Mañana Será [Alan/Jeff]

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Kawi se acerca a las barras metálicas y las sostiene con fuerza, se sentían frías a pesar de que es una noche calurosa. Jeff está sentado y Kawi estaba de cuclillas. Jeff resopló y se limpia el sudor de la frente.

— ¿Has visto el futuro? ¿Sabes qué va a pasar?

— No hay nada que puedas hacer — Jeff negará con la cabeza, sintió que la voz se le cortaba —. Todo lo que veo en las visiones sucede, de una u otra forma, todo sucede.

Kawi vio a su amigo luchar contra las lágrimas en vano, pero fingió que no pasa nada, porque sabe que Jeff no quería que lo consolara. Apretó la mandíbula con fuerza. Tendrá que haber algo que pudiera hacer. Un ruido en el pasillo lo asustó, pero es solo alguien caminando. Pisaeng ha prometido que tendrá 10 minutos con Jeff, pero no se confía. Esta vez todo, TODO, estaba en contra de Jeff.

— ¿Puedes darle un mensaje a Alan cuando despierte?

— ¿Va a despertar? — Kawi suspira de alivio, eso será un cargo menos en contra de Jeff.

— Dile que... Sí lo quise — Jeff mordió sus labios, tiemblan, se tapa la cara e intenta dejar de llorar.

— Vamos a sacarte de aquí, Jeff. Vas a decírselo tú mismo. Vas a pedirle perdón.

— ¡No! ¡No voy a salir de aquí! ¡Ni mañana ni en veinte años!

Jeff se limpiará el rostro con ira, no hay nada que pueda hacer. Ni Kawi ni Pisaeng ni nadie. Cuando Alan despierte, él estará muerto, será cenizas. Eso es todo lo que quedará de él. Antes de la condena, alguien lo matará.

Kawi suelta las barras y miró a su amigo con temor.

— Eso no va a pasar. Voy a viajar — Kawi susurra, para que nadie los esuche —. dime qué día, a qué día tengo que ir para arreglar esto.

— No, Kawi, tu vida es casi perfecta ahora, se vendió la canción que escribiste, te van a comprar otra. Pisaeng te ama y tú a él. No puedo dejar que hagas esto.

— ¿El día del incendio?

— ¡Kawi! ¡No! ¡Hablo en serio! — Jeff alzó la voz y se acerca más a los barrotes.

— Dime a qué día o viajo a ese día.

— Kawi, no — susurra Jeff.

— Dime, no quiero ver morir a mi mejor amigo. Dime. Por favor.

— Antes del accidente de Babe... — Jeff lo dijo para sí mismo y después le hablará a Kawi —. Ese día en el que Alan me recogió de clases.

Quizá no funcione, pero tampoco quiere poner a Kawi en peligro. Si funciona, si cambian las cosas un poco, si al menos puede morir después de ver a Alan una última vez, si pudiera pedirle un último favor...

— ¿Y qué te digo?

— Dime que tengo que cambiar algo, que tengo que salvar a Babe, que no puedo dejarlo competir en su próxima carrera.

— ¿También te digo lo de...?

— No. No me digas nada más — Jeff lo interrumpió.

— Pero tienes derecho a saberlo.

— No creo que sea lo mejor tener eso en mi mente. Solo dime... dime que tú vas a morir si no salvo a Babe, que tuve una visión. De seguro voy a salvarlo, porque yo tampoco podría ver morir a mi mejor amigo.

— Voy a ir ya mismo — Kawi parpadea para apartar las lagrimas de sus ojos, tomará la mano de Jeff y le ha dado un aprentón.

Kawi desaparece ahí mismo, en frente de sus ojos y el mundo ha temblado porque alguien rompe las reglas del universo. Y Jeff lo sentirá en su pecho, que las cosas estaban cambiando. El también cerró los ojos y piensa en Alan.