i really need you daddy [Levi x lectora]

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Era realmente emocionante ver a nuestras familias divertirse, ya a este punto la mayoría estaba ebrios bailando en la pista de baile. Kenny era el alma de la fiesta ya que bailaba tan bien y hacia movimiento que nadie podría, todos reían a carcajadas viendo al castaño en el centro mientras baila, con una copa en manos.

-Dios que vergüenza agena- escuché murmurar a mi esposo y me giré para mirarlo.

-Diviértete- solté acercándome- no seas aguafiestas.

‐¡Ven _____, bailemos!- hange me jala del brazo y me lleva arrastrando hasta la pista, agarro mi vestido para poder caminar hasta la ronda de mis amigas.

Todas me invitaban a bailar, la música era lenta y ciertamente sensual. Reí a carcajadas al ver a Kenny ponerse en medio de nosotras, con su corbata amarrada en su cabeza y moviendo su caderas bajando hacia abajo. Me uní a él empezando a moverme sensualmete mientras kuchel, mis padres, eren y amigas aplaudían. Kenny bailaba realmente bien, como dije, era el alma de la fiesta.

-Muévete señora ackerman- grita mientras hacia unos pasos de baile.

Moví mi cadera de forma circular y lenta mientras me sostendo en hange, mi mirada se fija en mi esposo quien me observa a cierta distancia, su mano izquierda dentro de su bolsillo y en su derecha sostenía una bebida. Mientras bajaba me mira con intensidad, bailé moviéndome lenta y sensualmente mientras observo.

Él sonríe y recuesta su espalda baja en la mesa cruzándose de brazos observándome.

Bailamos él y yo lentamente, la fiesta estaba a poco de terminar. Llegó la hora de lanzar el ramo, así que me puse de frente a todas mis invitadas, ellas esperando ansiosas.

—A las una..... a las dos y a las...— sonreí y lancé hacia atrás mi ramo y todas gritaron mientras alzan sus manos al aire para poder alcanzar. Me volteo y observo que la que agarró el ramo fue Sasha—¡Eso sasha!.— la felicite mientras todos aplaudían, vemos de fondo a Nicolo correr y empezamos a reír a carcajadas.

—Es un idiota— dice sasha entre risas mientras sostiene el ramo en manos.

La fiesta al fin había acabado, me centro en los empleados quienes empiezan a limpiar y acomodar todo.

—Señora Ackerman—La voz de mi esposo llama mi atención.

—¿Si?— me volteo y él me toma de las manos.

—Es hora de irnos a empacar— me responde con una sonrisa en sus labios— tenemos un largo viaje hasta nuestra luna de miel.

—Muy bien— asentí y enrolle mis brazos en su cuello— Así que ¿no vas a decirme absolutamente nada de dónde vamos a ir?.

—No, no te diré nada— responde viendo mis labios y luego mi mirada— sólo puedo decir que empaques tu bikini, nada más.

—Muy bien, esposo.— seguí dándole un beso en su mejilla mientras desarmo su corbata y se la deslizo hasta quitársela— Vamos.

Ambos salimos del salón, caminaba a pasos lentos ya que me dolían mis pies por mis zapatos de tacon. Antes de subir al carro decidí quitármelas, él manejaba rumbo a casa, teníamos poco tiempo para armar nuestras maletas e ir al aeropuerto.
Llegamos y lo primero que hice fue quitarme mi vestido de novia, la cuide perfectamente en toda la tarde y noche, la guardé en su caja y la puse arriba de mi placer. Sonriendo más que feliz de esta linda y única experiencia junto al amor de mi vida, Levi.

—¿Estas lista, principessa? Debemos partir en unos minutos— lo oigo entrar a la habitación, me volteo a mirarlo y me acerque para abrazarlo—¿Sucede algo, Esposa?.