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Su mente no ha dejado de pensar en todas las visiones que ha tenido hasta el momento. Quizá lo mejor sí es que se aleje de HunterX. Pero aquí está, mucho antes de la media noche, sentado en el estacionamiento para empleados, escondido detrás de un auto viejo y maltratado. Mira su celular, todavía faltan treinta minutos para que comience su turno. No ha dejado de sentir ese sabor en su boca, cada vez que pasa saliva lo siente ahí, y en su estómago siente el fantasma del dolor. Tiembla. "Para que no muera Adachi también", eso pensará en el futuro. ¿Por qué tendría que salvar a Adachi? Es una persona que nunca se mete en problemas y ha sido tan bueno con todos los nuevos. 

— 待って! 安達さん、待ってください。¹

Y eso es lo único que escucha y lo único que entiende Jeff de la conversación entre Adachi... y otra voz. Sabe que lo ha escuchado antes, sabe de quién es esa voz, pero no recuerda. Se asoma un poco, todavía escondido por el auto. Puede ver a Adachi con, por supuesto que lo conoce, el asistente personal de Pete, Karan. Tiene su mano en el hombro de Adachi y lo mira al rostro, intensamente. Adachi responde algo en japonés, rápido, en voz baja. Entonces Karan vuelve a mirarlo por unos cuantos segundos.

— りょうかいしました² — dice Adachi y se separa gentilmente de Karan.

— それでは行きますよ³。

Adachi se revuelve el cabello y hace pequeños ruidos de frustración cuando el asistente ya no está. Definitivamente esto no le agrada a Jeff, porque ver esto de Adachi solo hace que crezcan sus sospechas. Sigue sin ser suficiente como para que alguien lo mate, pero es demasiado sospechoso. ¿Karan y Adachi son espías? Y esa forma tan extraña en la que conversaron, Karan solo habló dos veces. Una al inicio y otra al final. Abre los ojos. ¿Es algún poder de Adachi?

El sabor del veneno se hace todavía más presente en su boca, puede olerlo en sus labios y puede sentirlo recorriendo su garganta y esófago. Detiene las ganas de vomitar hasta que Adachi se va. Corre hacia un arbusto cercano y vacía lo poco que tenía de su comida, de antes de tener la visión.

Intenta no pensar en la conversación que presenció, si eso puede ser llamado una conversación. Sobre todo intenta controlar sus pensamientos cuando está cerca de Adachi. No sabe cómo funcionan sus poderes, si necesita de contacto visual o físico, si puede ver todos sus pensamientos o solo los que tiene en el momento. Hay muchas variantes. Ahora se pregunta cuántas veces ha pensado en sus planes durante el trabajo, cuántas veces ha pensado en sus siguientes pasos, incluso ha estado pensando en sus visiones y otros detalles personales.

— ¿No trajiste nada de comer de nuevo? — pregunta Way.

— No tengo hambre. Creo que estoy enfermo — responde Jeff.

— Entonces pide el día, ¿te acompaño?

— Quiero terminar la jornada — Jeff niega con la cabeza, además quiere ver a Alan.

— ¿Quieres té? — pregunta Adachi.

— Quizá un poco, gracias.

A pesar del té, nada mejora. Incluso se siente peor a medida que progresa la noche y Alan no va por él. En el día tampoco le escribió. Las palabras de Kawi lo hacen dudar. Conoce al tío desde hace muy poco, tal vez sí es de la clase de personas que se aprovechan de sus trabajadores y después los echan.

Con las pocas fuerzas que le quedan termina su jornada y acepta que Way lo lleve hasta el apartamento. Entre él y Adachi lo llevan hasta la cama.

— ¿Ustedes quiénes son? — pregunta Kawi a los dos desconocidos.

— Compañeros de Jeff — responde Way —. Está enfermo. No dejes que vaya a trabajar esta noche. Debería descansar un día o dos.

— Mi número — Adachi saca su tarjeta de un bolsillo y se la entrega a Kawi.

Mañana Será [Alan/Jeff]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora