Ninth Kiss:
DopamineFinalmente, después de cuatro temporadas junto a Ferrari, tenemos un monoplaza que nos permite pelear por un campeonato; mi primera vez peleando por uno.
No estoy peleando por un campeonato con cualquier persona, sino que estoy peleando con el que muchos llaman 'mi eterno rival', Max Verstappen.
Desde que tengo memoria, Max y yo la mayor parte del tiempo nos encontrábamos intentando ser mejor que el otro y todos los que nos llegaron a observar competir en aquellos tiempo haciéndose la misma una sola pregunta siempre reinó: ¿quién de los dos sería el primero en ganar un campeonato del mundo en fórmula uno? Pregunta que fue respondida la temporada pasada con Max resultando el inminente ganador.
Pero ahora, yo tenía la oportunidad de ganar uno.
La presión por hacer que Ferrari gane otro campeonato del mundo después de 15 años de haber ganado el último es brutal, ya que era la esperanza de los tifosi, la prensa y el equipo, y por el momento soy uno de los únicos que puede lograrlo.
He estado tan atrapado en esto, intentando vivir el momento y la emoción de pelear porque mi mayor sueño se haga realidad y de intentar cumplir con las expectativas de todo el mundo, intentando ser lo suficientemente bueno para ganar un campeonato y probarme a mí mismo de que puedo hacerlo.
Probablemente jamás en mi vida había tenido tanta presión encima de mis hombros.
Hay tantas cosas en mi cabeza que simplemente no puedo dejarlas y he estado con demasiado en mi pecho que cada vez se está volviendo más y más pesado que empieza a resultar cada vez más difícil de llevar, pero no importa porque siempre estaré dispuesto a esto y más por el equipo de mis sueños.
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Circuito Paul Ricard, 24 Jul 2022.
Mi carrera en Francia había sido desastrosa y yo mismo había sido el causante de que así fuera.
Convirtiéndose en probablemente una de las peores carreras en toda mi carrera como piloto.
El error que cometí fue vergonzoso, no se supone que alguien como yo que se encuentra peleando por un campeonato debería cometer este tipo de errores.
No sé con certeza cómo demonios espero ganar el campeonato cuando cometo estos errores, simplemente no lo merezco.
Llevo desde que me retiré de la carrera escondido en el cuarto de descanso que Ferrari me proporcionó.