Bandida | Jujutsu kaisen

Capitulo 07

No soporto más a sukuna, ya llevo alrededor de 2 días en este sótano y mi mayor tormento es la constante voz de sukuna en mi cabeza. Parece que por alguna razón le gusta más estar en mi cuerpo, lo que me hace estar en constante alerta de que no tome el control, pero gracias a qué mi poder se basa en controlar otros poderes me es relativamente fácil.

—Yamada!— La mano de yuji se mueve frente a mi, y yo la golpeó apenas reaccionó— Auch!

—Lo lamento, fue un reflejo— me disculpo y luego lo miro, tiene el cabello despeinado y grandes ojeras bajo los ojos, no está en su mejor momento y puedo asegurar que yo tampoco.

—¿Qué necesitas?— le pregunto curiosa.

—Nada, solo me parecía que estabas demasiado inmersa en tus pensamientos y ya me sentia solo— dice lo último con un puchero y yo rio con fuerzas.

—Eres un bebé, yuji— el se ríe conmigo y ambos continuamos viendo la horrorosa película frente a nosotros, se trata de una especie de ciempiés humano donde todos están cosidos unos con otros, la verdad la película es asquerosa y rápidamente me aburro así que me vuelvo a distraer peinando a itadori con todos los estilos que se me ocurren en el momento.

—Yuji! Katsuki!— volteo al oír mi nombre y veo a gojo con las manos en los bolsillos.

—¿Que pasa? ¿Que ocurrió con el mandado?— le pregunto aún acariciando el cabello de yuji quien ronronea como un gatito.

—Vamos a salir— me dice con una sonrisa y yo asiento feliz apartandome por fin de itadori.

—Que haremos?— le pregunta yuji interesando.

—Es una lección extracurricular, a ti yuji, te enseñaré sobre las expansiones de dominio, y a ti katsuki, te daré la posibilidad de entrenar tu habilidad con una maldición bastante fuerte.

Yo asiento feliz y algo asustada, satoru nos toma a ambos del brazo y de un segundo a otro ya estamos en un lugar totalmente distinto, estamos en medio de un lago y frente a nosotros está una maldición con cabeza de volcán.

—Estos son Yuji itadori y katsuki Yamada, ellos están aquí para aprender un poco.

—¡¡El monte Fuji está sobre su cabeza!!— señala itadori y yo asiento.

La maldición mira a ambos hombres junto a mi pero en un momento posa su mirada sobre mi de forma que me siento algo incomoda, su mirada me trasmite una especie de corriente, y escucho la voz de sukuna en mi cabeza.

"Ese idiota no me agrada"

Me golpeo la cabeza como reflejo tratando de callar su voz y eso hace que ambos hombres me miren raro y yo sonría nerviosa.

—Las voces— digo como si eso lo explicará todo, y está vez escucho la risa de sukuna lo que provoca que suelte un gruñido.

—¿Por que están esos niños aquí? ¿Para actuar como escudo?— pregunta la maldición a gojo.

—¿Escudo? No es eso, ¿te lo dije, no? Están aquí para aprender algunas cosas.

—Trajiste a tus aprendices contigo, que estúpido.

—No hay problema, después de todo eres débil.

Parece ser que las palabras de gojo lo afectaron bastante, pues los volcanes sobre su cabeza erupcionan.

"Su punto de quiebre es su ego, que idiota lo demostró demasiado fácil"

—Callate— gruño y eso provoca que itadori me mire extrañado, a veces me preguntó si no está extrañado por la ausencia de la voz de sukuna en su cabeza, pero el parece no tomarle importancia— no es contigo.