Two

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— Lo primero que debes entender es que aquí se siguen mis reglas, se hace lo que yo digo pero sobre todo me respetas

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— Lo primero que debes entender es que aquí se siguen mis reglas, se hace lo que yo digo pero sobre todo me respetas. — Alucina Alex.

— ¿De qué tienes miedo? — Me levanto ante la mirada de todos para sentarme en sus piernas — Me estás dando a tu único hijo en bandeja de plata sabiendo que puedo deshacerme de él.

— Irinia esto no es ningún chiste.

— No estoy bromeando — Acaricio su cabello — ¡Ya sé! No quieres volver a pedir prestado dinero como la última vez que hice un golpe de estado. — Su mandíbula se tensa y mira para todos lados menos a mi.

— Ministro ¿Es verdad? — Gema pregunta llena de conmoción.

— Responde Alex. Dile la verdad a la élite de aquí. — Me acerco a su oído — Diles que si pierdes contra la pirámide pierdes contra mí porque me sacarían de Iron Walls. — Mi lengua pasa por su cuello y lo tomo de la mandíbula para devorar su boca en un beso fogoso que era obvio iba a corresponderme.

— ¡Ya basta! — Christopher golpea la mesa y muerdo el labio inferior del ministro haciéndolo sangrar, me separo disfrutando el sabor de su sangre.

Me río para ponerme de pié y arreglar mi ropa ante la mirada de todos. — Christopher tanquilízate. No tienes que sentir celos no valla a ser que te vuelvas a meter a la fuerza y tu papi por cubrirte me mande a Afganistán de nuevo. ¿No es así James?

— ¡NO SE DE QUE HABLAS! — Se exalta mirando para todos lados — ¡NADIE LE CREA A ESA LOCA. MIENTE! — Grita llena de histeria y alzo una ceja cuando se sonroja al sentir la mirada de todos.

— Si no fueras culpable no estarías tan preocupada e histérica. — Explico. — Iré a mi casillero. — Tomo la carpeta — Después leeré esto e iré en busca de la tropa privada.

— Esa tropa es incontrolable. — Informa Luisa — Los evalúe desde una distancia prudente y son demasiado inestables ya han masacrado a varios capitanes que deseaban tomarlas e incluso el capitán Lewis fue rescatado por Parker cuando intentó darles una órden.

Me giro para observar a Bratt quien aprieta su puño con vergüenza para pasar a examinar a Parker en silencio quien no me quita la mirada de encima.

— ¿Algo más? — Regreso mi atención a Luisa.

— No importa que tan peligrosa seas, desde que esa tropa llegó y habló en privado con nuestro superior osea el Ministro. Nadie ha podido acercarse sin salir lastimado. — Laila se adelanta a la explicación.

— Ya veo. Siguen siendo igual de Incompetentes. — Mi mirada va a Alex y alzo el documento — La tropa privada la quiero formada y bajo mi mando terminando de arreglarme. — Ordeno.

— Como quieras. — Masculla Alex y todos lo miran asombrados cuando se levanta dejando el desastre en la sala.

— Pero ministro, esa tropa está loca. — Salta Angela antes de que se valla pero no detiene su camino quedándose en silencio.

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