Fobias con: Damian Wayne

AEROFODIA

Aerofobia: miedo irracional a realizar un desplazamiento mediante avión.

—¿En cuanto tiempo despegamos, madre? —pregunta Damian ocultando su temor —en diez minutos —responde su madre sin mirarlo.

Damian entrelaza sus manos, las aprieta fuerte, algunos de sus dedos truenan, su madre lo mira de reojo.

—No seas débil Damian, ni siquiera hemos despegado, que patético —sin dejar al niño responder salió de aquel lugar dejando al niño de seis años solo.

Cuatro años después, se subió a un avión por tercera vez, esta vez, para irse con su padre —. El avión está a punto de despegar —informa la azafata con delicadeza, Damian asiente y corre al baño.

Del bolsillo de su pantalón saca una caja de pastillas, en breve la abrió —dos... no, cuatro...no, mejor cinco para conciliar bien el sueño.

Puso las cinco pastillas para dormir en su boca y con ayuda del agua del fregadero las logro pasar.

Se mira en el espejo del baño, su respiración se hace cada vez más ruidosa una sensación de pánico lo consume por dentro, sus ojos comienzan a hacerse cristalinos.

<<No seas débil, no seas débil>>

Se talla los ojos bruscamente y sale del baño, apenas toca su asiento cae en un sueño profundo.

Un año había pasado, Damian, alias Robin saltada entre los edificios de Gotham junto a su padre Batman.

—Robin —llama Batman, el nombrado se detiene y voltea.
—Mañana partimos a metrópolis, la liga requiere mi ayuda.
—Me quedo en casa —dice en breve, es obvio que para ir a metrópolis rápido debe subir a un avión, situación que ha evitado a toda costa.

—No puedes, ninguno de tus hermanos estará en casa vendrás conmigo, es una orden. —Sin esperar respuesta Batman sigue su camino, Robin se queda atrás, muerde su labio inferior, tendría que conseguir pastillas para dormir, pero ¿donde?

En la mañana Damian se encuentra buscando en los cajones de la sala de estar, aprovecha la soledad de la mansión para encontrar una solución.

—Señorito Damian, ¿necesita algo del cajón de medicamentos? —El chico se detiene en seco, voltea a mirar a Alfred <<que oportuno>>

—Yo... si, no logro dormir en las noches después de la patrulla últimamente.

—En ese caso le hare un Té...

—¡No! —exclama con rapidez, Alfred alza la ceja.

—No hacen efecto en mi, prefiero una pastilla.

El silencio reino por unos minutos, Alfred suspiró  —, segundo cajón a su izquierda —Damian enseguida abrió tal cajón.

—Con una basta y sobra joven Damian

—Si claro... una —sin más se retira, dejando a Alfred sospechando.

Camino al aeropuerto Damian se encuentra jugando con el botón de la ventana —lo vas a descomponer —reprime Bruce —. Que delicado, ¿verdad Damian? —bromea Dick.

—Aja
—Ey Dami, ¿que sucede?
—Nada... no quiero ir...

—Vamos, superboy estará allí, juntos no se aburren te lo aseguro —Damian hace una mueca —¿me puedo quedar contigo? —Dick lo ve por el retrovisor —. Nop imposible, esta madrugada voy a salir de la ciudad por una misión —Damian asiente resignado.

Tiempo después esta en frente del avión, Bruce habla con el piloto, Damian observa el avión a pocos metros de distancia, su angustia aumenta. 

—Amo Damian

Damian salta del susto, se regaña a si mismo por no evitar que lo sorprendieran.

—Mande 

—Es hora de abordar

Damian asiente y comienza a seguir a Alfred, van directo al avión. Siente su corazón acelerarse, su respiración agitada, es consciente de que tiene que controlarse antes de que su padre lo noté.

Se queda inmóvil con sus ojos fijos en sus manos entrelazadas en el asiento que tomó, su padre tarda en abordar también. Minutos después el horrible sonido de la puerta cerrándose lo congela.

<<Se elevara más y más y más...>>

<<Se caerá... el piloto seguro es tan idiota que lo hará caer>>

<<Se estrellará, temblará...>>

<<No no no, yo necesito... necesito>>

Con las manos temblando levemente se intenta desabrochar el cinturón, pero al estar algo mareado se le dificulta, creyó poder con su fobia pero no fue así.

—Damian estamos despegando quédate en tu asiento —ordena Bruce al ver la acción del chico, este tiene una mirada de desespero —. No no no, yo, yo... necesito —pausa —ir al baño —concluye calmando un poco su voz. Busca la caja de pastillas en su mochila, no la encuentra. El pánico le cae como un balde de agua fría.

Bruce alzo la ceja —. Ahorita, en unos minutos.

Damian volvió a ver sus manos, tiemblan, cada segundo más sus oídos se aturden, cierra fuerte los ojos buscando autocontrol, siente algo en el estómago y en cuanto abre los ojos...

—¡DAMIAN!

Bruce se acerca rápido al chico que aun temblando seguía vomitando, Bruce lo mira preocupado, le quita el cinturón y sujeta los brazos de Damian haciendo que se recargue en él al seguir vomitando.

Sus labios seguían templando al terminar, Bruce no tiene idea de que hacer.

—Damian...

—DEJAME —como pudo lo empujó y fue corriendo al baño.

—Alfred, dile al piloto que aterrice en el aeropuerto más cercano —pide antes de ir trás su hijo.

Abre con lentitud la puerta, y allí lo ve, a un pequeño niño llorando intentando controlar su ruidosa y agitada respiración. Con lentitud se acerca.

—Damian... ¿qué sucede?

—Nada... 

—Damian... dime que sucede...

—Sucede... sucede...—mira sus manos que abrazan sus piernas, después a su padre quien esta arrodillado en frente de el.

—¡Sucede que soy patético! ¡Soy débil! —explota entre lagrimas.

—No no no —se sienta por completo y carga a su hijo acostándolo en su pecho —solo, solo tienes miedo —susurra.

—¡Eso es patético!

—Es humano... no tienes por que avergonzarte

—...

—Ahora dime, ¿a que le temes?

—A que el avión se caiga... a que vuele muy alto...

<<A veces, se me olvida que es un niño>>

—¿Y que sientes?

—Mareos, me siento aturdido, y tengo miedo —se esconde en el pecho de Bruce mientras se abraza de él con más fuerza, este suelta un suspiro.

—Te aseguro que no se caerá, el avión es el transporte más seguro que existe. Te conseguiré algodón para que te pongas en los oídos, después de cambiarte de ropa... si quieres te puedes quedar conmigo todo el vuelo justo así como estamos ahorita —al terminar de susurrar le da un cálido beso en la frente, Damian con lentitud asiente.

—¿Seguro que no se caerá?

—Seguro, además, si lo hace, yo te protegeré.

Damian sonríe sabiendo que si es necesario esa promesa si se cumplirá.

01/09/2024