☁️🍎Alas De Amor 🍎☁️[OMEGAVERSE]

🍎❤️🕊 Especial Lisucifer🍎❤️🕊

-✨️🕊Gracias.. a ti..🕊✨️-

El mundo era bastante pacífico, un lugar lleno de alegría, niños corriendo, pequeños animales en los campos y algunas personas caminando pacíficamente... todo era así... era perfecto para mi parecer... pero todo lo bueno acaba en un momento...

Y ese momento... no estaba muy lejos...

La Segunda Guerra Mundial dio inicio... llamaron nuevamente a mi padre para combatir... yo me negué a que él fuese a dar lucha para defender el país, pero si él no iba, iría yo, y estaba dispuesto a ir en su lugar.

Y así fue, yo me ofrecí, pero mi padre fue sin que yo me llegara a dar cuenta... cuando me enteré de ello no podía hacer nada ya... él había partido y no sabía dónde se encontraría ahora, me lamenté por no haber ido en el mismo instante que me ofrecí... me lamenté... pero no serviría de nada lamentarme... ¡debía ser fuerte! Y confiar en que él regresaría sano y salvo.

(3 años después)

Mi padre aún no regresa... mi madre está dando por muerto a mi padre... pero yo... yo confío en que él estará bien... yo tengo fe. Sé que Dios lo traerá a salvo... yo lo sé... pero mi madre está destrozada... cada día que pasa la veo peor... eso me destroza por dentro, por lo que siempre me esfuerzo por verla sonreír.

Pues para mí, una sonrisa es la puerta al corazón. Además... ¿quién no quiere ser feliz?

"¡Mamá... deberías... de comer un poco, ¿no lo crees?" dice Lisandro acercando el plato a su madre, la cual veía sin emoción el exterior por la ventana.

"No creo... que lo necesite..." dice la mamá de Lisandro, el cual suspira.

"Mamá... tal vez creas eso, pero lo necesitas... ¿o qué dirá papá si regresa y te ve así?" dice Lisandro sonriendo levemente, a lo cual su madre lo voltea a ver sonriendo levemente.

"Mhm... tal vez... tengas razón, cariño..." dice la mamá de Lisandro sonriendo y acariciando la mejilla de Lisandro, el cual le sonríe dulcemente a su madre. "Mi pequeño Erick... ¿qué hice... para merecerte, corazón?" dice la mamá de Lisandro, agrandando más su sonrisa.

"No lo sé mamá... pero yo tampoco sé qué hice para merecerte a ti" dice Lisandro antes de abrazar suavemente a su madre, antes de que tocaran la puerta.

Los dos se sobresaltaron un poco, se supone que no esperaban visita o bueno eso suponía Lisandro ya que aunque hablaba con todos, no era mucho de llevar personas a la casa, por lo que tal vez alguien había venido de improviso.

"¿Tú... invitaste a alguien, querido...?" preguntó la mamá de Lisandro viéndolo.

"Eh... no... realmente no, madre, pero no te preocupes. Tú come tranquila, yo iré a ver quién es el visitante" dice Lisandro sonriente. "¡Vuelvo en un periquete!" dice Lisandro antes de ir hacia la entrada.

Lisandro abrió con gran alegría la puerta, suponiendo que tal vez podría ser algún conocido del pueblo que hubiese venido sin aviso, pero gran sorpresa se llevó al ver que no era así... era un coronel. Lisandro al ver al coronel en la puerta no dudó mucho y se hizo a un lado dejándolo pasar; estaba confundido pero también un poco nervioso, pues antes de dejarlo pasar buscó con la mirada a su padre, el cual no se encontró por desgracia. Simplemente giró para ver al coronel, el cual se sentó en la sala de estar.