Cap 17 El diario del abuelo, parte 8

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Isaac Narrador: al día siguiente mi mayor problema , fue que habían cerrado todas las puertas de la okiya con llave .

Pero eso no me importaba  , y tampoco me importaba que ahora todos me miraran mal , lo único en lo que pensaba era en escapar y reunirme con mi hermana y con Max .

Me quitaron la tarea de vigilar por la noche y se la dieron a Saki , pero eso tampoco me importo  , pues esa misma noche tendido en mi futon solo podía pensar , en el plan que tenia para escapar .

Esa misma tarde se me había ocurrido algo , mientras limpieba el suelo de una de las habitaciones,  el agua cayó cerca de una ventana del segundo piso , allí fue cuando nació mi idea .

Salir por la ventana .

Fingí estar durmiendo profundamente,  y permanecí allí hasta que todas a mi alrededor a mi alrededor se quedarán dormidas de verdad .

Pensar en mi hermana y en Max esperándome,  me llenaba de valor , para salir por la ventana y caminar por el tejado .

Espere unos minutos,  esperando para comprobar que todas estaban dormidas.

Suavemente y con cuidado me deslice fuera del futon , y salí de la habitación,  nisiquiera me preocupe por llevarme un par de  zapatos .

Me hacerque a una ventana , admito que estuve asustado , terriblemente asustado , escuché las conversaciones de la gente de afuera y por última vez tuve miedo de que me pillaran .

Saque   los pies para fuera  y me las arregle para trepar un tubo al lado de la ventana y llegar al tejado .

Con los pies descalzos,  comencé a caminar por el tejado lo más rápido que pude  , lo que suena más fácil de lo que realmente fue .

Me tomo varios minutos llegar al otro extremo de la okiya,  el edificio pegado al nuestro era ligeramente más pequeño ,por lo que tuve que saltar .

Apesar de la luna era una noche oscura , casi me resbaló,  pero seguí caminando por ese otro tejado , apesar de no estar seguro de cómo bajaría, comencé a sentirme feliz .

Comencé a imaginar como sería mi vida con Greta y Max después de escapar , me empecé a imaginar todas las aventuras que tendríamos,  como la de los libros.

Comencé  a dar pasos lentos pero apresurados , uno , dos y tres , lo hacía con cuidado , para que nadie se diera cuenta de mi presencia.

Pero por desgracia,  todo eso era solo la imaginación de un niño .

Seguí dando pasos , cuatro,  cinco , seis , pero el siguiente paso que di no aterrizo en el tejado .

Pues lo siguiente que senti , fue el dolor de mi cuerpo impactando contra el piso , y voces de personas que se habían despertado por el ruido .

Me habían pillado .

Y me había roto un brazo .

Mi plan no funcionó.

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