LOS ERRORES DEL PASADO, LA FELICIDAD DE HOY

Capítulo 13: Cara a Cara... Parte 3

Narra Gildarts:

Hoy es el día en el que podremos reencontramos con Natsu y también podremos conocer de una mejor manera a sus hijos, pero sinceramente estoy algo nerviosos, espero poder agradarles *mirando los regalos* tratare de ser el mejor, es algo que le prometí a Cornelia

Mientras estaba es mis pensamientos Porlyusica vino a nosotros, estábamos algo confundido, pero según la anciana seriamos los primeros en ir a verlo, los del gremio al recibir el permiso de la anciana nos apresuramos y alistamos los regalos para comenzar a avanzar, pero mientras caminábamos pude notar que los otros gremios y sus integrantes nos seguían mientras eran guiados por un Zeref que nos miraba molesto.

Sin embargo, mientras avanzábamos y nos adentrábamos más n el territorio de Natsu pudimos ver una casa de dos pisos algo simple, pero había personas frente a esta casa... esa cabellera es inconfundible... ahí estaba el y como era de esperar a su alrededor estaban esos pequeños.

Poco a poco nos acercábamos a él, pero pude notar que cada paso que daba se hacía pesado, sin embargo, el maestro seguía caminando normalmente, pero sé que esta como yo.

Al poco tiempo llegamos frente a Natsu y los pequeños quienes trataron de esconderse de nosotros detrás de su padre.

Nadie dijo nada, todos estábamos en silencio mientras veíamos a un Natsu quienes nos veía con algo de tristeza y temor.

Ante nuestro silencio pudimos escuchar que el maestro Makarov se acercó lentamente a Natsu quien al ver al maestro su rostro se transformó en uno de tristeza, cuando el maestro iba a decir algo, Natsu se arrodillo y apoyo su frente en el piso, mientras una voz algo fuerte sonó...

- Maestro, yo lo siento

Fin de la narración de Gildarts

Narra Makarov:

El pasar del tiempo no perdona nada, pero, aunque mis fuerzas se hayan ido y mis viejos huesos tiemblen ahora, hay cosas que aprendí en esta vida y cosas de lo que me arrepiento. Pero mi decisión de dejar solo a un hijo mío, no me lo puedo perdonar... pero aun asi porque *sollozo* porque este niño...

- Maestro, yo lo siento

Frente a mi estaba mi hijo Natsu arrodillado y con su frente pegada al suelo, su voz se escucha algo suave, pero puedo notar cierto temor en él.

Pero Natsu *sollozo* tu no debes disculparte... fui yo quien no insistió y te dejé de lado *sollozo*

- papá/padre

A sus lados estaban los pequeños quienes confundidos estaban preocupados...

En mis años de vida, lo único que me alegraba era el hecho de haber visto crecer a aquellos niños que llegaron a mi gremio hace mucho, pero cuando veo a esos pequeños no puedo evitar sentirme aun peor por mis acciones de abandonar a Natsu, pero estoy orgulloso de este hombre que a pesar de todo me considera alguien importante en su vida *sollozo*

- Natsu –no sé cuándo mis lágrimas empezaron a salir, si fue cuando lo vi, o cuando llegue frente a él, o cuando se arrodillo frente a mí al primer momento de verlo- Natsu *snif* pequeño tonto tú no eres el que debería disculparse –mientras el volvía a verme me incline a verlo directamente, quizás es porque había crecido, pero me sentía muy pequeño frente a su mirada- Natsu sé que lo hiciste por mi *sollozo* porque mocoso... *sollozo* porque siempre tienes que sacrificarte por el bien de todos *sollozo* - aquel hombre en el que se convirtió derramaba lágrimas al verme- Natsu... *sollozo* lo has hecho muy bien, hijo.

- AAAAHHHH –

Cuando terminé de hablarle sentí como Natsu me abrazo y dio un grito mientras dejaba escapar aquella tristeza que tenía, pero no me importo yo también lo había extrañado. Nunca debí haberlo dejado...