Bajo el efecto de los nervios la propuesta de Diego resonaba en mi cabeza, creando un torbellino de emociones ¿ debería aceptar el trato ? pero es que ni siquiera se de qué se trata , la incertidumbre me invadía y a la ves una curiosidad irresistible .
Necesitaba tiempo para reflexionar y ordenar mis pensamientos, me sumergí en la noche tranquila , refugiándome en las páginas de mi libro favorito " Fingiendo amor "las letras de aquel libro parecían cobrar vida.
Me transportaba a un mundo donde los límites entre la realidad y la fantasía se desdibujaban , ¿podría ser posible vivir una historia similar en mi vida ? la idea de contratar a alguien para simular una relación amorosa me parece absurda , pero es un poco tentadora ¿ podría funcionar en el mundo real? .
Con el libro entre las manos y los ojos brillantes de emoción sin darme cuenta cerré lentamente los ojos.
En ese momento de silencio, una determinación inesperada se apoderó de mi sabía que la propuesta de Diego representaba un desafío, pero también una oportunidad única para explorar un nuevo camino, quizás tan emocionante como el que había encontrado en las páginas de mi historia favorita.
Mañana sería un nuevo día, el día en que se encontraría con Diego y descubriría qué le deparaba ese misterioso trato. Antes de sumergirse en el sueño, una sonrisa tímida se dibujó en sus labios, llena de expectativas y una chispa de valentía que hasta entonces no conocía . Se entregó al sueño, lista para lo que el destino le tenía preparado.
A la mañana siguiente me despierto por el ruido de mi celular , al revisar.
—Oh carajos —mascullé,.En ese momento olvidé todo , los nervios recorrieron mi cuerpo, era un mensaje de Diego.
" Buenos dias linda , avísame cuando estes lista"
Corrí rápidamente al baño y me cambie de ropa , Al bajar a la cocina , el aroma a café recién hecho de mi madre me dio un poco de hambre, le di un mordisco a mi sándwich, y el sonido de su voz de me sorprendió.
—Mamá! —me pare del susto.
—A dónde vas tan apurada si se puede saber , jovencita —me miró con desconcierto.
—Y-Yo e-e ... voy a salir con mi amiga —logré decir.
—Asi tan arreglada a ver a tu amiga —me observó con una sonrisita.
—Si a una amiga y ya me voy que se me hace tarde.
—Sabes yo también pase por tu edad no es necesario que me mientas —respondió y me dio un beso en la frente —.Ve que se te hace tarde , luego me cuentas —me guiñó un ojo.
—Esta bien mamá.
Al salir de casa le envie un mensaje a Diego diciéndole que estaba lista y fui a sentarme en el parque.
minutos después
—Hola nena , ¿ como has estado ?.
—Hola Diego , eh estado bien , quería darte las gracias por traerme ayer a mi casa , ¿ y tú como has estado?.
—Supongo que bien , por la razón que te llame anoche como te expliqué , es para proponerte algo , pero necesito que me acompañes a un lugar dónde estemos solos, quiero llevarte a un sitio —me miró con ojos de misterio y a la vez con un poco de nervios.
—E-Esta bien , ¿sabes? anoche me quedé pensando, no esperaba esa llamada y que me soltaras todo eso —respondí mirando al piso.
—Yo tampoco esperaba llamarte y pedirte eso, solo son cosas que pasan , porque tienen que pasar —emitió una dulce sonrisa —.Vamos sube a la bici.
En todo el camino hubo un silencio, nada de palabras, pero no era un silencio incómodo , sino un silencio de algo desconocido.
—Aquí estamos.
Me llevó a una casa , era un lugar muy bonito , la casa era grande y desde afuera se veía un hermoso jardin lleno de tulipanes y rosas , las ventanas eran de un cristal transparente y las cortinas eran rojas, la entrada tenía un portón de hierro con seguridad.
—¿ Esta es tu casa ? —pregunté con estusiasmo.
—Si , ¿quieres entrar ? —respondió brindándome una mano.
—¡Si! —le dediqué una sonrisita emocionada.
Si por fuera se veía todo bonito, por dentro era mucho mejor , al enterar me tope con una gran sala, con las paredes pintadas de amarillo y unos grandes sofás, mientras en la pared había un enorme televisor y dos sillones , también estaban las cortinas rojas que desde afuera se veían , todo era hermoso . Mire fijamente en la pared y vi dos cuadros de una mujer de pelo rubio , junto con dos niños y un hombre.
—¿Esa es tu madre ? —pregunté con un poco de curiosidad.
—Si , vive un poco cerca de donde queda tu casa.
—¿ Y ese que está a su lado eres tú ? —. ¿ Y ese hombre es tu padre? .
—Si , ese pequeño soy yo y ese tipo es mi padre , aunque para mi, ya no lo es —contestó un poco decepcionado y un tanto enojado.
—Mmm ¿ porqué dices eso ? —pregunté sorprendida.
—No quiero hablar sobre eso , tal ves en otro momento, mi propósito era traerte para hablar sobre el trato .
Mierda cierto , el trato lo había olvidado por completo, entre tanta distracción , lo olvidé .
—Vale está bien , comienza —intenté reponerme, que no se notara que estaba nerviosa.
—Pues las relaciones no me funcionan mucho , lo eh intentado varias veces y siempre fracaso, eso no es lo mío , desde que te vi con Sami me llamaste un poco la atención y pues no eh sabido que hacer y en estos días lo eh estado pensando mucho —. Tomó un respiro para seguir hablando —, y ... no quiero una relación estable, así que quería pedirte que, follaramos , solo follar nada de sentimientos de por medio , no habrán reglas , no te prohibiré nada , podrás seguir con tu vida normal, así qué dime ¿ que piensas ? .
Dios , todo esto me ha dejado en shock , no se que pensar, no me lo esperaba ¿¿Me esta pidiendo que me acueste con el !??? , ¿ será una buena idea? , ¿ y si es el tipo de chico del que todos hablan ? , esto no me puede estar pasando , siento como si fuera uno de mis libros y yo , no se , que hacer , que pensar ....
—Diego ... no esperaba esto , E-E yo ... —me interrumpió.
—Si quieres puedes pensarlo, no quiero presionarte, todo será como tu quieras y si no quieres lo entenderé —me dio una mirada de ternura y compresión .
—Esta bien, necesito tiempo para analizar todo eso y pensarlo bien —contesté mirándole a los ojos.
—Como desees linda , y ya hablado todo esto, ¿ quieres que te lleve a casa ?.
—Si , no quiero que mí mamá me haga tantas preguntas —le dije sonriendo.
—Vamos entonces.
Al llegar a casa agradecí a Diego por acompañarme y antes de despedirse quise preguntarle.
—Diego¿ porque me elegiste a mi para este trato?.
—Creo que eres diferente , especial de alguna manera , no como las otras chicas , se siente algo distinto contigo, algo que me hace querer intentar algo fuera de lo común —confesó con sinceridad .
Mi mente era un remolino de pensamientos confusos, girando en torno a la inesperada propuesta de Diego. ¿Debería aceptar sus condiciones, estar en un acuerdo tan inusual y sin ataduras emocionales? ¿Podría manejar una relación tan distinta a todo lo que alguna ves experimenté antes?.
Con un gesto de despedida y una sonrisa nerviosa, Valentina entró en casa, dejando atrás un mar de dudas y un mar de posibilidades. Mientras subía las escaleras hacia su habitación, el eco de la conversación con Diego resonaba en su mente, plantando la semilla de una decisión que cambiaría el rumbo de su vida. Entre susurros de incertidumbre y destellos de curiosidad, se adentró en un mar de pensamientos profundos, dispuesta a enfrentar lo que sea que el destino tuviera reservado para ella.
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El destino de dos corazones
RomanceÉl la desafía con un pacto audaz: una relación sin etiquetas, un viaje sin mapas. ¿Un juego peligroso o la llave para encontrar la libertad? Ella se debate entre el miedo a lo desconocido y el anhelo de una conexión auténtica. ¿Podrá romper con las...