Esa danza con la muerte, donde las cifras en la balanza son el compás. Cada gramo perdido es una victoria efímera, y el espejo refleja un cuerpo que se desvanece.
Las comidas se convierten en enemigos, y el hambre se disfraza de triunfo. Los huesos emergen como ruinas antiguas, y la piel se estira como un lienzo en blanco.
MC.