Familia.

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— Es tan pequeña...

Lucifer estaba anonadado y a la vez embelesado la primera vez que tuvo a Charlie en sus brazos. Se veía tan pequeña y frágil, como una muñeca de porcelana, pura y dulce, provocándole el temor de que pudiera romperse en cualquier momento.

Por su parte, su acompañante también estaba admirando a la princesa en sus brazos. Era una copia casi idéntica del soberano que la sostenía y aquello hizo que soltara una carcajada, sin embargo era tan adorable presenciar esa escena que no quiso alejarse.

— Es como una mini tú. — aunque no quería decirlo por ser pequeño, casi casi que sonó de esa forma, provocando un ceño fruncido en Lucifer — No, espera, no me refería a eso.

Pero pasada la reacción inicial, el mismo Lucifer pasó a la bebé a los brazos de aquella persona.

— Sostén a tu hija también.

Entre cielo y tierra | Radioapple. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora