35.- Can you like me too?

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Había demasiado escándalo en la mansión Kim. "Rosé desapareció" era lo único que murmuraban los trabajadores alrededor. Sana, quién se encontraba encerrada en su habitación escuchaba cada palabra que decían los trabajadores. Los recuerdos de aquel día se hicieron borrosos, no recordaba que había pasado con Rosé. Lo único que recuerda fue haber huido de Dahyun pero lamentablemente está otra vez en el mismo lugar del que quiso escapar. La japonesa se encontraba pensativa en su cama cuando en eso se abre la puerta y deja ver a una Dahyun con un gran ramo de flores y una caja de regalo. Si Sana no estaba de humor ahora mucho menos.

Dahyun: He vuelto. (Mencionó con una gran sonrisa en su rostro).

Al ver qué la contraria no respondió, decidió acercarse y dejar las flores a un lado de ella.

Dahyun: Sé que sigues molesta, créeme que no quería que mi madre te encerrara. (Esta trató de tomar la mano de Sana pero la japonesa la escondió rápidamente) Sana, ¿por qué huiste? sabías que iba a encontrarte y que-

Sana: ¿Puedes irte, por favor? No me encuentro en el humor adecuado para lidiar contigo en este momento. (Mencionó mientras se cubría todo el cuerpo con las cobijas) arruinaste mi vida, no tienes derecho siquiera de intentar convencerme de que te ame o te escuche.

Dahyun: Bien, aunque no quieras oír una palabra mía aún así te hablaré y con toda la sinceridad del mundo. (Se recostó a un lado de la japonesa mirando su espalda fijamente) El día que llegaste aquí ... llamaste mi atención. Quería verte más seguido, y lo sé es raro porque no te conocía. Pero yo quería conocerte y enamorarte, yo quería todo para tenerte conmigo y si quizá sea algo posesiva en ciertos aspectos. Cuando Momo me dijo que eran pareja me enfadé demasiado, no podía aceptar el hecho de que la mujer que llamó mi atención tuviera pareja. Sana, quiero que me escuches más seguido, que me mires más seguido y pienses en mi. ¿Podrías gustar de mi también, por favor? Te estoy siendo sincera, estoy abriendo mi corazón contigo.

La japonesa tenía los ojos cerrados, quería dormir o desaparecer para no escuchar su voz pero no pudo hacerlo, no le quedó de otra que escuchar cada palabra que salía de su boca. Esta rodó un poco los ojos y volvió a sentarse en la cama para así poder mirar a Dahyun a los ojos.

Sana: Responde con sinceridad entonces.

Dahyun: Claro, te diré todo lo que tú quieras.

Sana: ¿Qué le hiciste a Rosé?

Esa pregunta hizo que Dahyun se quedará pálida e inmóvil. Esperaba más algo acerca de Momo o similar pero no que le mencionara a Rosé, sobre todo cuando ellas no interactuaron hasta donde ella sabía.

Dahyun: ¿Qué dices?

Sana: Lo que escuchaste, ¿qué le hiciste? Fuiste capaz de traicionar y hacer que Momo fuera a prisión y también le disparaste, ahh y sin mencionar que me chantajeaste y me obligaste a no sólo casarme contigo sino que también me obligaste a dormir contigo.

La contraria simplemente se levantó de la cama y puso la caja de regalo sobre el colchón. No dijo nada más y en su intento de huir de la habitación escuchó la voz de su esposa.

Sana: ¿Huyes? Entonces si le hiciste algo. Y así quieres que llegue a ... ¿amarte? Dios, eres tan desagradable.

Dahyun no aguantó más lo que la contraria le decía y cerró la puerta con seguro. Sana miró a lo lejos que Dahun no hacía ni decía nada. No le tenía miedo, le tenía asco. La japonesa al ver qué no pasó nada más decidió volverse a recostar y a cubrirse con las cobijas pero Dahyun se lo impidió. Esta sujetó con fuerza ambos brazos de Sana hasta el punto de dejarle la marca de sus dedos, Sana no podía hacer otra cosa sólo quejarse.

Sana: ¿Qué crees que haces? (Mencionó un poco alterada tratando de soltase de su agarre).

Dahyun: Enseñarte a no hablar de más.

Fue lo último que dijo Dahyun para así volver abusar de Sana. La japonesa solo podía permitirse llorar en voz baja, no podía gritar porque sabía que le iría peor. El tacto de Dahyun le daba náuseas, sentir los labios de Dahyun en su piel le daba asco. La japonesa deseaba que todo terminara en ese momento, quería morir. Deseaba que Momo apareciera y se la llevará lejos, ansiaba que Momo la rescatara y volviera amar.

Pasaron alrededor de dos horas y Dahyun ya había abandonando la habitación de Sana. Esta por su parte estaba dándose un baño, era la tercera vez que se bañaba. No quería rastro de las caricias ni de los besos de Dahyun. La japonesa tenía varias lágrimas recorriendo sus mejillas. Lágrimas que se escondían tras las gotas de agua que caían de la regadera. Pasaron unos minutos y la japonesa ya se encontraba mirando su cuerpo desnudo en el espejo. Las marcas de las manos de Dahyun eran demasiado visibles en la piel de la japonesa, no saldría de su habitación ni para desayunar ya que no había ropa que cubriera tales toques.

Sana: ¿Esta es la vida que tienes para mí, señor celestial? Quién quiera que sea el poderoso ... Por favor, sácame de este infierno, no lo soporto. (Mencionaba la japonesa en lágrimas). Regresame a Momo, te lo ruego. Sólo queríamos una vida tranquila y feliz.

La japonesa cerró los ojos e imagino que Momo estaba ahí junto a ella. Tocando y acariciando sus heridas, sabía que tenerla cerca la curaba de todo tipo de males.

[Flashback]

Sana estaba recostada en la cama de Momo mientras miraba el techo fijamente. Aquel día habían planeado subir una pequeña colina para poder observar la ciudad pero no fue posible porque Sana se había lastimado el tobillo trabajando.

Momo: He vuelto, amor. (Mencionó con una sonrisa en su rostro haciendo a su novia sonreír).

Sana: Momito, te extrañe.

Momo se acercó a su novia y le dio un corto beso en los labios. Sana se incorporó en la cama con cuidado para poder abrazar a su novia. Estar en sus brazos curaba todo tipo de dolores, se sentía calida, protegida y amada estando con Hirai. Las manos de Momo recorrían la espalda de su novia mientras dejaba algunos besos en la cabeza de Sana.

Momo: ¿Aún te duele tu tobillo? ¿Necesitas algo, mi amor?

Sana: Te necesito a ti porque tú eres mi cura para cualquier mal que tenga, Momito. (Mencionó mientras tomaba las mejillas de la contraria en sus manos) Estemos juntas toda la vida, conocerte fue lo mejor que me pasó.

La contraria no lo dudó ni un sólo segundo y juntó sus labios con los de Sana. Aquél beso que comenzó como algo lento y tranquilo se fue intensificando. En ese momento solo existían ellas dos en el mundo, los besos de Momo hicieron que algo en Sana se encendiera queriendo llevar ese beso a algo más íntimo. Momo recostó entre besos a Sana en la cama, tratando de no lastimarla más de lo que ya estaba, ese día era sólo de ellas.

Momo: Nunca dejaré de amarte. (Mencionó entre besos) quiero hacerte mía otra vez, ¿puedo?

Ambas se miraron a los ojos, Sana miró el brillo en los ojos de Momo y con un beso aceptó la propuesta de su novia. La manera en que Momo la tocaba y la besaba la volvían loca. Sólo ellas saben cuando amor se daban y cuánta pasión había en ellas. Aquél día Momo se dedicó a recordarle a Sana lo mucho que la ama, lo mucho que la necesita en su vida. Todos esos momentos felices y llenos de amor ahora son sólo un recuerdo para la japonesa.

[Fin del Flashback].

La japonesa abrió los ojos al escuchar que tocaban a la puerta del baño, era la voz de Chaeyoung quien estaba preocupada por Sana ya que llevaba mucho tiempo en el baño.

Chaeyoung: Señora, ¿se encuentra bien? ¡Respóndame! (Mencionó con evidente desespero).

La japonesa sólo se cubrió con la bata y abrió la puerta no sin antes haberse limpiado las lágrimas. Chaeyoung al ver el rostro de Sana la abrazó dejando a la contraria muy sorprendida. No eran unidas ni siquiera conocidas, al escuchar los sollozos de la más bajita decidió corresponder el abrazo.

"Todo está bien". Pero, ¿Sana realmente lo estaba?

。゚・ 𝙊𝙣𝙘𝙚 𝙪𝙥𝙤𝙣 𝙖 𝙩𝙞𝙢𝙚| 𝘽𝙞𝙧 𝙕𝙖𝙢𝙖𝙣𝙡𝙖𝙧.⊰Donde viven las historias. Descúbrelo ahora