EMBLM - LIBRO 3 PARTES 1 Y 2 / "LA GUERRA OSCURA DE LAS ALIANZAS"

CAPÍTULO XV: CUIDADO CON QUIÉN TE METES

Scorpius miraba perplejo al animal que tenía frente a él, era un lobo del tamaño de un perro mundano de raza grande, con unas alas de murciélago, estaban frente a frente y el animal le había hablado a Scorpius que no sabía cómo reaccionar ante eso, tanto Scorpius como el animal se miraban a sus ojos bicolores incapaces de decir algo más mientras caminaban en círculos en el interior de la cueva. Duraron así un tiempo hasta que el animal decidió romper el silencio.

-¿Qué?, ¿Te comieron la lengua los ratones?-. Dijo el "lobo" con alas de murciélago hacia Scorpius que lo miró aún más sorprendido.

-No es solo que, no eres un animal común-.

-¿Acaso tú eres normal, Scorpius Sane?-.

-¿Como demonios sabes mi nombre, bestia?-. Lo señalaba acusadoramente, pero sin que él se lo esperara el Ghàidheal se le acercara hasta quedar frente a frente y gruñía un poco. -Lo siento si lancé un comentario ofensivo-.

-No para nada, fuiste amable-. Respondió  el Ghàidheal con sarcasmo, cosa que extrañamente alivianó el tenso ambiente que había entre ambos. -Sé tu nombre porque estoy unido a ti, así que asumiré que eres mi amo, a quién debo proteger contra todo mal y peligro que exista-.

-Ah entiendo, eres mi guardián espiritual-. El Ghàidheal asintió mientras se acercaba para comenzar a caminar y buscar un lugar donde dormir antes de que los dos retomaran el rumbo con Jacob hacia las fuentes de poder. -Por cierto y no te lo tomes a mal, ¿Por qué tartaste tanto tiempo en aparecer-. 

-Eres algo difícil de encontrar Scorpius, no todos tienen una naturaleza tan única como tú, durante bastante tiempo estuve dormido esperando mi llamado, tú precisamente debiste ser quien me llamara, pero veo que tardaste demasiado por estar con tu amiguito-.

-Ah yo... Supongo que tienes razón-. Decía Scorpius al Ghàidheal antes de seguir caminando hasta llegar a donde estaba Jacob descansando con su Nidhogg, le dedicó una mirada de preocupación, si bien ya habían hecho las pases aún se encontraban en conflicto y Scorpius presentía que algo no andaba bien desde que robaron el libro y su desconfianza en la "misión" aumentó cuando conocieron a Markel, Scorpius suspiró abatido antes de dejarse caer para dormir.

-¿Problemas amo?-. Preguntaba el Ghàidheal a Scorpius antes de acomodarse a su lado para brindarle calor y protección, Scorpius soltó otro suspiro de agotamiento antes de responderle.

-Por favor dime Scorpius, aún no me acostumbro a esos saludos como si fueran de la realeza, como sabrás soy arcano y tenemos una manera distinta de referirnos los unos a los otros-.

-Está bien "Vampyr ulv", sé todo sobre ti, quién eres, tus preocupaciones, tus deseos, hasta tu peor recuerdo, así que dime... ¿Todo anda bien entre tu amigo y tú?, y será mejor que ni se te ocurra mentirme-.

-No, hace poco conocimos a un extraño viajero,algo dentro de mi me decía que el tipo no era de confiar, pero Jacob parecía ciego, él... Ha cambiado tanto que ya ni se llama Jacob, ahora se llama a si mismo "Kobus el Heraldo de lo oculto" y la verdad eso me asusta un poco-.

-¿Puedo saber la razón de tu temor?-.

-Temo que Jacob se convierta en una marioneta o un esclavo de Zigor, las cosas no están bien e ningún lugar, la magia ha sido perturbada, robada y contaminada con lo oscuro, con el mal, los seres mágicos cada vez están cediendo y cayendo y Jacob parece no darse cuenta de aquello, ahora tiene un deseo enfermizo por conseguir poder con ese maldito libro yo, no sé qué hacer para evitar que algo malo pase, no quiero perder a otro amigo-. Scorpius que tenía un rostro serio siempre y una coraza dura y casi imposible de romper se estaba mostrando vulnerable ante NyxRadu (como había optado llamarlo), como si el Ghàidheal  lo comprendiera posó su hocico en su hombro y Scorpius inconscientemente lo acarició como si fuera un perro común y silvestre.