☁️🍎Alas De Amor 🍎☁️[OMEGAVERSE]

📻💔🍎Solo mio..(1/2)📻❤️🍎

Lucifer, en ese momento en que se enteró de lo que verdaderamente había pasado y cómo había pasado, todo eso lo estaba poniendo nervioso, pues sentía tantas emociones juntas que creía que en cualquier momento estallaría, pero de alguna forma, de la nada empezó a sentirse raro. Nuevamente como cuando estaba en el baño, su cuerpo poco a poco se sentía caliente y con muchos escalofríos, además de que su respiración se empezaba a sentir pesada. Era de esperarse que pasara eso, pues Alastor pensó que la única forma de retener a Lucifer era provocando el ciclo del Omega, una opción que realmente no era la indicada para la situación...

Los amigos de Alastor se dieron cuenta de las feromonas de Alastor, las cuales estaban bastante pesadas. Era evidente que quería inducir el ciclo del Rey, el cual sí estaba reaccionando, pero el rey no era el único que era omega en ese lugar, sino que también lo era Carmilla, la cual más que inducir su ciclo, hacía que tuviese miedo, pues las feromonas, como mencioné antes, eran pesadas y densas, y solo el destinado al alfa podía resistirlas, o bueno, podía percibirlas tanto para inducir el ciclo.

"Alastor, ¡deberías detenerte ya! ¡No solo estás afectando al Rey!" gruñó Zestial, expulsando unas cuantas feromonas para calmar a Carmilla, la cual se aferraba a Zestial temblando de miedo.

"Tiene razón, querido... Lo que estás haciendo no es lo mejor..." dijo Rosie preocupada por Alastor, el cual tenía la mirada clavada en Lucifer, el cual se sujetaba el pecho.

"¿Qué... qué mierda me estás haciendo...!?" gruñó Lucifer, temblando y perdiendo la fuerza en sus piernas. "¡Para de una maldita vez...!" gruñó Lucifer, tambaleándose un poco."

"¿Por qué debería parar, su majestad...? Si lo hago, usted se irá..." dice Alastor con una sonrisa nerviosa.

"¡Ja! ¿Haces esto para retenerme!?" gruñe Lucifer, temblando y tratando de regular su respiración. "Pues déjame decirte... ¡ni esto va a detenerme!" gruñe Lucifer, cayendo pues sus piernas ya no tenían fuerza.

Alastor, al escuchar las palabras de Lucifer, bajó las orejas y esparció muchas más feromonas para después acercarse a Lucifer. Bueno, eso intentó, pues Rosie se apresuró a sujetar a Alastor, el cual se le notaba desesperado y adolorido en sus ojos.

"¡Alastor! ¡Tienes que reaccionar!" gruñe Rosie tratando de separar a Alastor, el cual solo luchaba por ir por Lucifer.

"Bien... creo que es mejor que se vayan de una vez, Alastor..." dice Zestial acercándose a Alastor, el cual al ver a Carmilla temblar de miedo reaccionó.

"¿Qué... qué es lo que hice?" pregunta Alastor volteando a ver a Rosie, la cual desvía la mirada.

Lucifer, por otro lado, estaba luchando contra sus propios instintos, los cuales deseaban con todo su ser a un alfa, y no cualquiera, sino que quería específicamente a Alastor, el demonio radiofónico, algo que a Lucifer no le agradaba, pues era la peor situación para llegar a querer a ese demonio, el cual con la poca visión que tenía en ese momento, pudo ver que tenía la mirada dolida, aunque mínimo... ya había dejado de comportarse de forma salvaje.

Alastor, ya un poco más tranquilo, pidió a Rosie que lo soltase para poder llevar a Lucifer al hotel donde podría estar más seguro que estando en esa fiesta, donde a pesar de la barrera de Zestial, las feromonas de Lucifer aún podían percibirse y hacían bastante efecto en muchos alfas, los cuales poco a poco se estaban acercando como depredadores acechando a su presa, que ahora era Lucifer.

"¿Estás seguro de que vas a poder llevar al Rey en ese estado, Alastor?" pregunta Carmilla un poco más calmada.

"Bueno, intentaré, pero es mucho mejor que lo lleve yo a que lo lleve otro," dice Alastor suspirando.