La noche ya había caído por lo cual el festival se encontraba en su mayor apogeo, las luces de los juegos y tiendas iluminaban todo de manera hermosa, los niños correteaban y reían al igual que algunos adultos.
Entre todas las personas Atsushi caminaba también muy feliz con una sonrisa de oreja a oreja mientras abrazaba un lindo y esponjoso peluche de tigre, iba bastante contento pues pudo demostrar su gran talento en el juego de tiros, claro que también debía de agradecer los duros entrenamientos que tenía con Kunikida y su ahora mejor relación con Byakko.
Atrás de él, Akutagawa caminaba cabizbajo tratando de asimilar todo lo que había ocurrido hace pocas horas, obviamente que también había superado el juego con facilidad gracias a sus habilidades como mafioso, una parte suya estaba orgullosa pues logró aquello que se propuso, ganar el peluche de tigre, porque si él había sido el ganador de ese peluche y eso nos lleva a la otra emoción que predominaba en su ser en esos momentos, confusión no sabia porque razón había ganado solo para poder darle algo al hombre tigre, una parte de él no lograba comprenderlo, pero había otra que desde ya hace tiempo le daba una respuesta, una que ignoraba por miedo a aceptarla.
Desde su primera victoria y regalo recibido Atsushi estaba con las energías recargadas, y más al ver un lado diferente del mafioso uno avergonzado, nervioso y tímido había revuelto todo en su interior pero, deseaba más, quería descubrir más facetas del mencionado así que no dudo cuando lo tomó de la muñeca, en la que ahora se encontraba un pulsera de color rojo con un dije de dragón color negro que fue el premio ganado por Atsushi, ya sabrán ustedes como llegó ahí, y posteriormente arrastrarlo por toda la feria a los diferentes puestos, justo como en un principio el mafioso había hecho.
La emoción del albino se le escapaba hasta por los poros llegando a contagiar al mafioso, porque que tenia de malo soltarse por unas horas. Ese fue el pensamiento de Akutagawa, iba a bajar sus defensas y disfrutar de la compañía de aquel que le tomaba de la mano y le sonreía de aquella manera tan brillante, un brillo capaz de alumbrar su oscuridad.
Aunque no entendía la mayoría de los sentimientos que en ese momento se mezclaban en su interior, ya que no era alguien de muchas emociones, pero decidió no resistirse más y dejar que todo tomará su propio rumbo y quizás al final podría descubrir de dónde provenían todas ellas.
Visitaron la mayoría de juegos, tiendas, puestos de comida y exhibiciones de objetos, el albino estaba feliz en esos momentos que las carcajadas no pudieron faltar avergonzandose por lo ruidosas que eran.
__ ¿Porque te tapas la boca cuando ríes?
__ Me da vergüenza, es ruidosa y molesta.
__ No es verdad, están bien, combinan con tu personalidad.
A pesar de que ninguna emoción cruzó el rostro del mafioso al decir esas palabras Atsushi sabía que eran sinceras, al igual que la sonrisa que le dedico al mismo y el sonrojó que ocupó sus mejillas.
Y tal vez sin todo el ruido que había a su alrededor podrían haber escuchado el acelerado palpitar del corazón contrario, siendo los primeros testigos de los sentimientos que nacían en sus interiores.
Todo el ajetreo y las idas y venidas de aquí para allá los habían dejado exhaustos, por lo cual se alejaron de la multitud en busca de un lugar tranquilo para reponer fuerzas.
Una banca que estaba del otro lado del festival con vista a la ciudad fue la elegida, ambos sentados al lado del otro contemplaban el horizonte frente a ellos como también las estrellas del cielo en silencio, lo único que se escuchaba era el canto de los grillos y las ramas de algunos árboles moviéndose con el soplar tranquilo del viento.
ESTÁS LEYENDO
Our Future ~Soukoku ~Shin Soukoku
FanfictionEl Soukoku y el Shin Soukoku se meten en problemas por culpa de sus cotidianas peleas, la agencia y la mafia iban a tomar medidas sobre aquello pero... Unos personajes desconocidos hacen aparición generando una gran confusión y caos, además de revel...