20

16 3 1
                                    

—¿Ya llegamos? ¿Ya llegamos? ¿Ya llegamos?

Respira, Jimin.— Pensaba. —Puedes manejar la situación con este loco. Después de todo, lo nuestro ya no se puede ocultar para siempre.— Continuaba hablando en sus pensamientos.

—¿Es aquí? Dime, dime dime.

—Sí, si llegas a comportarte como en la escuela, cubriré tu boca y te arrojaré afuera.— Habló mientras abría la puerta nervioso. —Abuelo, ya volví... invité a un compañero a casa.

—¡Hola abuelo!

—Que no haga preg tontas, que no haga preguntas tontas...— Susurraba.

—Hola, muchachos.— Se asomó un anciano sonriente, vestido con un delantal de cocina, con un aura dulce y tierna.

—¡Abuelo! Mire, le traje frutas, como no sabía qué le gustaba traje manzanas ¿Lo acompaño a dejarlas en la cocina?

—Por supuesto que me gustan, te agradezco. Puedes dejarlas donde quieras.

—¿P-por qué se van solos?

—Venga, lo ayudaré en lo que necesite.

—No hace falta, te agradezco.— Revolvió su cabello.

—¡Pondré la mesa!

Luego de un rato, la comida estaba lista y servida, todo se veía delicioso. —Yoongi, ten~.

—Abuelo, no necesitas separar comida para nosotros, come tú primero o se enfriará.

—Está bien, no tardará, ahora ten tú. Yoongi ¿Sabías que el pescado ayuda a la inteligencia de los niños? A Jimin no le gusta el pescado y le cuesta quitar las espinas, por eso lo hago yo por él.

—Así que eres torpe~.— Se burló. —No se preocupe más, yo quitaré las espinas para Jimin.

—Gracias...— Se alegró.

Así continuaron entre risas y comentarios agradables hasta finalizar cada plato. —¡Abuelo! Con Jimin iremos a estudiar en sus habitación.— Avisaba mientras limpiaba la mesa.

—Llévense algunas manzanas, son muy estudiosos.— Jimin se alejó para lavar los platos, dejándolos solos. —Yoongi, dime ¿Jimin se lleva bien con sus compañeros?

—Todos son muy amables con él.— Se limitó a responder, ya que no tenía amigos.

—¿Qué hay de sus estudios? ¿Le cuesta?

—La pasa mal porque trabaja durante las noches, pero es realmente inteligente.

—Él siempre ha sido un niño muy inteligente. Pero dime... es un estudiante transferido ¿No ha sido molestado?

—N-no ¿Por qué?

—Cuando apenas ingresó, regresaba a casa con heridas en el rostro siempre, incluso una vez tenía el uniforme dañado. Me preocupa... más que se me burlen por no tener padres.

Yoongi sintió una punzada en el pecho. —No, no, para nada. Realmente se lastimaba jugando, umm, al basquet.

—Gracias, Hijo.— Le sonrió y le entregó las manzanas.

El pálido se fue con un sentimiento cálido hasta el cuarto del mayor.

—Tardaste mucho lavando manzanas.

—Lo siento.— Lo abrazó por la espalda y dejó un casto beso en su hombro. Jimin volteó sorprendido, siendo atrapado en un beso de labios ahora.

—V-volviste a enloquecer.

—Tu celular está sonando, pero quiero que sigamos abrazados.

—Síp, lo sé.— Se sonrieron y se alejó para tomar el teléfono.

—¡¿Por qué ese señor sigue llamándote!?— Le arrebató el aparato donde recibía la llamada de su padre. —Ya van a ser dos meses desde la última vez que te llamó.

—Quiere darme dinero.

—Solo quiere sentirse menos culpable.

—No lo bloquees, no prestes atención a eso. Además, si lo ignoro por completo vendrá hasta aquí y no quiero que moleste a mi abuelo.

—¡Quiero bloquearlo! Bloquéalo ¡Quiero bloquearlo!

Pasó una hora en la que Jimin trataba de terminar su tarea pero, como siempre, Yoongi no se lo permitía. El pálido movía sus pies para juguetear con los del castaño. Luego comenzó a arrojar lápices al lado del contrario para tener una excusa de acercarse.

—¿Qué haces? Termina de completar el texto. Oye... ni siquiera hiciste algo, estás dibujando ¿Qué le dirás al profesor mañana cuando te pida la tarea?

—¿Qué tiene? Simplemente te estoy dibujando.

—¡Ya pasó una hora y no haz hecho nada!

—No dibujé solo un retrato ¡Llené todas mis hojas!— Sonrió orgulloso. —¿Hay algún secreto debajo de tu cama?— Comenzó a hurgar debajo del colchón. —¿Puedo ver toda tu ropa? ¡Ese loco te sigue llamando!— Volvió a tomar el teléfono. —Hola, soy el joven rico que conoció la última vez ¿Recuerda? ¿Qué necesita? Si no me dices, colgaré.— Colocó el alta voz.

—¡Jimin! Por favor ¡Mi hijo no ha vuelto a casa en días! No tengo idea de dónde está ¿No lo has visto? Necesito que me ayudes a buscarlo.— Se lo escuchó hablar.

—No tenemos idea, busque a otra persona que lo ayude. Caballero ¿No entiende la situación? No somos cercanos.

—¡Es un asunto entre Jimin y yo! ¡Es algo familiar!— Yoongi desactivó el alta voz.

—Le estoy diciendo que el teléfono de Jimin es mío, así que no molestes ¿Quiere discutir conmigo? Jimin es mi novio y yo no permito que lo lastime.

—Ustedes... no puede ser.

—Es mejor que lo entienda bien, si usted le crea problemas a Jimin y a su abuelito se meterá conmigo.— Entonces sintió cómo colgaban el teléfono. —Tch, ya ves que nadie quiere pelear conmigo.

—Algo le pasó a mi hermano...

—Bebé, ahora tienes novio, no aceptes ciegamente cosas estúpidas.— Vio a Jimin sonreirle. —¿Entendiste?

—Síp~.— Recibió piques en su mejilla por parte de el pálido.

—Me he dado cuenta de que te has ablandado.— Rió malvadamente.

—Al ser novio de alguien tan energético, inevitablemente he cambiado. Estamos saliendo, no quiero discutir, termina tu tarea.

—¡Eres tan lindo!— Comenzó a acariciar sus orejas. —¡Eres tan lindo!— Continuó con su cabello.

Meet Me After School [Yoonmin]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora