i really need you daddy [Levi x lectora]

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Estos días han estado organizando el cumpleaños de Kuchel, sería en la cabaña así que Levi y yo nos ofrecimos en ir y limpiar todo, dejar todo listo para la cena.

En estos instantes estaba en mi trabajo así que me mantuve ocupada, me sentía bien al estar con la mente ocupada y no tan preocupada o estresada por Gisselle. Ella ha estado mejor, su peso estaba perfectamente bien gracias a la fórmula que le daban, no tuve la oportunidad de producir leche materna, simplemente soy de las pocas que no producir. Por lo tanto, querían tenerla unos días más para hacer los últimos estudios.

Organicé minuciosamente los turnos para cortar cabello, aplicar productor y demás. Escribía, anotaba mientras mi mente volaba. Era realmente extraño todo, saber que tenía un bebé, una criatura que dependía de mí, que salió de mí. Aun repasaba la información que recibí.

Estuve embarazada durante mi boda, durante los últimos arreglos, esos momentos de estrés, en esos momentos ella estaba dentro de mí y yo no tenía idea. Gisselle creció en mi vientre y jamás se me notó, no tuve ni siquiera algún síntoma, mi vientre permanecía siendo la misma de siempre. Pero ella ha estado ahí todo ese tiempo. He bebido vino y otros tipos de bebidas alcohólicas, he hecho movimientos bruscos, he subido y bajado las escaleras miles de veces, he pasado por tantas cosas que me sorprende que Giselle haya soportado todo eso. Ella en verdad quería nacer.

Aun así me siento culpable por todo, aunque no tenía idea de nada, de todas formas debí saberlo.

-Nos vemos el lunes- me despedí de Nanaba. Salí del local caminando hasta la salida.

Ese día le daban el alta a mi pequeña Ackerman, luego de varios meses ella al fin estaría con nosotros. Su cuarto estaba mas que listo para ella. Mi emoción de tenerla bajo nuestro techo era abrumadora.

-¡Llegué!- dije mientras cerraba la puerta. Veo a mi esposo bajar las escaleras a pasos lentos

-Que bueno que llegas, hay que buscar a nuestra pequeña.... bendición- reí y asentí.

Subí al carro de mi esposo, ansiosa en poder volver a casa con mi bebé en brazos. Al llegar caminamos por los pasillos entrando a la habitación de mi princesa. Ella estaba durmiendo plácidamente, con ayuda de las enfermeras la sacamos de su incubadora, ella chilla al ser movida provocando que mi esposo sonriera ante el suave llanto de nuestra pequeña. 

-Hola mi pequeña princesa - él le susurra- vamos a casa.

Al firmar unas cosas y juntar las pertenencias de Gisselle nos vamos hacia el carro. La acomodamos en su lugar abrochando su cinturón de seguridad. 

(...)

Al llegar a casa, mientras que mi esposo baja los bolsos yo entro con nuestra pequeña a la casa, estaba despierta observando todo. La recuesto en mi pecho mientras subo las escaleras, caminando por el pasillo entro a su habitación.

-Bienvenida a casa- susurré dando un suave beso en su cabeza.

Admiraba su rostro, aun rosa, sus cabellos negros y suaves. Aun no podía saber si ella ha sacado el mismo color de ojos que su padre. 

-Aquí están mis chicas- oí entrar a mi esposo.

Él se sienta en el asiento viéndome atento. Su respiración era calmada, lo pude oír gracias al cómodo silencio que habita en el cuarto de Gisselle. 

—Al fin la tenemos en casa— acaricia mi mejilla con sus nudillos— es increíble lo fuerte que has sido estos días, principessa.

—No lo hubiera logrado sin ti, Mon amour— sonreí ante sus palabras dándole un dulce beso reconfortante en sus suaves labios.

—Te amo— me da un beso en mi frente y luego a Gisselle quien acababa de despertar.

Ella permanece quieta en mis brazos, pero sus ojos recorren todo a su alcance. Mi esposo sonreí acercando su mano para tocar la de nuestra bebé.

Sonreí al presenciar esa hermosa imagen, el suspiro relajante de levi hace que me sienta igual de tranquila.

Durante esa tarde de lluvia nos dispusimos en pasarla juntos. Gisselle dormía en el pecho de levi en lo que veíamos película, el fresco ambienta aún mejor, todo es perfecto junto a ambos.

—¿Crees que ella esté cómoda? —me pregunta mi esposo, entonces me giré a mirarlo.

Sonreí al verlos juntos, mi corazón se llena de amor.

—Ella está bien así —respondí acariciando la espalda de mi bebita.

—De acuerdo.... huele mal.

—¿Huele mal?—pregunté y seguido se escucha como nuestra bebé hace fuerza haciéndose del dos.

Levi me mira haciendo una cara de asco, empecé a reír a carcajadas cubriendo mi boca para no asustar a Gisselle.

—No te rías, te juro que voy a restregar el pañal de Gisselle por la cara— me responde poniéndose de pie— vamos a bañarla.

—Llegas a hacer eso levi y tendrás que firmar el divorcio después—bromeó siguiéndolo.

Él sube las escaleras, detrás de mi esposo iba yo. Viendo su ancha espalda y la pequeña cabeza de nuestra bebé descansar en sus hombros. Al entrar él me entrega a la pequeña mientras le quito su ripita y limpio de ella. Levi se quita su pantalón y su camiseta.

—¿Qué vas a hacer?—lo miré confusa.

—Dámela —entiende sus manos y se la di.

Deja caer el agua tibia en el cuerpo de Gisselle mientras la acaricia con amor y dedicación, algo que jamás creí que vería. Sonreí admirando aún más la escena, me crucé de brazos recostandome por el marco de la puerta viendolos disfrutar del baño.

—Limpiemos esos cabellos negros de la pequeña ackerman— susurra mojando los cabellos de la pequeña.

Levi la limpia con tanta dedicación y cuidado que me derretía el alma.

—¿Te ayudo en algo?— pregunté y él niega siguiendo con lo suyo.

Luego del baño, le di su biberón y sin más, nuestra pequeña quedó profundamente. Con cuidado la deje en su cuna , asegurándome de que ella esté cómoda. Me salí sin hacer ruido y ne dirigí a la habitación que comparto con mi esposo.

—Eres tan dulce con ella, Levi— besé su mejilla y el sonríe.

—Es mi deber.

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Estos días no voy a actualizar, estaré organizando y protegiendo mi cuenta. Las nuevas normas que se vendrán con algo jodidas y temo por mi cuenta.