levantó un poco la camisa mostrando una gasa en el abdomen.

El mira fue lo único que pude escuchar o lo único que me parecía más o menos interesante así que lo mire con mi mirada, no quería hacer mucho ruido o interrumpir la conversación, había una tensión tensa que yo por el momento no iba a participar.

— No llore'

— ¿No llore'? - preguntó irónico. — ese pendejo me hizo mierda, yo no tengo la culpa que sea hermano de este.

— Si fuera tu hermano, ¿Me lo entregarías? — preguntó de repente Jorge.

Hubo un silencio corto que me ponía nerviosa sino también por como se miraban todos-—Cochi estaba de espaldas así que no podía llegar a verlo. Desde acá la bronca que tenía en los ojos de Kiru se le notaban y Jorge parecía un perro callejero con confusión.

—. Un Tevez no haría lo que hizo tu hermano.

Que pesado del orto con los Tevez, yo lo amaba mucho pero desde pendejo que jodia con su familia.

Ya no quería escuchar más, era raro pero por alguna razón el ver el piso fijamente me alejaba un poco de todo esto, ¿Me había drogado tan rápido? Sentía todo re liviano, todo moverse, mi cabeza daba vueltas y yo me sentía envuelta a todo.

No me quedó nada de la conversación pero solo algo que había dicho Cochi había entendido

“Entregar a la sangre”. Por alguna razón se me había quedado, de esta manera que lo veía yo, era fácil porque no estaba metida pero yo no sabría que hacer en la situación de Jorge o Kiru.

Sigo escuchando como hablan pero de repente, veo como poco a poco todos los presentes me miran quitándome de ese vuelo raro.

— ¿Eh?

—  ¿Te va' conmigo y lo deja'? — preguntó para después volver a hablar. — ¿O te olvidas de mi y de mi familia y te queda' con estos? No sé, vo' decidí.

¿Cómo quería que eligiera eso? Ahora me estaba matando por haber sentido pena por ambos, parecía que el de arriba había escuchado mis lamentos y me dió el “beneficio” de vivirlo.

— No me pode' hacer elegir, ellos son como mi familia pero vos... Sos vos.

No podía elegir, todos me veían, yo sabía lo que le satisfacían a todos pero dependiendo a lo que eligiera si o si, alguno se iba a enojar.

— No la elegiste ni una sola vez, ¿ahora si te interesa si no te elige a vos? — preguntó Cochi para luego nuevamente darse vuelta a mirarme aún con los brazos cruzados.

No me moví de donde estaba entonces Kiru soltó una risa nasal y escupió el piso para luego cerrar la puerta todo loco. Tenía ganas de llorar pero no lo iba a hacer, no iba a llorar más, no por él.

— Se lo merecía, si se garcho como a tres minas en el cumpleaños de Jorge. — comentó Anabella haciendo que la mirara.

— Igual se la re jugó, tres minas sin que se descubran las tres juntas. — respondió la China.

Lo que más me enojaba no era solo que se garchara a esas tres sino que luego de esas tres haya venido con el descaro de venir a mi y hacerlo, lo peor que todo encajaba que era cierto lo de las tres pibas.

Me llevo a un lugar que no era muy visible para todos, el como si gemia intentaba no decir mi nombre cuando otras veces lo ha hecho, su repentina llegada, todo cuadraba.

Poco a poco esa pena que tenía con Kiru se volvía en enojo, me sentía utilizada, sabía que era un chamuyero del orto pero no sabía que se había cogido a tres antes de mi, el pensar cuántas veces habrá hecho lo mismo me dió náuseas y escalofríos.

— Lu, ¿Estás bien? — preguntó Anabella mirándome preocupada sacándome del trance.

— Si, solo que me saco medio de onda que se haya tirado a tres pero nada, para mi que se coja a su apellido que con tanta horna viene acá a presumirnos.

Todos se rieron y siguieron el chiste pero yo solo me dedique a dar una sonrisa de lado, estaba destrozada pero no quería preocuparlos, todos tenían sus propios problemas, problemas que yo no podía ocupar lugar.

Me volví a mi casa para que puedan hacer el trabajo que no podían hacer antes porque Kiru interrumpió y en cuánto entre, tranque, tirandome al sillón que había.

Cuadros me llamaron la atención pero uno más que los demás, en ese cuadro y recuerdo aparecía Kiru así que estaba en medio por llorar de nostalgia y por el pelotudo de Kiru. Por suerte me había sacado pocas fotos con él así que era más por la nostalgia.

Igual tenía una idea que no se dejaba de pasear; superar al Kiru y que mis lágrimas ya no llorasen por él.

Pero mi obstáculo es que todos los que se habían interesado en mi, los había mandado a cagar solo porque me gustaba él y los que se interesaban en mi eran pajeros.

Quería olvidar todo por un segundo y que solo sea risas, me levanté del sillón y busque por mi pieza, por suerte todavía mi quedaban tres bolsitas intactas.

Quería olvidar todo por un segundo y que solo sea risas, me levanté del sillón y busque por mi pieza, por suerte todavía mi quedaban tres bolsitas intactas

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1110 palabras.

HOLAAM, acá otro capítulo, espero que les haya gustado tanto como a mí me gusto hacerlo, la verdad no andaba muy inspirada por eso puede que este medio choto pero les juro que el próximo queda mejor (o eso espero). La verdad no pensaba poner esa escena de la conversación que tenían Jorge, Cochi y Kiru pero es que varias frases que dice Cochi son tan icónicas que tenía que si o si poner algunas partes.

Nos vemos en la próxima, los amo 💗

"Vos y yo" - El KiruDonde viven las historias. Descúbrelo ahora