Bandida | Jujutsu kaisen

Capitulo 20

Trato de buscar a los demás, probablemente alguien necesite ayuda.

—Yamada!— escucho el grito de nishimiya y volteo en su dirección, ella aterriza llevando consigo el cuerpo inconsciente de inumaki.

—Que ocurrió?— le pregunto preocupada, claramente uso si técnica demás pero debe haber una muy buena razón, el peliplata conoce sus límites y no es así de descuidado.

—Una maldición.

Yo siento y tomo el cuerpo de inumaki para quitarle el peso muerto de encima a nishimiya.

—Asegurate de que estén bien, yo llevaré a inumaki a un lugar seguro, si alguien más queda incapacitado me avisas inmediatamente.

Ella asiente y vuelve al aire.

Subo el cuerpo de inumaki a mi espalda y comienzo a correr hasta la salida del bosque para sacarlo de la pantalla.

Para mí suerte lo logro lo cual me sorprende en su momento, del otro lado estan casi todos luchando, pero logro ver a nobara y me acerco corriendo a ella.

—llevalo con Shoko, necesito volver a entrar— le digo rápida y le tiendo el cuerpo de inumaki, ellos lo recibe confundida y yo vuelvo corriendo siguiendo la dirección que tomo hace un rato nishimiya, y justo a tiempo recibo una llamada de ella.

—Ya no necesitamos tu ayuda, panda se encarga del resto.

Luego de eso cuelga antes de que pueda responder.

Bueno

Me vuelvo a nobara y entonces recuerdo.

—Dónde está Satoru?— pregunto extasiada, tengo que advertirle sobre la maldición.

—No lo sé hace un segundo estaba por allá con el viejo y la señorita utahime.

Asiento y corro en la dirección señalada hasta que lo veo completamente solo sentado de piernas cruzadas.

—Es encerio?— pregunto sería y el me mira sonriente.

—Katsuki querida, cómo estás? Espero que bien...

—No tenemos tiempo para esto, la maldición cambiaformas está aquí, estaba luchando contra ella pero desapareció de un momento a otro y...

Antes de continuar siento una palmada en mi cabeza y al mirar al culpable me encuentro a satoru con una sonrisa paternal.

—No te preocupes lo tengo todo bajo control— dice y yo suspiro.

—Se nota— respondo seca mientras me alejo de su toque, nunca me ha desagradado su toque no entiendo este sentimiento de repele tan repentino pero no tengo tiempo para pensar en eso, será mejor que ayude a los chicos.

Vuelvo a entrar a la pantalla y sigo la fuente de la imponente presencia que se siente en el ambiente.

En el camino me encuentro con panda cargando el cuerpo de megumi y maki.

—Megumi!— corro a ellos y reviso a fushiguro en busca de heridas graves.

—Estoy bien— me dice intentando tranquilizarme y yo lo miro mal.

—bien? Tienes un agujero en el pecho, será mejor que vayas a dónde Shoko y descanses.

Estoy por alejarme pero el brazo de megumi me detiene.

—Ayuda a itadori por favor— me dice serio.

Siento que su toque me quema así que alejo mi brazo de su agarre y asiento para luego continuar mi camino.

No tardo en llegar y veo a itadori junto a Toudou preparándose para pelear contra la maldición árbol de la otra vez.

—Itadori!— grito y corro hacia el.

El me mira mal y yo me freno en seco.

Que sucede?

"Esto se va a poner bueno"

Ignoro a sukuna, y me acerco a ambos hombres para ayudarlos, Toudou me mira burlón pero solo lo ignoro.

—En que ayudo?— pregunto sería.

—En nada, podemos solos— la frialdad en la voz de yuji me sorprende y me molesta.

—Y a ti que te pasa?— le pregunto molesta.

—Concentrate Yamada!— me grita Toudou.

—Tu te callas— le respondo aún más molesta.

Me volteo hacia yuji tratando de averiguar que le pasa, su corazón está acelerado pero el no poder ver su expresion me está matando, pienso en levantar la venda pero lo descarto, estamos en plena batalla tengo que ignorar la situación, ya luego hablaré con yuji.

—Terminen rápido con esto— digo mientras me alejo de ellos.

—a dónde vas?— escucho a itadori titubear pero no volteo.

Algo está ocurriendo, siento una presencia nueva, esto no ne gusta.

"Cada vez se pone más bueno"

Niego molesta y comienzo a correr en dirección a la energía del nuevo intruso.

Corro durante bastante tiempo, no tenía ni idea de que este lugar fuera tan grande. Hasta que por fin siento como la presencia se vuelve cada vez más fuerte hasta que me doy cuenta que no es alguien, es algo.

Me acerco con cautela al pequeño bulto cubierto por una tela blanca, el cual desprende cantidades absurdas de energia maldita.

"Abraxas"

Después de eso todo se vuelve negro.