La muerte de la guerra

Capitulo 6

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Resumen:

Ambos Rhaenyras hablan un poco más sobre las diferencias en sus mundos. Aemond y Visenya que tengan buenos días 😳. Espero que les guste. 🥰

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Rhaenyra no disfrutaba ver a quien se suponía era su hija casada con el hombre que había matado a su hijo, aunque no fuera estrictamente cierto, el Aemond de este mundo no había hecho nada, pero aun así era difícil. Visenya y Aemond se amaban y juntos formaban una hermosa familia. Todo eso no la hizo sentir mejor con respecto a las cosas. Este mundo era confuso y no estaba segura de que le gustara. Se sorprendió cuando vio a Harwin Strong, por alguna razón creyó que él también estaba muerto en este mundo. Verlo de nuevo fue como tener a Lucerys parada frente a ella, la había golpeado fuerte.

"Cada vez que te veo, tienes una expresión pensativa en tu cara". La otra Rhaenyra se sentó frente a ella y le sonrió. “¿Estás pensando en tu hijo?”

"A veces." La mayor parte del tiempo, pero ella no quería decir eso. “Hay muchas cosas de las que tengo que preocuparme. Hijos míos, una guerra próxima y la posible muerte de las personas que amo”.

"Sí, no debe ser fácil". La otra mujer miró a su alrededor y dejó escapar un suspiro. “No puedo imaginar lo que debe ser que te quiten a tu hijo y todavía tener que preocuparte por una guerra próxima”.

"No es facil." Rhaenyra no había podido dormir bien por la noche desde que le informaron de la muerte de su padre. "No he tenido un momento de paz desde que empezó todo esto".

La otra mujer la miró y no dijo nada por unos instantes.

"Quería preguntarte algo". Rhaenyra asintió mientras tomaba un sorbo de su té. "¿Qué pasó entre tú y Harwin Strong?"

"¿Qué quieres decir?" Rhaenyra se tensó y no pudo mirar a la otra mujer a los ojos.

"Vi la forma en que lo miraste, la forma en que tu cuerpo se tensó y cómo a Daemon no le agradó tu reacción". Rhaenyra tomó otro sorbo de té, más que nada para no tener que responder la pregunta. “También recuerdo que Aemond dijo que tus hijos eran bastardos, ¿Harwin Strong es el padre de tus hijos?”

No debería haberle sorprendido que la mujer hubiera llegado a esa conclusión. Rhaenyra no se avergonzaba de sus hijos.

“Sí”, la otra mujer levantó una ceja pero no dijo nada. “Cuando mi padre me obligó a casarme con Laenor, supe que las cosas nunca funcionarían entre nosotros. No estaba interesado en mí ni en ninguna otra mujer. Él no pudo cumplir con su deber y yo necesitaba hijos”.

"¿Por qué te casaste con Laenor si sabías que había cosas entre ambas que nunca funcionarías?"

"Porque mi padre dejó muy claro que si no me casaba con Laenor, me desheredaría".

“Mi padre me dijo lo mismo”. La otra mujer se sirvió un poco de té. “Se puso furioso cuando dije que no, especialmente cuando descubrió que estaba embarazada. Él y Corlys decidieron enviar a Laenor a Rocadragón e intentar obligarnos a casarnos. Cuando todavía me negué, me desheredó y dejó claro que nunca sería reina”.