Los Niños de Chaldea: EL SECUESTRO

Cap. 19 Salisbury

Los niños decidieron dormir, aunque sea poco, para mantenerse descansados, almorzaron ligero y emprendieron su viaje al poblado que habían visto el día anterior, fue un largo viaje, y aunque parecía pequeño a lo lejos los niños pronto descubrieron que se trataba de una gran ciudad inglesa, era elegante y colorida. Sus edificios eran brillantes y estaban llenos de vida. Antes de adentrarse más decidieron colocarse la capucha de sus abrigos, Meiko enrollo su bufanda para que esta luciera como una capucha, sujeto a Caleb para mantenerlo en un perfil bajo no querían llamar la atención, pero al observar enanos, hadas y bestias se sentían poco, fuera de lugar.

Habían estado informando a sus amigos en Chaldea su situación, pero al acercarse a la ciudad las comunicaciones habían empezado a fallar.

-Esto... sé que... nuestros tíos son singulares, pero...- Alioth susurro a las chicas quienes las seguían de cerca. Meiko sentía que podía flotar con libertad al ver a las hadas, pero se mantuvo a poca altura para no llamar la atención.

-Lo sé... solo actúa natural... ehhh, disculpe buscamos a unos amigos, una de ellas es una chica con orejas y cola de gato y...- Reiko sintiendo la confianza de su hermana se sintió con la libertad de flotar a la misma altura para acercarse a un puesto ambulante.

-mmm he visto a muchas chicas con orejas y cola niña, si no vas a comprar quítate de la fila- aquel enano de mal humor regaño a la niña quien solo se alejó alzando las manos.

-Tal vez deberíamos pensar mejor nuestro acercamiento- Meiko se quedó pensativa, observando alrededor junto a su hermana.

-Allí vienen los reclutas... se creen la gran cosa por qué vienen acompañados junto al señor Percival, y el caballero de la Luna, esos niños no dudaran ni 2 segundos un enfrentamiento contra un Mor- Los niños escuchan los murmullos de los transeúntes para mantenerse al margen.

-El caballero de la luna es un hada muy bonita, yo sí le pediría una cita... incluso podría competir con Lord Lancelot en belleza-

-Doble o nada, a que el caballero de la Luna le patea el trasero al caballero de la Tormenta-

-Shh quieres que te maten idiota-

-Percival no es el nombre de...- Mei observó a Rei mientras Alioth cubría a las niñas tras de él, para no llamar la atención entre la multitud.

-De un caballero de la mesa redonda...- los ojos de Reiko se ensancharon asomándose por el hombro de Alioth con sumo cuidado, observando en dirección a los caballeros de los cuales hablaban las hadas.

Un hombre alto de hermosa sonrisa y grandes pectorales se encontraba acompañado de un grupo de jóvenes, lucían armaduras de pies a cabeza, eran jóvenes de diferentes clanes, algunos Goblins, otras hadas, incluso jóvenes humanos, no mayores que ellos, pero había una joven pequeña, cuya armadura la hacía lucir como si fuera una valquiria, llevaba un yelmo que cubría sus ojos, pero sobresalía su hermoso cabello plata y oro.

-Crees que... ¿los caballeros puedan ayudarnos a encontrar a nuestros amigos? - Alioth susurró a las niñas, le llamaba la atención aquel hombre alto, lucía amable y daba el aire de confianza.

-No lo sé gordito, debemos de ser prudentes... recuerda que pueden estar al servicio del rey del Lostbelt- Reiko de quedó pensativa un momento para sujetar el hombro de Alioth haciéndolo retroceder. -Intentemos obtener algo de información, si son de confianza iremos directo a ellos, después de todo, recuerden que no deben descubrir que estamos aquí-

-Suena arriesgado- Alioth retrocedió unos pasos hasta quedar pegado a un callejón. Los niños se adentraron al callejón para perder de vista los caballeros, para ellos, era mejor no arriesgarse en aquel momento.